Botín, Fainé y González declaran que Guindos les citó para hablar de Bankia junto a Rato
- Aseguran que no se trató la salida de Rodrigo Rato, pero sí su plan
- No veían suficientes los 7.000 millones de ayudas planteadas por Rato
- "Bankia era el elefante en la habitación", ha dicho González (BBVA)
- Botín: la mejor decisión fue la adoptada por el Ministerio de Economía
Los presidentes del Banco Santander, Emilio Botín; de CaixaBank, Isidro Fainé, y del BBVA, Francisco González han admitido ante el juez Andreu que fueron convocados por el ministro de Economía, Luis de Guindos, para abordar con él y con Rodrigo Rato la preocupación que existía en los mercados internacionales por la situación de Bankia.
Fuentes jurídicas, citadas por Efe y Europa Press, han destacado los tres banqueros han señalado que en las reuniones -que tuvieron lugar los días 4 y 6 de mayo- se abordó las necesidades de capitalización que tenía la entidad y las ayudas que precisaría para evitar su nacionalización, pero en ningún caso se habló de la salida de Rodrigo Rato de la presidencia de Bankia y su sustitución por José Ignacio Goirigolzarri, que se anunció el día 7.
Rato comprobó entonces el rechazo de los grandes banqueros a su plan de viabilidad, según se desprende de la declaración de Emilio Botín, Isidro Fainé y Francisco González. Solo Fainé ha sostenido que él no pensaba en esas fechas que Bankia tuviera problemas de viabilidad.
Bankia necesitaba más de 7.000 millones
Tanto Botín como González han reconocido que la percepción general era que los 7.000 millones de euros de ayuda que planteaba el entonces presidente de Bankia, Rodrigo Rato, y que se sumarían al dinero del FROB1 (otros 4.465 milllones) eran insuficientes para garantizar su viabilidad. Botín ha asegurado que en las dos reuniones expresó su opinión de que era necesario poner mucho más dinero, en torno a los 15.000 millones. Finalmente, la inyección de fondos en Bankia fue de unos 22.000 millones, lo que llevó a su nacionalización.
Según las fuentes citadas por Europa Press, el más crítico con el plan que Rato presentó el 4 de mayo ha sido el presidente del BBVA, Francisco González, que durante su declaración ha llegado a calificar a Bankia de "elefante en la habitación" y que no le resultaban creíbles las cuentas que Rato había presentado en marzo de 2012, con unos beneficios de 309 millones de euros.
“Botín: no me extrañaron las reuniones, España estaba al borde del rescate“
Botín, que ha negado que se hablara de la dimisión de Rato, que se produjo al día siguiente del último encuentro, ha subrayado que éstos tuvieron lugar cuando España "estaba al borde del rescate" y que por ello no le extrañó la convocatoria. Botín aseguró, además, que la mejor decisión fue la adoptada por el Ministerio de Economía, que conllevó la nacionalización y la inyección de fondos públicos en la entidad.
El presidente de CaixaBank, Isidro Fainé, ha dicho por su parte que él no creía que Bankia tuviera problemas de viabilidad, pero ha admitido que la entidad "preocupaba" en el mercado, que era el principal problema del sector financiero español en aquella época.
Fainé, Botín y González han sido recibidos y despedidos del tribunal por medio centenar de afectados por las participaciones preferentes al grito de "Bankia robando y el Gobierno apoyando", "Si lo sacan en furgón, que lo lleven a prisión" y "Nuestros ahorros, vuestro Botín". En la puerta, también varias decenas de reporteros gráficos.
De Guindos admitió las conversaciones
Las comparecencias de los tres grandes banqueros españoles fueron acordadas por el juez Andreu a petición de la acusación ejercida por UPyD, que quería que aclararan el "objetivo real" de las reuniones después de que, en su opinión, De Guindos respondiera "de forma parcial o incompleta" a las preguntas que se le hicieron sobre las mismas.
La acusación consideró en su escrito que no es "habitual" que los cuatro presidentes de las principales entidades financieras "se reúnan dos veces seguidas en el escaso período de dos días y que, además, la segunda de tales reuniones tenga lugar un domingo, en el despacho oficial del propio De Guindos en el Ministerio de Economía".
El titular de Economía, que ha declarado dos veces como testigo por escrito, admitió conversaciones con Bankia sobre el plan de Rato, pero explicó que las citas "se enmarcaban en los contactos habituales que tenía con los responsables de las principales instituciones financieras" para analizar la situación del sector, la evolución del crédito, el acceso a la financiación y las iniciativas europeas con impacto en el sistema financiero.
Según el ministro, entre los asuntos que se trataron estaban "la crisis de la zona euro, la evolución y perspectivas de la economía nacional e internacional, las principales variables financieras, en particular la evolución del crédito y acceso a la financiación, y las iniciativas legislativas europeas con impacto en el sistema financiero".
Rato, por el contrario, señaló que el ministro De Guindos le transmitió "la urgencia de nacionalizar Bankia".