El Congreso de la Lengua Española de Panamá debatirá los retos del español y las editoriales
- La cuarta edición se celebrará en Ciudad de Panamá del 20 al 23 de octubre
- José Ignacio Wert ha presidido la presentación en la sede del Instituto Cervantes
- En la apertura participarán Vargas Llosa, Sergio Ramírez y Jorge Eduardo Ritter
Más de doscientos expertos y creadores de numerosos países participarán en el VI Congreso Internacional de la Lengua Española, que se celebrará en Ciudad de Panamá del 20 al 23 de octubre y que propiciará el debate sobre los retos del español y la trascendencia de la industria editorial. "El español en el libro: del Atlántico al Mar del Sur" será el lema de este gran encuentro cultural, que inaugurarán el presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, y el Rey de España, y en cuya solemne apertura participarán también el escritor peruano Mario Vargas Llosa, el nicaragüense Sergio Ramírez y el panameño Jorge Eduardo Ritter.
Antonio Skármeta, William Ospina, Laura Restrepo, Héctor Abad Faciolince, Juan Villoro, Alonso Cueto, Abel Posse y Rosa María Britton serán otros de los escritores que intervendrán en los diferentes debates de este congreso, que hoy ha sido presentado en la sede central del Instituto Cervantes.
El acto ha congregado a decenas de editores, académicos, escritores y periodistas, y ha corrido a cargo del director del Cervantes, Víctor García de la Concha; del director de la Real Academia Española, José Manuel Blecua; de la ministra panameña de Educación, Lucy Molinar, y del ministro español de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert.
El lenguaje común
El VI congreso continúa el espíritu de los celebrados en la ciudad mexicana de Zacatecas (1977), Valladolid (España, 2001), Rosario (Argentina, 2004), Cartagena de Indias (Colombia, 2007) y Valparaíso (Chile, 2007). Este último solo pudo celebrarse en la red debido al terremoto de 8,5 en la escala de Richter que hubo en este país unos días antes de la inauguración. Como puso de relieve García de la Concha, fue México el país que, a finales del siglo pasado, expresó la necesidad de que se organizaran con periodicidad estos congresos de la Lengua.
Potenciar una lengua que hablan casi 500 millones de personas en el mundo implica una gran responsabilidad y de ella habló el escritor Octavio Paz en aquel primer congreso. "El lenguaje nos da el sentimiento y la conciencia de pertenecer a una comunidad. El espacio se ensancha y el tiempo se alarga: estamos unidos por la lengua a una tierra y a un tiempo. Somos una historia", recordó García de la Concha que advirtió el mexicano.
Y fue también en Zacatecas donde Gabriel García Márquez suscitó una polémica que todavía hoy colea, cuando pidió que se liberara a la lengua española del corsé de las normas: "Jubilemos la ortografía, terror del ser humano desde la cuna; enterremos las haches rupestres, firmemos un tratado de límites entre la ge y la jota", dijo el Premio Nobel colombiano.
"Con ello llegó el escándalo, pero quedó asentado el principio de que en estos congresos preside la libertad y alienta la audacia", decía García de la Concha, quien, años más tarde, tuvo ocasión de comprobar "la escrupulosa minuciosidad con que Gabo corregía una y otra vez las pruebas de imprenta y blasfemaba por una coma mal puesta, en la fijación de su texto de Cien años de soledad'".
La participación de ciudadanos ha sido masiva en cada una de las ediciones, y quizá fue en el de Rosario donde "el pueblo se apoderó del congreso". Llegaron profesores y estudiantes de las provincias y países vecinos, y cuatro horas antes de que comenzara el emotivo homenaje a Ernesto Sábado, "las colas daban varias vueltas al teatro", señaló García de la Concha.
La respuesta de los colombianos fue igual de masiva y de cálida, como lo pudo comprobar García Márquez en el homenaje que se le tributó en Cartagena de Indias. El premio nobel recordaba el proceso de creación de su novela más famosa, cuando irrumpió en la sala Bill Clinton, rodeado de fuertes medidas de seguridad y de varios grupos de vallenatos.
Wert: "La lectura tiene un valor capital"
El Congreso de Panamá coincidirá con la conmemoración del V Centenario del Descubrimiento del Océano Pacífico, o del "avistamiento", como dijo la ministra panameña de Educación. "Este año Panamá está de moda", aseguró Lucy Molinar, antes de referirse a lo importante que es para la cultura de su país un encuentro de esta magnitud.
José Ignacio Wert se refirió a "la importancia de la industria del libro en español". "No somos conscientes a veces de la importancia que tiene no solo como fuente de riqueza cultural, que es enorme, sino también como potencial de riqueza económica".
Desde el punto de vista demográfico, "el potencial del español en la educación en toda la comunidad hispanohablante es una riqueza de la que sería absolutamente suicida pensar en prescindir", señaló el ministro antes de subrayar "el valor capital" que tiene la lectura como base del proceso educativo.
Los congresos de la Lengua son foros de debate y de reflexión, y en el de Panamá se abordará el pasado, presente y futuro del libro escrito y publicado en lengua española, y se hablará de la trascendencia que la industria editorial en lengua española ha tenido en la configuración del espacio iberoamericano, indicó Blecua.
Se verán también los retos que afronta la educación en relación con el libro y la lectura, y se debatirá sobre la creación literaria en el terreno hispanohablante.
Blecua calificó de "apasionante" la historia de la llegada de los libros a América. Se conservan miles de recibos donde figuran los embarques de los navíos que mandaban cada seis meses. Al otro lado del Atlántico llegaron los libros de caballería, o de "Iglesia", como se ponía en la envoltura porque no se podían vender entonces los de caballería. Y llegaron también ejemplares del Quijote, "una de las aventuras más hermosas de la imprenta española".