La UE ve la posible conferencia de Ginebra como la única solución para Siria

• Insiste en que la posición de la UE es buscar la solución política

La Unión Europea (UE) ha insistido este lunes en que la negociación en una segunda conferencia de Ginebra es la única solución posible en Siria y se ha comprometido a apoyar la celebración de esa cita como gran prioridad. Por su parte, el régimen de Bachar Al Asad al ha declarado que acudirá a Ginebra pero no para entregar el poder.

"Nuestra primera prioridad es promover una solución política que acabe con la violencia y los abusos de los derechos humanos", ha señalado en un comunicado el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso. "Debemos construir sobre la iniciativa EE.UU.-Rusia para revivir las negociaciones políticas en base al comunicado de Ginebra de junio de 2012 y convocar la conferencia de Ginebra II cuanto antes", ha dicho la jefa de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton.

Además, Ashton ha agregado que "la UE está dispuesta a dar todo el apoyo necesario" para que la cita tenga lugar, un mensaje que repitieron varios ministros de Exteriores europeos, que analizan este lunes la situación del conflicto en una reunión en Luxemburgo. "Siria jamás encontrará la paz sin solución política", ha subrayado el titular luxemburgués, Jean Asselborn, quien ha advertido de que si un bando se impone por la fuerza la inestabilidad y la violencia seguirán golpeando al país durante años.

El apoyo militar a los rebeldes

Asselborn, junto a algunos de sus colegas como el sueco Carl Bildt, ha expresado su preocupación por que la comunidad internacional se esté centrando en dar apoyo militar a las partesen conflicto en lugar de buscar únicamente una solución política.

Para la UE, las dos partes deben encontrar una formula que permita reunirse y negociar, aunque volvieron a dejar claro que el presidente sirio, Bachar al Asad, debe dejar el poder en cualquier caso.

Los ministros de los Veintisiete analizan la situación sobre el terreno y los esfuerzos diplomáticos para terminar la guerra y no tienen previsto tomar decisiones de relevancia. En paralelo, Ashton y la Comisión Europea (CE) han presentado una comunicación en la que fijan la postura comunitaria ante la crisis siria y recogen las acciones llevadas a cabo.

El régimen de sanciones contra Damasco

El documento subraya que la UE seguirá apoyando una solución política a través de la conferencia de Ginebra, asegurando que la ayuda humanitaria llega a toda la población y apoyando a la ONU para investigar las acusaciones de violaciones de los derechos humanos y de la ley humanitaria internacional.

Además, Bruselas se compromete a seguir estudiando cambios en el régimen de sanciones a Siria para dar apoyo a la población, a impulsar la solidaridad a la hora de acoger refugiados y a abordar la situación de ciudadanos europeos que han viajado como combatientes a Siria, trabajando también para prevenir la radicalización de otros.

"La comunidad internacional no puede quedarse de brazos cruzados ante la situación humanitaria más dramática de las últimas décadas", señaló Durao Barroso, que ha recordado que con el último paquete de 400 millones el apoyo humanitario de la UE a Siria asciende ya a 1.250 millones de euros desde el inicio de la crisis.

Por su parte, el comisario europeo de Política de Vecindad, Stefan Füle, expresó su preocupación por el "empeoramiento de la crisis siria y su impacto negativo en los vecinos" y ha señalado que la UE seguirá trabajando para apoyar a esos países y evitar una "desestabilización", con especial atención a Jordania y el Líbano.

El régimen no entregará el poder

Por su parte, el régimen sirio ha comunicado que acudirá a Ginebra pero que no tiene “intención de entregar el poder” en la Conferencia de paz. "No vamos a Ginebra para entregar el poder a la otra parte sino de establecer una verdadera asociación y un amplio gobierno de unidad nacional que incluya a representantes de todas las clases", ha manifestado el ministro de Exteriores, Moallem en una conferencia de prensa desde Damasco, según AFP.

Además, Moallem ha vuelto a criticar la decisión de armar a los grupos rebeldes, ya que considera que lo que esa decisión hace es envalentonar a los "terroristas" (calificativo con el que el régimen sirio califica a los grupos armados opositores).