La Ertzaintza no descarta que el dueño del gimnasio de Bilbao haya cometido más asesinatos
- La hipótesis se debe al "modus operandi" y las "características" del detenido
- La policía "se tiene que poner en lo peor" para llevar la investigación al final
- J.C.A. está encarcelado por el presunto asesinato de dos mujeres
La policía autonómica vasca no descarta que el dueño del gimnasio de Bilbao encarcelado por el presunto asesinato de dos mujeres, hubiese cometido presuntamente más asesinatos. La hipótesis que manejan los agentes se debe al "modus operandi" y a las "características" del detenido, según fuentes de la investigación a las que cita Efe.
Las mismas fuentes han señalado que la policía autonómica "se tiene que poner en lo peor" para llevar la investigación hasta el final, aunque han precisado que no se han encontrado más restos humanos en ninguno de los lugares inspeccionados hasta el momento.
No obstante, han indicado que la aparición ya dos víctimas de quien decía ser el primer maestro shaolín occidental "hace pensar que no haya que descartar la hipótesis de que pudiese aparecer alguna más".
"El 'modus operandi' llamativo y la cercanía en el tiempo" de los dos asesinatos apoya la hipótesis que baraja la Ertzaintza en estos momentos, han añadido las fuentes.
En este sentido, el director de la Ertzaintza, Gervasio Gabirondo, ha asegurado en declaraciones a la radio colombiana Blue, recogidas por Efe, que no constaba denuncia de la desaparición de J.R., cuya muerte pudo producirse entre el viernes y el sábado.
"Es posible que ni su entorno más cercano hubiese tenido tiempo de echarle de menos", ha considerado Gabirondo, quien ha explicado que la Ertzaintza continúa analizando "al detalle" toda la información digital con la que contaba el arrestado.
Un largo análisis
El análisis se prevé largo, así como la inspección ocular de los lugares más frecuentados por J.C.A., como el gimnasio y su domicilio, en los que se hallaron los restos del cadáver descuartizado de la mujer colombiana.
Su detención se produjo el domingo en el gimnasio que regentaba en Bilbao donde se encontraba con una de sus presuntas víctimas, Ada, que acababa de recibir una brutal paliza que la dejó en estado de coma hasta su fallecimiento este miércoles.
Las mismas fuentes han señalado que, en caso de confirmarse durante la investigación que se trata de sendos delitos de asesinato con otras circunstancias agravantes como la alevosía y el ensañamiento, supondrían 'asesinatos cualificados', que conllevarían penas de entre 20 y 25 años de cárcel.
Además, han afirmado que, si se ha decretado su ingreso en prisión y no su internamiento en un centro pisquiátrico, es porque J.C.A. no se encontraba, en la actualidad, con un cuadro psicótico o en una situación piscológica como para ello.