Napolitano asegura que los "grupos de expertos" terminarán su trabajo en 8 o 10 días
- El presidente italiano lamenta tener un fin de mandato tan "surrealista"
- Se han formado dos grupos, uno socioeconómico y otro jurídico-institucional
- Intentarán sacar al país de la parálisis política
El presidente de la República italiana, Giorgio Napolitano, ha asegurado en unas declaraciones que los "grupos de expertos" por él creados para proponer un plan de reformas políticas deberán terminar su trabajo en 8 o 10 días.
"El periodo correcto debería ser de 8 o 10 días", ha dicho Napolitano en un comunicado colgado en la web del Quirinal.
Napolitano se ha reunido este martes con las diez personalidades invitadas a formar parte de las dos grupos de trabajo, uno socioeconómico y otro jurídico-institucional, cuya creación anunció el sábado pasado.
El presidente fundamentó la creación de estos grupos de trabajo con el argumento de que, ante la falta de acuerdos entre los partidos políticos para formar gobierno, serán ellos los que intenten sacar al país de la parálisis política en la que se encuentra tras las elecciones celebradas los pasados 24 y 25 de febrero, en las que ninguna fuerza obtuvo una mayoría suficiente.
"Sabios" para una "emergencia social"
La Presidencia italiana había subrayado anteriormente que estas dos comisiones tienen "carácter informal" y que el objetivo de la iniciativa asumida por el presidente de la República "es exclusivamente de exploración".
Para uno de los "sabios" de la comisión socioeconómica, Filippo Bubbico, del Partido Demócrata (PD), "la auténtica emergencia es la social y hay que intervenir inmediatamente a partir de las cuestiones fiscales".
Por su parte, Angelino Alfano, secretario general del partido de Silvio Berlusconi, Pueblo de la Libertad (PDL), dijo que el centro del problema no se ha resuelto con la iniciativa de Napolitano y que para su formación la alternativa es "clarísima": o se llega a un Gobierno de concertación o, en caso contrario, es indispensable celebrar inmediatamente elecciones anticipadas en junio.
La decisión de Napolitano de elegir una tercera vía -la creación de dos comisiones de "sabios"- para resolver la situación de ingobernabilidad de Italia se perfila como el próximo gran debate político.
Las comisiones elaborarán varios puntos programáticos que puedan ser aceptables por los distintos grupos políticos y que resulten urgentes para Italia.
Reformas electorales o de la financiación de partidos
La reforma de la ley electoral, la reforma de la financiación públicas de los partidos, la Ley de Estabilidad, la rebaja del impuesto sobre bienes inmuebles de la primera casa a las clases más desfavorecidas y la reducción del número de parlamentarios, son algunas de las propuestas que comenzarán a dar forma las comisiones y en las que coinciden la mayoría de los partidos.
Pero este "Gobierno del Presidente" (como lo denominan los medios de comunicación) o "Gobierno de baja intensidad política" para sacar adelante al país de la parálisis política, sin contar con los partidos que concurrieron a las elecciones, solo está apoyado explícitamente por el primer ministro en funciones, Mario Monti, paradójicamente el gran derrotado en los comicios.
Las fuerzas políticas comienzan a desmarcarse de la decisión de Napolitano, de 88 años, y la han interpretado como una invitación al gobierno en funciones del tecnócrata Monti a seguir trabajando para brindar una imagen de estabilidad y seriedad de Italia ante la opinión pública internacional y los mercados.
El Partido Demócrata (PD), liderado por Pier Luigi Bersani, el gran derrotado en este período postelectoral al no lograr formar Gobierno, se ha mostrado dispuesto a acompañar de modo responsable todo el recorrido propuesto por el presidente de la República, aunque abunda en la necesidad de un Gobierno formado por políticos.
El líder del Pueblo de la Libertad (PDL), Silvio Berlusconi, quien todavía no se ha pronunciado sobre la tercera vía de Napolitano, ha venido insistiendo estos días en que la única solución para que Italia salga de la parálisis creada por los ajustados resultados de las elecciones es la de formar un Gobierno de unidad nacional.
El Movimiento 5 Estrellas, del cómico Beppe Grillo, se adjudicó el plan de Napolitano, pues a su juicio recoge su propuesta de dar un mayor peso al Parlamento.
El cómico sostiene que las comisiones que han de formarse son las parlamentarias, porque el país no necesita a los "misteriosos negociadores o mediadores que operan como grupos de sabios, ni a las 'cuidadoras de la democracia', sino permitir que funcione mejor el Parlamento".
Napolitano, desesperado
El presidente de la República ha mostrado su enfado ante las críticas del líder de centroderecha, Silvio Berlusconi, que ha tachado su plan de "una pérdida de tiempo que la economía no puede permitirse", después del fracaso de su propuesta a Bersani de formar Gobierno.
"Después de siete años, mi mandato termina de una manera surrealista. Me encuentro sujeto a reacciones absurdas, sospechas y paranoias incomprensibles", ha reaccionado Napolitano, según el diario italiano Corriere della Sera.
Italia se encuentra sumida en su recesión más profunda de los últimos 20 años y, aunque los mercados han permanecido relativamente optimistas sobre la situación polítiva, la economía necesita urgentemente un gobierno.
Napolitano trató a finales de marzo de suavizar las posiciones de los partidos, que se han "atrincherado" desde las elecciones y, especialmente, desde la designación de Bersani como encargado de formar el nuevo Gobierno.