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El exconseller balear de Turismo entra en la cárcel por corrupción

  • Ha llegado en su propio vehículo acompañado por familiares
  • Buils cometió un delito de malversación en 2007 y otro de prevaricación

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El exconseller balear de Turismo, Francesc Buils, ha ingresado esta tarde en la cárcel de Palma en cumplimiento de la orden dictada el pasado martes por la sala de la Audiencia provincial, que en junio de 2012 le condenó a 3 años de prisión por corrupción en el caso Voltor.

Buils ha llegado a la cárcel en su propio vehículo acompañado por unos familiares alrededor de las 17:00 horas. Cuatro horas antes recogía en la audiencia de Palma el mandamiento de prisión para iniciar el cumplimiento de la pena.

A la prisión ha llevado la misma bolsa que tenía esta mañana en la Audiencia, desde donde el exconseller creía que iba a ser conducido directamente por la Guardia Civil, por lo que incluso había ido sin teléfono ni reloj.

El martes pasado la sección segunda del tribunal provincial dio 48 horas para entrar en prisión tanto al exconseller de Turismo, como al antiguo responsable administrativo de la misma Conselleria, Antonio Rebassa, cuya condena a 4 años y medio también es firme.

Delitos de prevaricación y malversación

Buils cometió un delito de malversación en 2007 y 2008 al gratificar con 15.000 euros de dinero público al exalcalde de Sóller, Antoni Arbona, miembro de su partido, por unos trabajos que no hizo.

La justicia considera que el exconseller utilizó esos fondos para ganarse el apoyo de Arbona y retribuirle labores para el partido nacionalista, que desapareció en la pasada legislatura por los numerosos casos de corrupción que le afectan.

También fue condenado por este mismo caso a 7 años de inhabilitación para ejercer cargo público por un delito de prevaricación.

Por su parte, Arbona y el exgerente del Instituto de Estrategia Turística, Antoni Oliver, confesaron los hechos en el juicio ante la Audiencia provincial celebrado en la primavera de 2012.

En la sentencia se estima probado que Buils quería que el exalcalde "influyera positivamente a su favor" y además pretendía pagarle varios actos de UM que organizó en un hotel de su propiedad, para lo que decidió "compensarle y favorecerle" con fondos públicos.

En 2007 se le pagaron 3.000 euros justificados con una factura que ni siquiera elaboró Arbona y que no correspondía a ningún servicio y un segundo pago se hizo mediante un contrato directo de 12.000 euros para un asesoramiento de senderismo en la Sierra de Tramuntana, trabajo que el beneficiario nunca ejecutó

El exconseller de Unió Mallorquina (UM) ha entrado en prisión un día más tarde de que lo hiciera Maria Antònia Munar, la líder histórica del disuelto partido nacionalista, también condenada por corrupción en dos casos distintos.

En ese mismo centro penitenciario cumple también condena por delitos cometidos en el ejercicio de su responsabilidad política otro dirigente de UM, Bartomeu Vicens. Por su parte, el Tribunal Supremo ha confirmado una pena de 4 años para el también exconseller de Turismo de UM, Miquel Nadal, por el caso Voltor.