Los islamistas egipcios se manifiestan para pedir la vuelta al poder de Morsi
- Decenas de miles de personas se concentran en la plaza de Rabea el Adauiya
- Un líder de la Hermandad, refugiado entre las tiendas de campaña
Decenas de miles de personas se han congregado en la plaza de Rabea el Adauiya, feudo islamista en el este de El Cairo, para rechazar el golpe militar y pedir la restitución del depuesto presidente Mohamed Morsi.
Los manifestantes han desafiado al sofocante calor y han llenado la plaza con pancartas en varios idiomas en las que podían leerse consignas contra el golpe de Estado del pasado 3 de julio.
Según ha informado el enviado especial de TVE a El Cairo, Óscar Mijallo, hay otra manifestación cerca de la Universidad, donde los Hermanos han situado incluso puestos para controlar a los asistentes.
En el plano político, este viernes --día sagrado en el islam-- no ha habido grandes novedades, y desde el exterior ha destacado el llamamiento de Berlín para que el nuevo régimen libere "inmediatamente" a Morsi. Con todo, las potencias siguen sin referirse a lo ocurrido como un golpe de Estado.
Refugiado en la acampada
"Queremos la vuelta al poder de Morsi sin condiciones ni compromisos, de modo que pueda ejercer la autoridad y los poderes plenos como presidente", ha asegurado a Efe el clérigo islamista Safwat Higazi, sobre quien pesa una orden de arresto de la Fiscalía por supuestamente haber incitado a la violencia.
"Todas esas acusaciones son falsas y carecen de pruebas", ha sostenido Higazi, quien ha reconocido haberse refugiado entre la multitud de Rabea al Adauiya después de que las autoridades -según dijo- hubiesen cercado su casa y sus oficinas.
Los Hermanos Musulmanes se han negado a reconocer a las nuevas autoridades tras el golpe militar, aunque están abiertos a la negociación si Morsi es restituido como mandatario. Los manifestantes han escuchado los discursos de los dirigentes islamistas sobre el escenario principal frente a la mezquita y defendieron que su protesta se alargue hasta ver cumplidas sus demandas.
"No nos quedaremos tranquilos hasta llevar a hombros a Morsi al palacio presidencial", ha sostenido a Efe una mujer identificada como Nagla, cartógrafa de profesión y que acudió acompañada de su familia desde la provincia de Sharqiya, en el delta del río Nilo.
"Somos gente pacífica y si no se nos tiene en cuenta habrá una escalada de las manifestaciones y tomaremos el control de todas las plazas de Egipto", ha afirmado Hesa, quien ha reclamado un gobierno civil y no militar.
Los asistentes se refrescaban echándose agua por encima o cubriéndose con paños mojados para evitar beber líquidos por estar cumpliendo el ayuno diario del mes de ramadán, que comenzó el miércoles. Otros buscaban la sombra de las tiendas de campaña levantadas en los alrededores de la plaza, esperando que se pusiera el sol para poder tomar juntos la tradicional comida del iftar y rezar mientras prosiguen su protesta.