Enrique Sánchez Abulí regresa al cómic con 'La nieve y el barro'
- Historia sobre pícaros y caballeros ambientada en la Guerra de los Cien Años
- De nuevo colabora con el dibujante Oswal ('Historias tremendas')
Enrique Sánchez Abulí, padre de Torpedo 1936 (posiblemente el cómic español para adultos de mayor éxito internacional) regresa al cómic, con La nieve y el barro (Panini), una historia ambientada en La Guerrra de los Cien Años (en Francia), en la que se cruzan Condes, Obispos, caballeros de flamente armadura, soldados y muchos pícaros. Uno de los títulos imprescindibles del año, en el que el guionista ha vuelto a colaborar con el gran dibujante argentino Oswal (13 relatos negros, Historias tremendas)
"La historia -nos cuenta Abulí- tiene como fondo la Guerra de los 100 Años, en Francia, pero ese escenario es solo una excusa para contar una historia humana con fondo histórico. Podía haber elegido cualquier guerra en España, China o Estados Unidos, pero preferí Francia porque he leído mucho sobre historia francesa y esa guerra en concreto y me interesa”.
"Es una historia que quería escribir desde hace 20 años, la tenía en la cabeza pero no la acababa de ver, por lo que la iba posponiendo. La probé con un dibujante, luego con otro, pero por un motivo u otro no conseguía publicarla ni interesar a un editor. Hasta que un día Oswal, con el que había trabajado en Historias tremendas, me dijo que por qué no hacíamos algo juntos. Yo le dije: tengo una historia que quiero hacer pero es muy larga, y contestó: “es igual”. Es en color -le dije-, “es igual” -apuntilló-. Y nosotros ya somos mayores... “es igual” -replicó-. Así que le dije: "se titula La nieve y el barro". “Es igual” -contestó-. Y empezamos a hacerla”.
“Y según fui revisando textos antiguos y añadiendo alguno moderno, me dí cuenta de cómo tenía que acabar la historia. Poco a poco y trabajando mucho me salió. Nunca había escrito una historia de ciento treinta y siete páginas, nunca… y acabé hecho polvo. Dejé la brida suelta a la historia y llegó a donde llegó”.
"No tiene nada que ver con Torpedo"
Muchos echarían de menos al que fuera uno de los grandes del cómic. Y buscaran el estilo que le hizo famoso en seris como Torpedo 1936, Alex Magnum o Historias tremendas. “En la historia se nota mi estilo, pero está en otra honda. Hay quién piensa que soy especialista en historias cortas y, realmente, es lo que he hecho durante muchos años, pero hoy en día el mercado no quiere historias cortas. No hay revistas periódicas. Por eso he hecho lo que se llama ahora una novela gráfica, que no deja de ser un cómic largo”.
“Es verdad que hay dos asesinos que pueden recordar el humor negro de las historias de Torpedo en algún momento, pero es un trabajo que se diferencia mucho. Si no llego a firmar el cómic seguro que nadie me reconocería. A veces me puede salir el ramalazo de Torpedo, pero yo no lo veo así. Las Historias negras se parecen más a Torpedo que esto. La nieve y el barro no tiene nada que ver con Torpedo”.
"Los personajes de Oswal están vivos"
También hay caballeros de brillante armadura: “Sí, está el personaje de Jerome Whitewash, que tiene algo de Quijotesco. Se me ocurrió que fuera un inglés enamorado de una francesa con la que tiene una hija, pero que se pasa tantos años en la Guerra que, cuando vuelve, confunde a la madre con la hija y pierde el juicio. Es muy importante en la historia y esta familia tiene un destino terrible”
“También me gustaba la idea del caballero que había sufrido mucho e intentaba quitarse la vida de todas las formas posibles sin conseguirlo. No se puede quitar la vida por creencias, por torpeza e incluso porque su caballo no le deja. Ni se puede matar ni consiguen matarlo, porque es un guerrero y pelea hasta el final. Ese tema me gustaba desde hace 20 años. Oswal ha tardado tres años en dibujar la historia, pero yo he tardado veinte en escribirla”.
“Me gusta mucho el estilo de Oswal -confiesa Abulí-, es muy vivo, muy intuitivo. Es uno de los grandes maestros del dibujo. Sus personajes están vivos. Y quería hacerlo en color porque, después de los 13 relatos negros o las Historias tremendas, hemos preferido darle un poco de colorido a esta historia”.
La historia no está relacionada con la crisis
A pesar de que hay quién pueda pensar que esta historia está relacionada con la crisis, según Abulí no es así: “No lo creo, siempre ha habido gente que se aprovecha de otros, que mata a otros, no hace falta ni crisis, y en aquella época se practicaba el aquí te pillo aquí te mato. Por ejemplo, uno de los personajes es mudo y no se puede defender, así que le cargan un muerto y le condenan. También hay una niña a la que llaman “Pan”, que me sirve para explicar el hambre que pasaban entonces”.
Esperemos que La nieve y el barro sea el regreso de uno de los mejorse guionistas del cómic español, aunque Abulí confiesa que es complicado: "Antes tenía editor francés y publicaba en todo el mundo, pero ahora el mercado está fatal. Tengo cuatro proyectos pero todos parados, porque los dibujantes con los que quiero trabajar están muy ocupados. Uno es con Enrique Breccia, pero está muy ocupado, aunque espero que pueda comenzar a dibujar la historia este año”.
“Y -confiesa Abulí- José Luis Córdoba (Director de publicaciones de Panini Comics España) hace tiempo que me persigue para que escriba la novela de Torpedo. Yo le voy dando largas, pero igual me tengo que poner con ella. Ya veremos”.
Haga lo que haga, siempre es un placer disfrutar de la prosa y el ingenio de uno de los grandes guionistas del cómic.