Bruselas exige a los operadores de TDT en España que devuelvan 260 millones en subvenciones
- Dice que las ayudas que recibieron son incompabiles con las normas europeas
- Cree que la TDT recibió ventaja indebida respecto al satélite, cable o internet
- España concedió estas subvenciones para su implantación en zonas remotas
La Comisión Europea (CE) ha afirmado que los 260 millones de euros en ayudas que recibieron los operadores de televisión digital terrestre (TDT) en España son incompatibles con las normas comunitarias, por lo que tendrán que ser devueltas. España concedió estas subvenciones para financiar la digitalización y la extensión de la red de TDT en zonas remotas del país en 2005, pero no notificó su decisión a la CE.
El Ejecutivo comunitario entiende que "la medida favorece a la tecnología digital terrestre en detrimento de otras" y que los operadores de plataformas terrestres "han recibido una ventaja selectiva con respecto a sus competidores", por lo que deberán reembolsarla al contribuyente español, según un comunicado.
Para Bruselas, ha quedado claro que las subvenciones fueron a parar exclusivamente a las empresas de TDT y "otras plataformas de transmisión alternativas, como el satélite, el cable o internet, no pudieron acogerse a esas subvenciones aunque la plataforma por satélite, por ejemplo, habría estado disponible y podría haber cubierto todo el territorio".
Subvenciones abonadas en 2005
España decidió en 2005 subvencionar la transición a la TDT en regiones remotas, que abarcan alrededor del 2,5% de la población, y también incluyó ayudas para la explotación y el mantenimiento de la infraestructura.
Entonces el territorio español se dividió en tres zonas distintas. En la zona I, que incluye la gran mayoría de la población española, los costes de la transición corrieron a cargo de los radiodifusores. En la zona II, menos urbanizada, los radiodifusores no tenían ningún interés comercial en la prestación del servicio, por lo que las autoridades españolas establecieron el plan de ayudas estatales objeto de la investigación (que es el objeto de la investigación). Por último, la topografía de la zona III excluye la transmisión terrestre y se escogió la plataforma por satélite.
La CE inició en 2010 una investigación sobre el caso después de recibir una denuncia de un operador de plataforma por satélite y constató que efectivamente la financiación pública se destinó en exclusiva a los operadores terrestres. Sin embargo, otras plataformas de transmisión alternativas, como el satélite, el cable o internet, no pudieron acogerse a esas subvenciones.
Subvenciones sí, pero sin discriminar el operador
Bruselas recuerda que en otros países de la UE también se ha subvencionado la conversión digital, pero con respeto al principio de neutralidad tecnológica. "En los Estados miembros que respaldaron la conversión digital respetando el principio de neutralidad tecnológica, otros operadores de plataforma han participado con éxito en las licitaciones públicas", asegura.
En España, en cambio, se ha falseado indebidamente la competencia entre los operadores de TDT y operadores que utilicen otras tecnologías, asegura la Comisión. "Los primeros han recibido una ventaja indebida en relación con sus competidores, por lo que deben reembolsar esas subvenciones improcedentes al contribuyente español", insiste Bruselas.
La CE estudia en paralelo otros dos casos de digitalización en España. El primero tiene que ver con el plan de transición a la televisión digital en Castilla-La Mancha, donde además de una posible discriminación tecnológica existen alegaciones de discriminación contra operadores de plataformas terrestres regionales y locales, y el segundo con las ayudas concedidas a radiodifusores por el cambio de ancho de banda.