Pescanova presenta concurso voluntario de acreedores en un juzgado de Pontevedra
- Pescanova cree que cuenta con "fundamentos" para seguir adelante
- El presidente de Pescanova vendió casi la mitad de su participación
- La entidad anuncia a la CNMV que elige a KPMG como su auditor
Pescanova ha presentado ante el Juzgado de lo Mercantil de Pontevedra la solicitud de concurso voluntario de acreedores, según ha informado la compañía en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La empresa ha informado, además, que su presidente, Manuel Fernández de Sousa, vendió casi la mitad de su participación en el grupo a lo largo de los meses de diciembre, enero y febrero. Según la empresa, lo hizo con "importantes pérdidas" y "para aportar liquidez" a la compañía.
Concurso de acreedores
La compañía ha precisado que tiene "la firme voluntad" de presentar en el curso del procedimiento "una propuesta de convenio a sus acreedores que posibilite el mantenimiento de la actividad y por, ende, el empleo y la generación de valor". Pescanova considera que cuenta con "importantes fundamentos" para sostener su actividad empresarial y generación de valor.
Recuerda que su negocio se sustenta "sobre todos los pilares, desde la extracción y el cultivo a la elaboración y distribución" y cuenta "con importantes licencias de pesca, barcos pesqueros, piscifactorías, fábricas de elaboración y tratamiento, logística y medios de distribución, que configuran al grupo como uno de los más importantes del sector a nivel mundial".
Además se ha subrayado que la empresa y sus filiales integran el primer grupo pesquero a nivel europeo y se encuentra entre los 10 mayores Grupos del sector a nivel internacional.
Entre sus activos, cita una flota de más de 90 barcos, el valor de sus licencias de pesca, más de cincuenta instalaciones de acuicultura, las fábricas de procesamiento de pescado y la penetración de su marca en el mercado. El Grupo, según remarca, emplea directamente a más de 10.000 personas a nivel mundial y más de 1.500 de ellos en Galicia.
Venta de capital por parte del presidente
En concreto, las sociedades Inverpesca S.A. y Sociedad Anónima de Desarrollo y Control vendieron al mercado un total de 1,986 millones de títulos, representativos de un 6,9% del capital, con lo que la participación de Fernández de Sousa se sitúa en el 7,45% de Pescanova y sigue siendo el mayor accionista, según ha declarado a la CNMV el presidente de la compañía.
En el documento presentado al supervisor bursátil, Fernández de Sousa insiste en que, "preocupado por la situación de tesorería del grupo y las dificultades que Pescanova tenía para financiarse, decidió poner su patrimonio a disposición de la compañía para resolver problemas urgentes de liquidez", dando instrucciones a los administradores de sus sociedades para que el dinero neto resultante de la venta se utilizara de esta manera, añadió la compañía.
No obstante, Fernández de Sousa podría ser sancionado por vulnerar la Ley del Mercado de Valores por la comisión, al menos, de una falta muy grave al no comunicar en su día la venta de un paquete muy significativo de sus acciones que llevó a cabo en diciembre, enero y febrero.
Según la normativa vigente, los administradores y los inversores relevantes están obligados a comunicar a la CNMV los cambios de sus participaciones, y tienen para hacerlo, cuatro días hábiles bursátiles. La última comunicación de cambios en la participación que controla en Pescanova Manuel Fernández de Sousa, antes del hecho relevante de este lunes, tiene fecha de seis de agosto de 2012 y señalaba que controlaba directa e indirectamente el 15,426% de la sociedad.
En un día lleno de comunicaciones a la CNMV, Pescanova también ha señalado que KPMG auditará "a la máxima brevedad, tan pronto como los equipos de trabajo de ambas partes estén disponibles". Horas antes, su auditora, BDO, aseguraba que "no ha incumplido sus obligaciones", como Pescanova apuntó, "ni ha incurrido en un supuesto de mala praxis, por lo que no procede la revocación de su nombramiento".
Fecha límite para cuadrar las cuentas
Por otra parte, Pescanova ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores la documentación complementaria que le había requerido el órgano supervisor, según han informado a Efe fuentes cercanas a la compañía. El envío de la documentación se ha producido apenas tres horas antes de que se cumpliera el plazo límite.
Pescanova tenía hasta esta medianoche para entregar al regulador bursátil las cuentas del segundo semestre de 2012, así como la información adicional que le había requerido, con apercibimiento del régimen sancionador, tras determinar a principios de mes que las informaciones remitidas por la firma pesquera eran insuficientes.
Las cifras conocidas hasta ahora, consideradas incompletas, arrojan una deuda total del grupo de 2.500 millones de euros, según los datos del Centro de Información de Riesgos del Banco de España y, de estos, 1.600 millones corresponden a la matriz.
No obstante, la empresa gallega, según fuentes conocedoras de su situación económica, podría incurrir en pérdidas, con una deuda de 2.700 millones de euros, es decir, unos 1.200 millones de euros por encima de lo que figura en el pasivo auditado (1.522 millones de euros al cierre del tercer trimestre de 2012).