Italia interviene la mayor planta de acero de Europa para evitar su cierre

• Ilva produce 10 millones de toneladas de acero al año en Tarento
• La acería mantiene 15.000 empleos directos y 9.200 indirectos

La planta de acero Ilva de Taranto. (Archivo)

Italia ha aprobado un decreto para intervenir temporalmente la planta de acero Ilva de Taranto, la mayor de Europa, para evitar su cierre por problemas de contaminación medioambiental.

El Consejo de Ministros se ha convocado urgentemente para decretar la intervención temporal de esta acería y nombre al interventor, cuyo cierre, según el ministro italiano de Industria, Flavio Zanonato, "tendría un impacto económico en el país por un valor de 8.000 millones de euros anuales".

De ellos, se calcula en 6.000 millones de euros el impacto que supondría el aumento de las importaciones de acero del extranjero, "1.200 por las menores entradas a la administración pública y 500 millones al reducirse la capacidad de gasto de la zona", explica Zanonato.

Ilva es la mayor acería de Europa, con una producción de cerca 10 millones de toneladas de acero al año, en la que trabajan 15.000 personas y otras 9.200 dependen de su actividad.

El decreto supondrá la "suspensión temporal de los poderes de los  actuales dirigentes y el nombramiento de un interventor que trabajará  para reunir todos los recursos disponibles para realizar los trabajos de  saneamiento de la fábrica y una correcta gestión de la actividad  productiva".

La persona elegida para dirigir la planta durante los próximos 36 meses es Enrico Bondi.  Zanonato ha agregado que tras terminar esta fase de intervención, se  devolverá los poderes a los administradores y el total control de los  recursos económicos.

Problemas graves de contaminación

Los altos hornos del Ilva han sido acusados en diversos informes de ser los responsables de causar tumores a la población y producir el 93% de todas las emisiones de partículas tóxicas en Italia.

La fiscalía de Taranto investiga la muerte de 174 personas de los 386 fallecimientos atribuibles a las emisiones de la fábrica y analiza 237 casos actuales de cáncer, 247 patologías coronarias y 937 enfermos de las vías respiratorias. Por ello, desde el pasado julio han sido arrestados varios de sus dirigentes.

Además, la magistratura ordenó cerrar seis de los ocho altos hornos de la fábrica al considerar que estaban contaminando el ambiente y ordenó a los propietarios que realizasen las tareas de saneamiento ambiental de la fábrica.