La exmujer de Bretón afirma que no era cariñoso y que decía que "no se iría del mundo sin matar "
- Dice que es un "maltratador psicológico","rencoroso, controlador y vengativo"
- Durante su declaración, Bretón ha permanecido esposado tras una mampara
- La suegra de Bretón dice que su hija le tenía "pavor" y que le vio maltratar al niño
- Bretón negó haber matado a los pequeños en su declaración de 4 horas
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Una persona "rencorosa", "vengativa" y "controladora". Un "maltratador psicológico" que no fue cariñoso ni con su exmujer ni con sus hijos, a los que trató "con desprecio" y que repitió en varias ocasiones que "no se iría de este mundo sin matar a nadie".
Este es el retrato que ha hecho Ruth Ortiz la madre de los dos niños de Córdoba supuestamente asesinados por su exmarido, de Jose Bretón en el juicio que se sigue contra él en el que ha dicho que no tiene ninguna duda de que sus hijos están en una "caja de cartón".
Ortiz ha declarado en la Audiencia Provincial en presencia de su exmarido, al que han colocado esposado tras una mampara a propuesta de su exmujer. En todo momento se ha referido a Bretón como "el acusado" y ha dicho que cuando inició los trámites de la separación, tomó conciencia de que "era una persona peligrosa".
"No ha sido cariñoso ni conmigo, ni con mis hijos ni con nadie", ha dicho Ortiz, quien ha relatado que su exmarido le dijo que si tenían hijos serían responsabilidad de ella porque él no "quería saber nada" y que siempre trató de separarla de sus padres y hermanos.
"Lo que yo llevaba no se puede calificar de vida, fue horrible, necesitaba físicamente separarme de él", ha explicado al jurado Ortiz, quien ha afirmado que ella normalizó "muchos de sus comportamientos y conductas que no lo eran" ."No discutía con él para no enfadarlo", ha añadido, para continuar: "Sus padres y hermanos también le tenían miedo. Se hizo con ellos tras su intento de suicidio".
Ortiz, quien se ha emocionado en varias ocasiones y ha tenido que dejar de hablar, ha recordado dos hechos puntuales de Bretón con sus hijos en los que "apartó con desprecio a la niña cuando se sentó en sus rodillas", mientras que en otra ocasión "pegó una bofetada al niño porque no quería comer la papilla".
Ha relatado que la propia familia de Bretón no quería dejar solos a los niños con su padre.
"Cuando denunció la desaparición supe que no volvería a verlos"
La exmujer de Bretón ha dicho que "nunca" ha contemplado como cierta la hipótesis de que el padre perdiera a los niños y que cuando él denunció la supuesta pérdida "estaba tan tranquilo" y le dijo: "se me han perdido los niños, qué le vamos a hacer".
"En el momento que denunció la pérdida de los niños yo ya supe que no vería a los niños nunca más", ha afirmado.
La madre de los menores ha especificado que ese mismo día puso la denuncia por malos tratos contra Bretón por recomendación de su abogada y en ese momento se dio cuenta de que "había estado conviviendo con un asesino en potencia".
Ve improbable que Bretón estuviera sentado en el parque cuando supuestamente perdió a los niños porque, según ha explicado, no se sentaba ni siquiera en el autobús. "No tocaba las barandillas porque era extremadamente escrupuloso hasta el mundo de que no dejaba que nadie tocara a los niños sin lavarse antes las manos", ha asegurado.
"No es normal que los niños durmieran tantas horas en el coche"
Preguntada por si ve probable que sus hijos durmieran durante horas en el coche el día de la desaparición- Bretón declaró este martes que mientras él quemaba basura en Las Quemadillas, sus hijos dormían en el coche- Ortiz ha contestado que no es imposible, pero que "no es normal" porque cuando el coche paraba, los niños se despertaban.
Por otro lado, ha explicado que el lugar donde Bretón hizo una hoguera en la finca familiar de Las Quemadillas no era la zona habitual donde se hacían fuegos en esa zona.
Ha relatado en el juicio que no recuerda que su exmarido parase habitualmente en el trayecto de Huelva a Córdoba para repostar gasóil de las garrafas que compraba en una cooperativa. Bretón explicó este martes que con los 70 litros de gasóil que compró el día antes de la desaparición de los niños realizó varios repostajes en su coche.
La suegra de Bretón dice que su hija tenía "pavor"
Obdulia Asunción, la madre de Ruth Ortiz, ha declarado en el juicio que su hija tenía "pavor" a su exmarido y que al final de la relación "era una zombie".
Tampoco cree la versión de la pérdida en el parque de los pequeños porque, en su opinión, Bretón era "muy controlador" y no los perdería. "Le vi maltratar al niño", ha señalado Asunción.
Muy emocionada durante toda la declaración, Asunción ha explicado que Bretón tenía celos de su relación con los nietos y que le molestaba que los niños dieran cariño a su abuela.
El hermano de Ortiz: "Me dijo que todo acabaría muy mal"
El hermano de Ruth Ortiz, Estanislao Ortiz Ramos, ha dicho que aunque no tuvo mala relación con Bretón, el tiempo que vivió con ellos, vio que el "no era normal". "La relación con sus hijos era muy estricta, muy fría. Era muy seco", ha afirmado el tío de los pequeños, que también se ha emocionado al declarar.
"No les soltaba de la mano. A veces les llevaba incluso cogidos de las muñecas", ha explicado Ortiz, quien ha relatado como en un encuentro familiar, una vez que se había anunciado la separación, Bretón le dijo que "todo acabaría muy mal".
Amigos de Bretón le definen como "machista" y "estricto" con sus hijos
Mientras, lmigos de José Bretón le han definido en el juicio que se lleva a cabo contra él como un hombre "machista" y "estricto" con los niños a los que supuestamente quitó la vida en octubre del 2011.
En la vista en la Audiencia Provincial de Córdoba han declarado en la sesión seis amigos del acusado que, en su mayoría, han coincidido en calificarle de "machista" y en asegurar que era "estricto" con sus hijos, pero "mandaba" a su exmujer Ruth Ortiz a que los controlara y se ocupara de ellos cuando les veía hacer algo que entrañaba peligro aunque él estuviera más cerca.
Pese a esa opinión mayoritaria, alguno de los testigos, como un amigo del entonces matrimonio ha asegurado que nunca vio "nada extraño" ni "especial" en la conducta de Bretón. "Quizá un poco estricto", ha añadido este testigo.
Asimismo, la abogada de la acusación particular, María del Reposo Carrero, ha señalado al término de la sesión del juicio a José Bretón que se arrepentirá para toda su vida de la recomendación que, al igual que psicólogos, le hizo a Ruth para que dejara a sus hijos a Bretón el fin de semana del 7 al 9 de octubre de 2011.
En este sentido, ha asegurado que, ahora, "cada vez" que recibe a alguna mujer en su despacho en la que percibe malos tratos adviert de que "una cosa es lo que dice la ley y otra lo que cada uno puede hacer" y aunque ha indicado que en este caso "no había resolución judicial ni obligación de llevárselos" cree que Bretón "se los hubiera llevado o los hubiera raptado", pues, a su juicio, "está claro que los niños estaban condenados, igual que ella (la madre)".