El Gobierno turco estudia restringir internet para evitar las protestas
- Detenidas decenas de personas en sus casas
- Erdogan acusa a los manifestantes de disparar contra la Policía
El Gobierno turco estudia restringir el uso de las redes sociales en Internet, después de que los manifestantes hayan usado plataformas como Twitter o Facebook para organizar y difundir las protestas que han sacudido el país en las últimas semanas.
Según el diario Hurriyet, el ministerio de Justicia está trabajando en un proyecto de ley sobre crímenes cometidos en Internet.
"Estamos revisando implementaciones internacionales sobre este asunto", han agregado las fuentes oficiales citadas por el periódico, sin ofrecer más detalles al respecto.
Un departamento especial del Gobierno está trabajando ya en el análisis de unos 5 millones de mensajes de Twitter enviados en el marco de las manifestaciones, agrega Hurriyet.
El ministro turco del Interior, Muammer Güler, advirtió el lunes que la Policía está haciendo esfuerzos en contra de supuestas incitaciones provocativas en Twitter.
"Disponemos de un estudio sobre aquellos que provocan mediante Twitter y Facebook a la ciudadanía con manipulaciones y noticias falsas, que llevan a acciones que podrían poner en peligro la seguridad pública y la propiedad", dijo el ministro. "Pensamos que este asunto necesita una regulación separada", concluyó Güler.
Decenas de detenidos
Por otra parte, la Policía ha detenido en las últimas horas a casi un centenar de personas a las que ha localizado en sus casas, supuestamente por su relación con las protestas, según informa Reuters.
El ministro de Interior ha confirmado que 62 personas han sido detenidas en Estambul y otras 23 en Ankara. La televisión estatal TRT ha asegurado que otras 13 han sido arrestadas en Eskisehir.
Una fuente policial, citada por Reuters, ha confirmado la operación. "Por ahora, solo los provocadores serán llevados para su interrogatorio", ha dicho.
La Policía desalojó el lunes una protesta pacífica en la plaza Taksim, en Estambul, y cargó en Ankara contra un grupo que pretendía ocupar la céntrica plaza de Kizilay, donde se encuentran las oficinas gubernamentales.
Erdogan acusa a los manifestantes de disparar
El primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, cuya dimisión exigían los manifestantes, ha defendido una vez más la actuación policial, y ha ido más lejos al acusar a los manifestantes de usar armas de fuego.
"Acusan a la policía de violencia. ¿Por qué? Usan gases lacrimógenos. Pueden hacerlo. Lo hacen todos los países. Son los manifestantes que usan la violencia. Dos policías sufrieron disparos de bala", ha asegurado Erdogan en una reunión del grupo parlamentario de su partido, el AKP.
El primer ministro ha acusado a diputados del opositor Partido Republicano del Pueblo (CHP) de "provocar a la gente como si fueran militantes de organización terroristas que usan la violencia".
"Vamos a fortalecer más la Policía. Vamos a mejorar su fuerza de intervención para estos eventos. Vamos a investigar todo esto y vamos a averiguar quién está detrás de ello", ha agregado.