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Oslo se rinde a Munch en el 150 aniversario del nacimiento del mayor artista noruego de la historia

  • Del 2 de junio al 13 de octubre podrá verse "Munch 150"
  • La muestra reúne 270 obras entre el Museo Nacional y el Museo Munch
  • Están sus obras más famosas, como El grito, y tesoros poco conocidos

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Livets dans
'La danza de la vida' (1899-1900). Edvard Munch.

La capital noruega se viste de gala para celebrar el 150 aniversario del nacimiento del mejor artista noruego de todos los tiempos, Edvar Munch (1863-1944), con la mayor retrospectiva sobre la obra del pintor realizada jamás: más de 270 obras reunidas en la exposición "Munch 150", actividad central del programa conmemorativo del aniversario que celebra toda Noruega.

La exposición abre este domingo 2 de junio y podrá visitarse hasta el 13 de octubre en dos espacios de la capital, el Museo Nacional de Arte de Noruega y el Museo Munch de Oslo -que se abrió precisamente en 1960 con motivo del centenario del nacimiento de Munch-; las dos instituciones que poseen las colecciones más completas del mundo de la obra de este gran precursor del expresionismo.

Además de objetivo de conmemorar tan importante efeméride, la exposición "Munch 150" pretende "ampliar el conocimiento, la curiosidad y el entusiasmo por la vida y el arte de Munch, a nivel local, nacional e internacional", según explica el director del Museo Munch, Stein Olav Henrichsen.

Por este motivo, los visitantes podrán contemplar desde las obras más famosas del pintor noruego, como la más famosa de las tres versiones de El grito (1893) -la obra de arte que probablemente mejor haya plasmado la angustia en toda la historia-, la Madonna (1894-95) o Pubertad (1894-95) y muchos de sus tesoros menos conocidos.

60 años de arte

La muestra abarca un periodo de 60 años, los mismos que dedicó a la pintura este genio llamado Edvar Munch, cuya difícil infancia -su madre y hermana murieron de tuberculosis cuando era pequeño y su padre era un religioso obseso- marcó su personalidad y su estilo artístico: los temas más frecuentes de su obra fueron los relacionados con los sentimientos y las tragedias humanas como la referida angustia presente en El grito, la soledad, la muerte o el erotismo.

Así, "Munch 150" recoge desde sus primeras obras que pintó con 20 años en 1883 hasta que tuvo que dejar sus pinceles poco antes de su muerte en 1944 a los 80 años, convertido ya en un artista reconocido mundialmente.

La exposición, que sigue un orden cronológico, está dividida de esta misma manera en ambos espacios: el Museo Nacional de Arte, Arquitectura y Diseño (Museo Nacional) acoge los trabajos de Munch desde 1882 a 1903 y el Museo Munch sus obras desde 1904 a 1944. Aunque el grueso de las piezas que se exhiben son propiedad de estas dos instituciones, la amplia exposición no habría sido posible sin los préstamos de otras instituciones públicas y privadas y de colecciones particulares.

La temática central de la exposición es las constantes decepciones del artista sobre sí mismo y cómo repetía y reelaboraba ciertos motivos a lo largo de su carrera. Además, entre sus principales obras se exponen las series completas de El friso de la vida, que incluye cuadros como La Madonna, El grito, Angustia, Los celos o Mujer en tres etapas; y de El friso de Reinhardt (1906-07).

"Munch ocupa un puesto consolidado en el canon de la modernidad con obras como El grito y El sol. Le hemos dado una nueva mirada a su respuesta a los problemas modernistas, como la relación entre el arte y la realidad, la posición del individuo en el mundo, el papel moderno del artista y el impacto del arte en el público ", explica Audun Eckhoff, el director del Museo Nacional.

Los ocho pueblos de Munch

Además de Oslo (la antigua Cristianía en la que Munch pasó su infancia y se formó como artista), la conmemoración del 150 aniversario de su nacimiento se celebra de manera especial en otros siete pueblos de Noruega con los que el artista tuvo vinculación, porque vivió o trabajó allí o por ser su familia oriunda de los mismos.

Estos municipios son: Vågå, lugar de donde era oriunda su familia paterna; Fredrikstad, donde nació su madre; Løten, Much nació en la granja Engelaund de este municipio, donde trabajaba su padre como médico; Horten (Åsgårdstrand), donde pasó varios veranos y cuyos paisajes costeros están plasmados en muchas de sus obras; Kragerø, tras varios años fuera de Noruega, Much se instaló en una finca de este municipio en 1909; Vestby (Hvitsten), donde en 1910 compró la finca Nedre Ramme en el fiordo de Oslo y en la que vivió hasta su muerte; y Moss (Jeløya), donde vivió de marzo de 1913 a 1916.

Además, del 2 de junio al 13 de octubre, en paralelo a la exposición, también estarán abiertas al público el Aula Magna de la Universidad de Freia, donde pueden contemplarse las monumentales pinturas que le encargaron en 1922 para su decoración, entre ellas El Sol; y la finca de Ekely que compró en 1916 y donde tuvo instalado su taller.

Esta gran exposición sobre Munch, que ningún visitante que acuda a Noruega este verano debería dejar de visitar, se une a la dedicada a Van Gogh en Amsterdam por el 160 aniversario de su nacimiento. Dos artistas contemporáneos y de los más influyentes del siglo XX.