'En el camino', la contracultura en el objetivo fotográfico de Dennis Hopper llega a Málaga

• El Museo Picasso Málaga dedica una exposición a las fotografías de Hopper
• Reúne 141 fotografías de mitos del cine, paisajes urbanos o artistas del pop art
• También se muestran pinturas de Hopper y artistas como Warhol o Lichtenstein
• 'En el camino' podrá verse hasta el 29 de septiembre

El arte fotográfico del actor Dennis Hopper

Una de las facetas menos conocidas de Dennis Hopper (1936-2010), reconocido como actor y, sobre todo, como director, junto a Peter Fonda, de Easy rider (1969), icono de la contracultura de los años 60 en Estados Unidos, es la de la fotografía.

Por delante del objetivo de Dennis Hopper pasó la década de los sesenta en forma de viajes por carretera, paisajes urbanos o sets de rodaje con ídolos del cine. Unas fotografías que ahora podremos contemplar y disfrutar en el Museo Picasso Málagaen la exposición 'Dennis Hopper. En el camino', desde este lunes al 29 de septiembre.

La exposición reúne una amplia selección del legado fotográfico de este mítico actor, siempre en blanco y negro, e incluye imágenes nunca publicadas hasta el momento.

Entre esta selección se podrá contemplar, además de iconos del cine, como Paul Newman o Jane Fonda, políticos como Martin Luther King o músicos o moteros anónimos a la imagen y semejanza de los míticos Wyatt o Billy (los personajes que encarnaron Fonda y él en la mítica roadmovie), a grandes figuras del arte como Andy Warhol, Ed Ruscha o Roy Lichtenstein.

Y es que el inquieto Hopper también fue artista plástico y coleccionista y vivió y reflejó el ambiente de The Factory, el estudio artístico fundado por Warhol en Manhattan, donde producía sus serigrafías en serie, se celebraban fiestas escandalosas, y que frecuentaban desde artistas hasta consumidores de anfetaminas o combinaciones de ambos.

La exposición del Museo Picasso Málaga también incluye una selección de obras de estos artistas del pop art y del propio trabajo de Dennis Hopper como creador plástico.

Fotógrafo prolífico

Con una cámara Nikon que le regaló su primera esposa, Brooke Hayward, comenzó Dennis Hopper en los 60 su prolífica carrera fotográfica, que incluye desde portadas de discos, como la del single de Ike y Tina Turner River Deep-Mountain High (1966) o sus portadas para Vogue.

Una de las personas que le metió el gusanillo de la fotografía fue el actor James Dean, con el que Hopper coincidió, con apenas 20 años, en dos grandes películas, Al este del edén (1955) y Gigante (1956): "Seguramente algún día querrás dirigir películas y no puedes recortar una película, así que tienes que aprender a hacer un encuadre completo, un negativo completo", le decía Dean al aconsejarle que usase la fotografía como práctica previa a la composición de encuadres cinematográficos.

Las 141 fotografías en blanco y negro que incluye la exposición, comisariada por José Lebrero y organizada junto a The Dennis Hopper Art Trust, están tomadas en su mayoría entre 1961 y 1967.

El rodaje de Easy rider en 1969, que resume el espíritu de la contracultura y se convirtió rápidamente en objeto de culto, señala la conclusión estética de la primera época de Hopper como fotógrafo. Tras el filme, Hopper se sumió en un periodo autodestructivo marcado por las adicciones y el rechazo de la industria cinematográfica tras su segunda película como director, The last movie (1971).

Con la excepción del papel precisamente de reportero gráfico en Apocalipse Now (1979), Hopper no conseguiría remontar hasta 1985, con sus papeles en Terciopelo azul (1986) y Hoosiers: más que ídolos (1986), que le valdría su única nominación al Oscar como actor -fue nominado como guionista por Easy rider-.

Su excelentes fotografías han sido recopiladas en distintas publicaciones, como en 1712 North Crescent Heights, editado por su hija Marin Hopper y cuyo título es la dirección de su domicilio en Hollywood Hills en los 60, o más recientemente en Dennis Hopper: Photographs 1961-1967, editado por Taschen.

Experiencia audiovisual

'Dennis Hopper. En el camino' reúne también siete creaciones del Hopper artista plástico, entre pinturas y esculturas, y dos billborads (vallas publicitarias) realizadas por él.

También hay una cuidada selección de extractos de sus películas, hecha por la Cinémathèque Française, y la proyección de tres pruebas cinematográficas que le hizo Warhol en 1964, además de un conjunto de cartlees de películas en las que Hopper participó y de la época.

La exposición tiene además banda sonora propia con temas de James Brown, Ike & Tina Turner, The Byrds y Neil Young, las míticas canciones que sonaban en Easy rider, sonando en las salas.