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Las redes sociales y la prensa extranjera rompen la mordaza de la revuelta turca

  • Los medios de comunicación turcos no informaron de las protestas
  • Este silencio informativo es uno de los detonantes de las movilizaciones
  • Las redes sociales han sido el catalizador del movimiento ciudadano

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La periodista Anna Bosch y el equipo de enviados especiales de TVE informan desde Estambul.
La periodista Anna Bosch y el equipo de enviados especiales de TVE informan desde Estambul.

Los medios sociales en Internet son una de las mayores amenazas para la sociedad, según el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan... y la mejor herramienta para una movilización democrática, según sus jóvenes oponentes, que llevan una semana llenando las calles de Turquía.

Las redes han sido el refugio de los manifestantes ante la violenta represión policial de las protestas y el apagón informativo de los medios de comunicación tradicionales. "La mujer del vestido rojo" y otras imágenes han inundado la red y se han convertido en iconos de la revuelta.

"Si los canales de televisión y los diarios hubieran reflejado la verdad al menos parcialmente, seguramente los medios sociales se habrían utilizado mucho menos", señala Merve Alici, diseñadora de publicidad y activista de derechos civiles, en declaraciones a la agencia Efe.

"Pero la gente encendía la tele y se encontraba unos pingüinos", denuncia, en referencia a la emisión de documentales de naturaleza en el canal CNNTürk, al mismo tiempo en CNN International ya informaba en director de las protestas turcas. "Esto ha hecho crecer la frustración y la rabia, al tiempo que ha hecho sentir a la gente que es su responsabilidad registrar lo que está ocurriendo", concluye la joven activista.

La actitud autoritaria de Erdogan es lo que ha empujado a echarse a las calles al 92,4 % de los manifestantes, según un sondeo de la Universidad Bilgi, en Estambul, recogido por el diario Hürriyet Daily News.  También, la respuesta desproporcionada de las fuerzas de seguridad (91,3) y la violación de los derechos democráticos (91,1%). Y en cuarto lugar,  para el 84,2%, el silencio de los medios ha sido otro de los detonantes.

'Crowfunding' de protesta

Ante la parálisis informativa de un país considerado por el grupo Reporteros Sin Fronteras la "mayor cárcel del mundo" con 70 reporteros encarcelados, un grupo de turcos creó una campaña de 'crowdfunding' en la plataforma Indiegogo para poder poner un anuncio de página entera en el The New York Times para explicar "qué está pasando realmente en Turquía".

Si todo el mundo está mirando, quizás el Gobierno tendrá que cambiar

En tan solo unas horas recaudaron más de 84.000 dólares, una cantidad que superaba con creces la cifra necesaria (uno 53.800 dólares) para conseguir publicidad en el periódico estadounidense. “Si todo el mundo está mirando, quizás el Gobierno tendrá que cambiar", defiende uno de los creadores.

"Tayyip, connecting people" es una de las muchas mofas al primer  ministro que estos días circulan por las redes sociales. Las atronadoras  condenas del primer ministro islamista moderado a los movimientos de  protesta incipientes no han hecho más que poner en pie y unir a una  amplísima red ciudadana, hasta ahora desmovilizada y desunida.

Por lo pronto, el Gobierno ha tendido la mano a los manifestantes. Este miércoles ha recibido a una representación de los organizadores de las protestas y ha escuchado sus reivindicaciones: depuración de responsabilidades por la represión, el cese del uso de gases lacrimógenos contra los jóvenes, la liberación de los detenidos durante la revuelta y la paralización de la demolición del parque Gezi.

El presidente Abdullah Gül y el viceprimer ministro han demostrado una mayor sensibilidad que Erdogan hacia la oleada de protestas.  La profesora de periodismo en la Universidad de Bahçesehir de Estambul, Eylem Yanardagoglu, destaca que tanto el propio presidente de Turquía como los ministros turcos de Exteriores y de Asuntos Europeos, además del gobernador de Estambul, utilizan cuentas de Twitter, en un curioso contraste con la opinión que de esta red tiene el jefe de su partido, Erdogan.

"Los altos cargos gubernamentales discrepan del punto de vista del primer ministro y creen que no es capaz de entender a la nueva generación, que es una generación de internautas", afirma, según recoge el corresponsal de Efe Ilya U. Topper

Turquía, cuarto usuario mundial de redes sociales

El profesor de Historia Contemporánea de la Universidad Autónoma de  Barcelona y experto en Turquía, Francisco Veiga, subraya, además, a  RTVE.es que "el 80% de los tuits enviados sobre las protestas turcas  proceden directamente del país euroasiático, a diferencia de lo que  ocurrió en Egipto, donde había más flujo de información en redes sociales desde el  exterior".

La generación de Facebook lidera el activismo

Yanardagoglu destaca que Turquía es el cuarto país del mundo en número de usuarios de redes sociales. "La generación de Facebook, nacida a partir de 1990, es la que lidera el activismo y los jóvenes hacen un uso excelente de las redes sociales", observa la experta.

Destaca que un estudio realizado por su universidad difundió en Internet un cuestionario dirigido a participantes de las protestas y recibió unas 3.000 respuestas en 20 horas. Según los resultados, el 40% de los participantes tiene entre 19 y 25 años, y otro 24 por ciento, entre 26 y 30. Tres de cada cuatro han salido a la calle para participar en las protestas, un 54 % nunca antes había participado en una acción masiva y el 70 % no se siente vinculado a ningún partido político.

"Es un movimiento extremadamente amplio y lo particular de ello es que la gente que utilizaba los medios sociales solamente para enviar fotos (...) y participar en videojuegos ahora está en la calle", señala también Merve Alici, diseñadora de publicidad y activista de derechos civiles.

"La gente refleja su vida en los medios sociales; hasta ahora giraban en torno a los gatitos y las fotos de uñas pintadas en Instagram, ahora giran en torno al parque Gezi", añade.