La defensa de Manning pide retirar los cargos de "ayudar al enemigo"
La estrategia de la defensa es presentarle como un defensor de las injusticias
- La acusación dice que ayudó al enemigo al proveer información a Wikileaks
La defensa del soldado Bradley Manning, acusado de filtrar miles de documentos secretos a WikiLeaks, ha pedido este martes que se retiren varios cargos en contra de éste, incluyendo el más grave de "ayudar al enemigo" por falta de pruebas.
El equipo de abogados de Manning, encabezado por David Coombs, ha iniciado la presentación de sus argumentos en un tribunal militar en Fort Meade (Maryland), con cuatro mociones para que se eliminen varios de los cargos que pesan contra el soldado, por considerar que la fiscalía no ha presentado pruebas fehacientes.
Eximirle de los cargos de "ayudar al enemigo"
La defensa quiere que se exima a Manning de los cargos de "ayudar al enemigo", del robo de propiedad gubernamental -por la adquisición no autorizada de centenares de miles de documentos de inteligencia y cables diplomáticos-, y de acceder indebidamente a una red militar secreta y transmitir documentos a WikiLeaks.
Se prevé que la juez que preside el juicio, Denise Lind, emita su dictamen sobre la solicitud de la defensa en los próximos días.
Durante la jornada, la defensa presentó un vídeo de 39 minutos, grabado en 2007 y filtrado por Manning a WikiLeaks, que muestra el ataque de un helicóptero Apache en Bagdad contra un grupo de civiles no armados, pese a las objeciones de la fiscalía que lo consideró irrelevante.
Según la transcripción del juicio, suministrada por Freedom of Press Foundation, la defensa ha llamado como primer testigo a Joshua Ehresman, un analista de inteligencia que trabajó con Manning en una base en las afueras de Bagdad entre noviembre de 2009 y mayo de 2010.
"Manning era de lejos nuestro mejor analista"
Según Ehresman, los soldados en esa unidad de inteligencia descargaban con regularidad información clasificada a discos compactos, debido al enorme volumen de datos que debían posteriormente entregar a sus contrapartes en Irak.
Preguntado por la defensa, Ehresman ha indicado que entre los analistas era práctica "común" y "permitida" trasladar datos en los discos compactos, e incluso descargar los datos en sus computadoras personales, especialmente si había problemas con los servidores.
"No había reglas sobre lo que podía o no descargar un analista en un CD o descargar de la base de datos secreta SIPRnet, a la que tenían acceso", ha precisado Ehresman.
Al describir la labor de Manning, Ehresman ha señalado que éste trabajaba con datos para operaciones en el campo de batalla en curso o para determinar futuras operaciones.
Según Ehresman, Manning "era de lejos nuestro mejor analista, en lo que se refiere a desarrollar productos. Cualquier cosa que le preguntaras... él (Manning) sopesaba varias ideas y luego te daba exactamente lo que buscabas".
La calidad de sus productos "era la mejor", ha subrayado el analista.
La jueza debe determinar su grado de responsabilidad
La estrategia de la defensa, apoyándose en decenas de testigos, es presentar a Manning como un hombre ingenuo que divulgó información secreta por su manifiesta preocupación por las injusticias.
La semana pasada, al completar la presentación de sus argumentos, la fiscalía mostró supuestas pruebas de que la red Al Qaeda se sirvió de la información filtrada a Wikileaks y publicada por esta organización.
La intención de los abogados de la acusación es demostrar que Manning, de 25 años, ayudó al enemigo al proveer información a Wikileaks, algo que podría acarrearle una pena de cadena perpetua.
La jueza Lind debe determinar la responsabilidad de Manning en la mayor filtración de información clasificada de la historia de Estados Unidos, con 700.000 documentos enviados a Wikileaks, que incluían vídeos de ataques, cables diplomáticos o registros de las guerras de Afganistán e Irak, o de la prisión de la Base Naval estadounidense de Guantánamo.