El maquinista hablaba por teléfono con personal de Renfe en el momento del accidente
- Personal de Renfe le llamó para indicarle el camino al llegar a Ferrol
- En los kilómetros previos al accidente el tren iba a 192 km/h
- Tras activarse un freno, se salió de la vía a 153 kilómetros por hora
- Son datos de las cajas negras abiertas este martes en el juzgado
El maquinista del tren que descarriló en Santiago de Compostela, Francisco José G.A., estaba hablando por su teléfono de empresa con personal de Renfe en el momento del accidente, según ha desvelado el audio de las cajas negras, cuyo contenido se ha volcado este martes en el juzgado que lleva la investigación.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Galicia en una nota, el tren circulaba a 192 km/h en los kilómetros previos al siniestro, en el que han fallecido 79 personas. En el momento de su salida de la vía, la velocidad era de 153 km/h después de haberse activado un freno segundos antes.
Minutos antes del accidente, el maquinista recibió una llamada en su teléfono profesional, al parecer de un controlador de Renfe, para indicarle el camino que tenía que seguir al llegar a Ferrol. Según el tribunal, del contenido de la conversación y por el ruido de fondo "parece que el maquinista consulta un plano o algún documento similar en papel".
Estos son las primeras informaciones provisionales que se extraen del análisis de los últimos kilómetros recorridos por el tren antes de su salida a la vía, según el contenido de las cajas negras a la espera del informe de la policía judicial.
En su declaración ante el juez, el pasado domingo, el maquinista reconoció que se había despistado hasta el punto de creer que se encontraba en otro punto del recorrido y no en las inmediaciones en la fatídica curva de A Grandeira, en Angrois, que está limitada a 80 kilómetros por hora. El juez le dejó en libertad con cargos.
Según la Guía de Buenas Prácticas de Renfe para sus empleados a la que ha tenido acceso Europa Press, Renfe recomienda a sus maquinistas suprimir las conversaciones durante la conducción en los puntos críticos en donde se requiera más atención.
Este documento recomienda llevar apagados los dispositivos móviles personales durante la conducción y hacer "un uso responsable" en el caso de los móviles corporativos. La guía señala que la telefonía móvil supone un riesgo ya que es una "actividad ajena a la conducción que requiere ciertas demandas que compiten con esta última".
Volcado de la información de las cajas negras
La información de las cajas, que en realidad son de color naranja y que están situadas en el vagón delantero y trasero del tren, se ha volcado este martes por la mañana en el Juzgado de Instrucción número 3 de Santiago de Compostela, cuyo titular, Luis Aláez, lleva la investigación del accidente.
El vaciado de datos ha llevado cinco horas de trabajo, un proceso en el que ha habido un ligero retraso porque el juez ha ordenado la realización de copias de seguridad del contenido de las cajas y para ello se contactado "por prevención" con el fabricante, han informado a Efe fuentes próximas a la investigación.
Se han extraído tanto datos técnicos como de voz, y se ha hecho una transcripción de las conversaciones en tiempo real, han señalado las mismas fuentes consultadas.
Los técnicos llegaron unos minutos antes de las diez de la mañana a la sede del juzgado de instrucción número tres de Santiago, que es el encargado de la investigación del accidente y abandonaron estas instalaciones sobre las tres.
En un primer momento el juez se reunió con personal de la Policía Científica para definir los pasos a seguir para el volcado de la información de las cajas negras.
A continuación, el titular del juzgado número tres, la secretaria judicial y el fiscal se reunieron con policía científica, judicial, técnicos de Renfe, Adif y técnicos de la Comisión de Investigación del Ministerio de Fomento para analizar la forma en que se iba a acceder a la información y comprobar que todas las partes estaban de acuerdo.
Volcado en un lápiz de memoria
Una vez recibidas las especificaciones técnicas de las cajas negras y de realizar una prueba se procedió al volcado de información de manera que quedase totalmente garantizada la integridad y fiabilidad del contenido.
Para ello, los datos fueron extraídos en un lápiz de memoria aportado por el juzgado y posteriormente se hicieron copias autentificadas con firma digital. La información obtenida está encriptada y se pasa por un programa informático para proceder a su desencriptación, de modo que se pueda acceder a los datos.
El juez ha decidido, además, autorizar a los técnicos de la Comisión de Investigación de Fomento a realizar mediciones de las ruedas de los vagones, siempre acompañados por policía judicial.
Los vagones y las máquinas se encuentran custodiados por la policía en una nave semidescubierta a unos veinte kilómetros de Santiago, en Padrón (A Coruña).
Los vagones no se moverán hasta que se completen las inspecciones oculares y todavía está pendiente el acceso a pequeñas zonas cerradas por hierros que hay que cortar, apunta el Tribunal Superior, que señala que existe "la posibilidad de que se trasladen perros para realizar una última inspección de los restos".
También está previsto realizar un estudio de la máquina y, por el momento, no ha sido citado para declarar ningún testigo.
Las cajas negras registran todos los movimientos del tren
Registra todos los estados de las señales por donde circula el tren, así como las actuaciones que realiza el maquinista dependiendo del estado de las señales, según ha podido saber TVE.
Tiene capacidad de registro de voz media hora y una capacidad de registro de datos de varios viajes (30 días o 20.000 kilómetros).
Compuestas por un hardware, un software e interfaces de entrada y salida de datos, las cajas negras muestran la identificación del maquinista, la velocidad máxima del vehículo, el porcentaje de freno de tren, el tipo de freno y la velocidad registrada por el velocímetro.
Indicadores de velocidad límite, de aviso y de sobrevelocidad
Así, registra la velocidad del tren, la velocidad límite, la velocidad meta, la velocidad de aviso, la velocidad de liberación y la indicación de sobrevelocidad.
También aporta datos sobre los frenos de emergencia por dispositivo de vigilancia, freno de emergencia por accionamiento manual y sobre circuitos de seguridad del accionamiento manual.
La caja negra aporta información sobre detección de inestabilidades en el mecanismo de rodadura y detección de descarrilamiento.
Todos los datos que aporten las cajas negras se contrastarán con el testimonio del propio maquinista, Francisco José Garzón, que este lunes declaró ante el juez que se despistó hasta el punto de no saber dónde estaba.
Quince heridos siguen en estado crítico, entre ellos un niño
La Consellería de Sanidad ha informado de que 66 pacientes heridos en el accidente ferroviario permanecen ingresados en los hospitales gallegos, de los que 15 están en estado crítico y entre ellos hay un menor.
Del total de pacientes, 36 están en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago, de los que 14 son críticos y, de estos últimos, uno es el menor.
Además, 17 pacientes están en el Policlínico La Rosaleda de Santiago; 7 en el Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña, entre ellos 1 crítico; 2 en el Complejo Hospitalario Universitario de Pontevedra, 2 en el Complejo Hospitalario Universitario de Ourense, y 2 en el Hospital Domínguez de Pontevedra.