Las mezclas y los contrastes se imponen en París

• Lanvin renueva la silueta masculina con un nuevo oversized
• Givenchy, Kenzo y Galliano apuestan por los estampados XXL
• El azul se impone como color estrella por su versatilidad
• El armario del verano de 2014 se tiñe de azul y se adorna con rayas

La nueva silueta para el verano de 2014 que propone la casa Lanvin en París.

En la casa Lanvin ondean camisas tricolor, de estilo bandera que se despegan del cuerpo para permitir que el tejido gane protagonismo sobre el cuerpo, un concepto que parece ser el eje de la colección ya que se intenta con ella redibujar la silueta masculina.

Vemos así prendas amplias, parkas XXL de naturaleza envolvente y pantalones anchos que caen con pliegues hasta encontrarse con el asfalto, trazando una nueva idea de comodidad elegante.

Casi toda la propuesta lleva costuras de inconformismo y trazos de rebeldía. Vemos contrastes fuertes como looks con cazadora oversized y short mini, y otros con camisa sin mangas y pantalón de pata ancha. Además, rayas grandes y parches que se adhieren a las prendas en bolsillos, costuras o bajos de camisa para potenciar ese aire de guerrero urbano.

Agnès B. ha hecho una perfomance para presentas sus ideas que siguen la estela, en cuanto a estética y forma, de las anteriores: una bandera de tejidos masculinos, una carta de colores sin estridencias y una mensaje: viste para vivir.

Por ello ha creado situaciones normales: preparar una cita, organizar una velada en casa o tumbarse a leer un libro sobre la cama y ha vestido a sus chicos con cazadoras de verano, sudaderas de rayas, parkas cómodas y kimonos.

El azul lo invadirá todo

Hermès hace del mar su paleta de colores y tiñe con todos los tonos de azul una colección de claro sabor mediterráneo. Las prendas llevan un patrón cómodo, tejidos naturales y detalles tranquilos que confieren a la propuesta un tono soft y un lujo casual.

En cuanto a los estampados vemos algunos que siguen esa tónica y vemos mezclas de dibujos marineros como anclas y nudos que atan, con elegancia, el manual de un estilo de vida.

La casa Dior insiste, como otras, en renovar el armario de los jóvenes ejecutivos y vuelve a lanzar trajes con manga corta, o sin manga, y shorts. Su empeño es tal que hasta vemos esta idea en un esmoquin y, aunque tímidamente, ya empieza a haber seguidores de esta tendencia.

Azul, el color que tiñe el verano de 2014, y Burdeos se imponen con serenidad en prendas muy estructuradas, con motivos geométricos que forman casillas que atrapan los golpes cromáticos. Destacan los trajes con los botones ocultos y los zapatos con aplicaciones metálicas en la punta.

Su diseñador, Kris Van Assche, presentó además la colección que lleva su nombre, mucho más completa y atractiva.Vemos toques de verde y naranja que contrastan con los blancos y negro; y topos de gran tamaño y círculos de carácter geométrico que se estampan, a veces flotando y otras acoplados, en algunas prendas.

En busca del estampado estrella

Han destacado además, los estampados de viñetas de Kenzo que también adora el menú cromático por excelencia: azul, rojo, blanco y negro. Galliano renueva las rayas y propone microestampados que contrastan con otros que parecen un espejo hecho añicos.

Givenchy también adora las rayas y las mezcla en el desfile con estampados de caleidoscopio hechos con dibujos de máquinas retro: calculadoras, magnetófonos, radiocassettes… esos trastos que aún viven en la memoria y duermen en los trasteros.