Manuel Robles nos descubre la historia del Studio Ghibli
- Publica la segunda parte del libro 'Antología del Studio Ghibli'
- Y nos descubre los secretos de los creadores de 'El viaje de Chihiro'
Ghibli son los estudios de animación más importantes de Japón, de donde han salido clásicos del cine como El viaje de Chihiro, El castillo ambulante o Ponyo en el acantilado. Los niños japoneses se han criado con sus películas desde hace 30 años. Nos lo cuenta Manuel Robles en la segunda parte de su Antología del Studio Ghibli ((Dolmen Editorial), en la que repasa la historia de estos míticos estudios dirigidos por Hayao Miyazaki y su colega y mentor Isao Takahata.
"He querido escribir estos libros de manera que puedan ser leídos por cualquier persona -asegura Manuel-, al margen de su afición y su nivel de conocimientos. En la primera parte de la Antología me centro en los primeros años de la empresa (desde 1984 hasta 1997), contando como fueron sus orígenes y los proyectos que llevaron a cabo durante ese tiempo. Y en la segunda parte escribo sobre las películas que crearon desde 1999 hasta 2011, el Museo Ghibli y otros proyectos que surgieron como consecuencia de la diversificación que experimentaron como compañía".
"En los libros (sobre todo en el segundo) escribo sobre otros proyectos al margen de las películas, que proliferaron en el Studio Ghibli a principios de este siglo -añade Manuel-. Se trata de anuncios de televisión, cortometrajes de animación, producción de películas de imagen real, diseño para videojuegos e incluso diseño de mascotas. También escribo sobre el Museo Ghibli, haciendo un repaso de lo que nos podemos encontrar en su interior, los contenidos de sus exposiciones, los cortometrajes que se han podido ver, algunos productos de merchandising exclusivos de sus tiendas, entre otras cosas.
"He tenido la ocasión de visitar el Museo Ghibli y fue una experiencia fantástica -comenta Manuel-. No da la sensación de estar en un Museo, sino más bien en una gran escuela donde te explican cómo se logra la “magia” de la animación a partir de imágenes estáticas. En sus diferentes salas te muestran diferentes sistemas para crear animación (tanto en 2D como en 3D), te enseñan los diferentes procesos por los que pasan sus obras: los guiones, la investigación, el diseño, el color, la animación, etc. Pero no todo es didáctico en el Museo Ghibli. También hay salas más lúdicas (sobre todo para los más pequeños) y exhibiciones temporales donde muestran el trabajo de colegas de profesión a los que admiran o de algún tema relacionado con sus ideales.
Hay muy pocos libros sobre Ghibli en castellano
Aunque hace muy poco se publicó el interesante libro El mundo invisible de Hayao Miyazaki (Dolmen), de Laura Montero, Manuel Robles se lamenta de que: "Desgraciadamente hay muy pocos libros en castellano sobre el Studio Ghibli. Aquellos que queremos ampliar conocimientos tenemos que recurrir a libros en inglés, francés, italiano o japonés, claro está. Afortunadamente, de un tiempo a esta parte se han puesto a la venta libros en castellano de esta temática y aumenta el número de páginas web y blogs en castellano que se dedican total o parcialmente a escribir sobre Ghibli".
Según Manuel, lo que hace tan especial a los estudios Ghibli es: "Su filosofía de trabajo, su forma de entender este negocio. Ellos buscan crear proyectos rentables, pero no a cualquier precio. A lo largo de sus casi treinta años de historia han ido evolucionando, pero nunca he tenido la sensación de que se “hayan vendido”. Ellos buscan hacer rentables películas de animación de calidad, pero fieles a sus ideales, los cuales son bastante difíciles de encontrar en el mundo empresarial".
En Japón -nos comenta Manuel- el Studio Ghibli es el responsable de películas icónicas que han acompañado a los niños (y no tan niños) japoneses desde hace casi 30 años. Aunque el Studio Ghibli no se caracteriza por explotar hasta el agotamiento sus licencias, cualquiera en Japón reconoce a Totoro (personaje de Mi Vecino Totoro) o Jiji (el gato protagonista de Nicky la Aprendiz de Bruja) u otros protagonistas de películas más recientes, como Ponyo".
"Creo que la gente, con el paso de los años, ha sabido captar y valorar el gran trabajo que lleva haciendo Ghibli durante todo este tiempo y lo han encumbrado a una categoría que va más allá de la de un “buen estudio de animación”. Sean o no Hayao Miyazaki o Isao Takahata los directores del próximo proyecto del estudio, desde hace años que se levanta una gran expectación entre los medios. Así mismo, a Hayao Miyazaki lo consideran como el Walt Disney japonés, no tanto por su filosofía de trabajo, sino por la huella que ha dejado en el mundo de la animación y los logros que ha conseguido".
Es difícil sustituir a Miyazaki
El problema es que Miyazaki ya tiene una edad y no parece haber un sucesor con su talento, como nos cuenta Manuel: "En mi opinión, Hayao Miyazaki es uno de los mayores genios de la historia de la animación. Será difícil que en los próximos años aparezca una figura con su talento para la animación y, sobre todo, para crear historias de tanta calidad".
"En la actualidad existen algunos animadores de gran talento, pero no sabría decirte a quién se le podría colgar el cartel de sucesor. En cuanto a los directores noveles que han estrenado películas para el Studio Ghibli durante los últimos años, no creo que tengan el talento para convertirse en el sucesor de Miyazaki, pero si el bagaje y la experiencia para hacer películas según los principios del estudio. Esa, en mi opinión, será su princiapal función el día que Hayao Miyazaki deje de trabajar".
La última película de Ghibli, inédita en España
La última película de Ghibli, Kokuriko Zaka-Kara sigue sin estrenarse en España: "Es una historia -nos cuenta Manuel- protagonizada por unos estudiantes de la ciudad costera de Yokohama en el año 1963, poco antes de las Olimpiadas de Tokio. La protagonista de la historia es Umi, una chica de 16 años que debe hacerse cargo del negocio familiar (mientras continúa estudiando) debido a la ausencia de su madre por motivos de trabajo y la desaparición de su padre durante la guerra. Un día en el colegio, a la hora del almuerzo, hay mucho alboroto alrededor del edificio de actividades escolares".
"Uno de sus alumnos (Shun, del Club de periodismo) decide tirarse desde lo alto del edificio a un dique a modo de protesta. Según han descubierto, ese edificio será derribado en breve y los alumnos no están de acuerdo con la decisión. A partir de ese momento, Umi acaba ayudando a Shun para evitar el derribo y comienzan a hacerse amigos. Poco a poco, la relación entre ambos va complicándose ligeramente, mientras van logrando importantes progresos para salvar el edificio de actividades escolares".
"Todavía no se sabe cuándo llegará la película a España -se lamente Manuel-, pues parece ser que las negociaciones se están alargando más de la cuenta. De todas formas, espero que llegue pronto el día en el que podamos disfrutar de esta película".
Las mejores películas de Ghibli
Manuel nos confiesa que sus películas favoritas de Ghibli son: "Sin ningún orden particular, Porco Rosso (1992), La Princesa Mononoke (1997) y El Viaje de Chihiro (2001). Porco Rosso es una debilidad personal, una película atípica en la filmografía de Hayao Miyazaki, pero que me encantó desde el principio. Mononoke y Chihiro creo que son las dos películas más redondas de Hayao Miyazaki. Las películas menos logradas en mi opinión son Puedo Escuchar el Mar (1993) y Cuentos de Terramar (2006).
En los últimos meses se ha rumoreado que Disney podría estar interesado en comprar los Studios Ghibli, algo que horroriza a Manuel: "No tengo constancia de que Disney esté interesada en la compra de Studio Ghibli, pero lo que sí tengo claro es que en el Studio Ghibli no están interesados en formar parte de Disney. Para mi, como aficionado, sería como si el estudio japonés hubiera abandonado su filosofía y se hubiera “vendido”. Creo que esto no sucederá mientras Miyazaki esté vivo".
En cuanto a sus proyectos, Manuel Robles nos cuenta que: "Mi objetivo principal es seguir investigando, aprendiendo y compartiéndolo con aquellos que quieran. El formato es lo menos importante: puede ser desde mi blog (Studio Ghibli Weblog), en forma de ponencia o de libro…"