La Unión Europea estudia medidas tras el derrumbe de la fábrica en Bangladesh
- Es la tercera tragedia en seis meses, poniendo de relieve la situación laboral
- Representantes de las compañías se reúnen en Dacca con jefes de la industria
- Los servicios de rescate descartan encontrar más supervivientes
La Unión Europea ha alzado su voz respecto a las condiciones de trabajo en Bangladesh, como consecuencia del derrumbe de un edificio que albergaba fábricas textiles la pasada semana, que ha causado la muerte de cientos de trabajadores.
El último balance de este miércoles da cuenta de 405 muertos y 149 desparecidos, a los que ya no se espera encontrar con vida bajo los escombros, informa AFP.
Unas horas antes, la UE ha anunciado en un comunicado que estudia llevar a cabo acciones que impliquen una mejora en la situación, entre las cuales se encuentra la utilización de su sistema de preferencias comerciales.
Bangladesh tiene en la UE su mayor socio comercial y la ropa que se fabricaba en el edificio, donde se acumularon las negligencias, estaba destinada a minoristas europeas y canadienses.
Este nuevo grave siniestro ha puesto de relieve las pésimas condiciones laborales y de seguridad de los trabajadores del país del sureste asiático, cuyas exportaciones son, en un 80%, de la industria textil.
Un punto de inflexión
"La Unión Europea está considerando una acción apropiada, incluyendo el Sistema General de Preferencias, a través del cuál Bangladesh recibe en la actualidad acceso libre de aranceles y libre de contingentes al mercado de la Unión Europea bajo el marco de Everything But Arms (Todo Menos Armas, una iniciativa de la Unión para importar productos de los países más desfavorecidos), para incentivar la utilización responsable de las cadenas de proveedores en los países en desarrollo", explica el comunicado emitido la noche del martes por la representante de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, Catherine Ashton, y la comisaria de comercio, Karel de Gutch.
Representantes de unas 45 compañías, entre ellas Gap, H&M, Primark y Nike, algunas de ellas sometidas a duras críticas por no exigir seguridad laboral en las fábricas en las que se realizan sus productos, han acudido en los últimos días a Dacca para reunirse con representantes de la industrial local.
Alrededor de 3,6 millones de personas trabajan en la industria textil en Bangladesh, lo que convierte al país en el segundo mayor exportador de ropa del mundo. El 60% de dichas exportaciones termina en Europa, informa Reuters.
Ashton y De Gutch han asegurado que están "profundamente entristecidas por las terribles pérdidas humanas", especialmente teniendo en cuenta que este último suceso viene precedido por un incendio en el que murieron 112 personas en noviembre en otra fábrica de Dacca.
"La magnitud de este desastre y la presunta criminalidad en la construcción del edificio van a ser sacadas a la luz", han asegurado Ashton y de Gutch.