Corea del Norte rechaza una "negociación humillante", pero no se cierra al diálogo
- Tanto Corea del Norte como EE.UU. se abren al diálogo, pero con condiciones
- Pyongyang considera la oferta estadounidense como una "evasión de culpa"
Pyongyang ha declarado que deja una puerta abierta a la negociación para resolver la situación de tensión y amenazas en la Península de Corea pero ha exigido como condición para ello que Estados Unidos cese en su "política hostil y amenaza nuclear".
De esta manera, el régimen de Corea del Norte contesta a la propuesta de retomar las negociaciones para la desnuclearización, respaldada en los últimos días por el secretario de Estado de EE.UU, John Kerry, aunque "no tiene pensado sentarse en la humillante mesa de negociación", ha declarado un portavoz norcoreano de Exteriores.
Kerry ha anunciado en los últimos días que Estados Unidos mantiene abierta la puerta a un diálogo "auténtico y fiable" con Pyongyang para concluir la escalada de tensiones en la península durante una gira asiática finalizada esta semana por Corea del Sur, China y Japón.
Diferencias sobre las bases de la negociación
La estrategia de EE.UU. es encontrar una fórmula que permita volver a las negociaciones a seis bandas para la desnuclearización de la península coreana. En ella participarían EE.UU., Rusia, China, Japón y las dos Coreas, pero el proceso que se encuentra paralizado por Pyongyang desde 2008.
"El diálogo debe estar basado en el principio de respeto a la soberanía y la igualdad", ha señalado el portavoz norcoreano en un comunicado.
Desde Corea del Sur se interpretan estas palabras como un paso adelante, ya que podría tratarse de una muestra de su intención de crear unas condiciones favorables para retomar las negociaciones.
Corea del Norte, por su parte, considera que la propuesta estadounidense "no es más que una hábil estratagema para eludir su culpa en la tensión, al borde de la guerra, pretendiendo alejarse de las acciones militares y defender el diálogo", según ha señalado el portavoz de Exteriores.
Además, ha criticado duramente el despliegue militar de EEUU en la región. Corea del Norte ha anunciado que mantendrá su apuesta de "incrementar sus contramedidas militares de protección hasta que EEUU no cese sus maniobras de guerra nuclear". Unas maniobras que, en su opinión, no descarta que puedan culminar "en una guerra real".