La Ertzaintza revisa vídeos y busca restos de ADN en el gimnasio del falso shaolín
- Los investigadores llevan cuatro días inspeccionando todo "al milímetro"
- El presunto asesino tenía al parecer varios vídeos en el gimnasio
- Una de las víctimas le dijo a su madre que iba a trabajar en el centro
La Ertzaintza revisa vídeos y busca restos de ADN en el gimnasio de Bilbao que regentaba el supuesto experto en artes marciales J.C.A., que ingresó el miércoles en prisión acusado del asesinato de dos mujeres, para descartar que haya matado a más personas.
Fuentes de la investigación han explicado a Efe que a la Policía vasca no le consta que se hayan presentado denuncias de desaparición de otras mujeres que puedan estar vinculadas a este caso y por el momento no ha descubierto evidencias de que haya cometido otros asesinatos.
Sin embargo, dado el "modus operandi" utilizado para dar muerte a la mujer senegalesa Ada y a la colombiana J.S.R., especialistas en Policía Científica de la Ertzaintza continúan con una inspección minuciosa tanto del gimnasio, como de la casa del detenido y de su coche.
Dadas las dimensiones del centro de artes marciales de la calle Máximo Aguirre de Bilbao, donde daba clases J.C.A., los investigadores llevan ya cuatro días inspeccionando "al milímetro" cada una de sus dependencias, donde tratan de averiguar si hay restos de ADN de otras personas.
El presunto asesino tenía al parecer en el gimnasio vídeos, por lo que los investigadores también están revisando todo ese material por si aparecen en él imágenes de mujeres a las que podría haber filmado y asesinado.
La Policía autonómica, aunque sin evidencias de más muertes, "se tiene que poner en lo peor", han señalado las mismas fuentes, de ahí que no descarten más asesinatos y que revisen todos los detalles sobre la vida del falso shaolin en los últimos años.
Sin embargo, desde hace dos días se paralizaron los rastreos de los buzos de la Ertzaintza en la ría de Bilbao para tratar de hallar más bolsas con restos humanos de J.S.R., que podría haber arrojado el detenido.
El propio director de la Ertzaintza, Gervasio Gabirondo, no descarta la hipótesis de más muertes por la crueldad y peculiar forma de actuar de este falso maestro shaolín de kung-fu, que descuartizó a su primera víctima, la mujer colombiana, y torturó a la segunda hasta dejarla en coma durante casi tres días hasta que ayer falleció.
Por todo ello, se sabe que la investigación será larga y se prolongará durante días dado que no se quiere dejar ningún resquicio de su casa y del gimnasio sin analizar.
Ofreció trabajo en el gimnasio a una de las víctimas
Asimismo, la mujer de nacionalidad colombiana supuestamente asesinada y descuartizada por J.C.A., el falso maestro shaolín, llamó a su madre por teléfono a Colombia hace unos días para comunicarle que estaba "muy contenta" porque le habían ofrecido trabajar en un gimnasio de Bilbao como masajista, según han informado a Europa Press fuentes cercanas a la familia de la víctima.
Las mismas fuentes creen que había sido Aguilar el que había contactado con ella para ofrecerle el trabajo como señuelo para asesinarla. Ponerse en contacto con J.S.R. era fácil porque había colocado carteles en la zona de Zabalburu de Bilbao, en la que vivía con su hermano, y en los alrededores para ir a los domicilios a realizar servicios de peluquería, de belleza y masajes.
En su confesión en comisaría, J.C.A. reconoció que su intención en pasado domingo era acabar con la vida de la joven nigeriana, y reconoció que había matado, con anterioridad, a otra mujer. La Policía vasca no descarta que existan más víctimas.
Un bar que frecuentaban sus dos supuestas víctimas
La clienta de un pub ubicado en la calle Iturriza de Bilbao, enfrente de la vivienda del supuesto asesino de las dos mujeres, ha asegurado a Europa Press que las dos frecuentaban ese local.
La joven ha afirmado que conocía a las dos mujeres de verlas en el establecimiento, que, en la actualidad, se encuentra cerrado por el Ayuntamiento de Bilbao por diversas sanciones administrativas. "Las veces que he ido yo a tomar algo las he visto. Es un bar normal, no es ningún bar de chicas de alterne", ha precisado.
Según ha apuntado, las víctimas no se conocían entre si porque Jenny Sofía Rebollo, la colombiana que fue descuartizada, solía ir sola y nunca la ha visto hablar "con ninguna persona de color", en referencia a la otra víctima, de nacionalidad nigeriana.
Preguntada por si en el mismo local había visto alguna vez al asesino, ha respondido que las veces que ella ha acudido al local no le ha visto, pero que igual a él le sería fácil ver a las chicas desde su vivienda, ya que vivía enfrente.
Concentración por las víctimas
Asimismo, compatriotas de la colombiana J.S.R. y la nigeriana M.A.O., asesinadas en Bilbao supuestamente por el falso shaolín, han reclamado "justicia" para las víctimas.
El grito de "justicia, justicia" ha sido el más coreado en una concentración, en la que han participado varios cientos de personas, muchos de ellos colombianos, situados tras banderas de su país, y nigerianos, celebrada esta tarde en Bilbao.
Al acto ha asistido el excompañero de J.S.R., Iñigo Martínez Lazurtegui, quien ha afirmado que lo vivido con el asesinato su expareja "mata a cualquiera".
El secretario de la asociaciones de nigerianos de Bilbao, Christian Kwesi, ha explicado que están realizando una colecta para repatriar a Nigeria, como quiere la familia, el cadáver de Ada cuando concluya la autopsia y ha comentado que el embajador de su país en España ha estado en la capital vizcaína para interesarse por el caso.