Obama emula a JFK y conquista Berlín con un discurso pacifista y antinuclear
- El presidente de EE.UU. ha hablado desde la puerta de Brandemburgo
- Anuncia que buscará un acuerdo con Rusia para reducir las armas nucleares
Barack Obama ha conquistado Berlín como en su día lo hizo John Fitzgerald Kennedy. Cincuenta años después del 'Ich bin ein berliner' (el histórico discurso de JFK), el primer presidente negro de EE.UU. ha emocionado a los miles de berlineses que se han congregado en la puerta de Brandemburgo para darle una calurosa bienvenida. "Ningún muro puede perdurar ante los deseos de justicia, de paz, que yacen en el corazón humano", ha afirmado.
"No soy el primer presidente de EE.UU. en estar aquí, pero sí en hacerlo desde el lado oriental, desde donde lucharon", ha afirmado. Ante más de 4.000 invitados y en mangas de camisa ante el sofocante calor que se ha vivido este miércoles en la capital alemana, Obama ha elogiado la victoria de la tolerancia y de la libertad y ha recordado que fueron los ciudadanos quienes decidieron cuándo debía caer el Muro, a pesar de los esfuerzos políticos y militares.
Un Obama más cercano ha bromeado con Merkel y el público cuando se ha quitado la chaqueta ante el intenso calor. "Podemos ser un poquito más informales entre amigos",ha dicho el presidente de EE.UU. que, tras agredecer la bienvenida se ha centrado en los retos del futuro.
“Ahora no nos enfrentamos a ningún muro en concreto, no hay tanques, no hay que ocultarse en refugios. Y tenemos la tentación de creer que los grandes retos han pasado… Pero he venido para deciros que la complacencia no es el carácter de las grandes naciones”, ha dicho el presidente estadounidense.
Acuerdo con Rusia para reducir el armamento nuclear
Tal y como se había anunciado la Casa Blanca, Obama ha propuesto este miércoles en Berlín una nueva reducción de los arsenales nucleares en todo el mundo. "Podemos asegurar la seguridad de EE.UU. y de nuestros aliados reduciendo nuestro arsenal en, al menos, un tercio y quiero empezar a hablar de ese asunto con Rusia", ha dicho el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en referencia a los niveles acordado en el tratado "Nuevo START" firmado con Moscú en 2010.
“Mientras que las armas nucleares sigan existiendo no estaremos seguros del todo. Podremos dar golpes a los terroristas, pero mientras existan armas nucleares no estaremos seguros” ha dicho un Obama en mangas de camisa donde ha elogiado la victoria de la tolerancia y de la libertad y ha recordado que fueron los ciudadanos quienes decidieron cuándo debía caer el Muro, a pesar de los esfuerzos políticos y militares.
Abandonar el "estado mental de guerra perpetua"
"Hemos acabado las guerras de Irak y Irak Afganistán, Osama bin Laden ya no está. Pero no podemos lograr la paz en una guerra perpetua. Tenemos que ir más allá. Debemos redoblar los esfuerzos para cerrar Guantánamo", ha dicho el presidente. El presidente estadounidense también ha recordado que la alianza entre ambas partes del Atlántico "es la base de la seguridad global", y ha destacado que los destinos de Europa y de EEUU "están unidos".
Obama ha manifestado, sin embargo, que Occidente no puede “imponer nuestro ritmo de cambio a los países árabes, pero no debemos aceptar la excusa de que no podemos hacer nada por ayudar a los que no tienen", asegurando que eso pasa por abordar los conflictos internacionales, como el de Burma o en el de Israel y Palestina, a los que ha mencionado.
La caída del Muro de Berlín en 1989 ha dominado el éspíritu de su discurso: "nuestros valores ganaron", ha dicho Obama, que también ha recordado que "los sueños se tienen que renovar. Cuando abogamos por los derechos de los homosexuales, abogamos por nuestra libertad. Mientras existan muros en nuestro corazón que discriminen, será necesario un esfuerzo conjunto para echarlos abajo", ha dicho.
"Ya sea en Chicago, Cleveland, o Madrid"
En un discurso muy cercano, el presidente de EE.UU. ha tenido unas palabras para los países más afectado por la crisis y ha aseguró que todas las personas "merecen una oportunidad" en términos laborales y que los países deben luchar para combatir la "desigualdad" y el "desempleo". "Todo el mundo merece una oportunidad, no sólo los que están arriba. Ya sea en Chicago, Cleveland, Belfast, Berlín, Atenas o Madrid", ha asegurado.
"Nuestro recurso más importante son las personas", ha dicho el presidente quien defendido la necesidad de ofrecer más oportunidades "ahora que salimos de una recesión. Nuestras economías deben trabajar para la gente, no sólo para los más ricos", ha subrayado
Obama no ha dejado apenas un tema de política exterior y nacional sin mencionar. Sobre el espionaje, el presidente ha vuelto a insistir en que "no debemos olvidar que el Gobierno está para servir a los ciudadanos, eso es lo que nos diferencia de los del otro lado del mundo. Hay que servir a la paz y a la justicia", y ha garantizado que la seguridad nacional no primará sobre las libertades individuales.
El presidente de EE. UU. ha terminado su discurso con un nuevo recordatorio al espíritu que tiró abajo el Muro de Berlín. "El muro pertenece a la historia, pero nosotros también debemos hacer historia y los héroes pasados nos piden que ayudemos a mantener nuestras libertades y también ayudar a quienes la están buscando en nuestro país y en otros. Ese es el espíritu de Berlín".