Las memorias rápidas de Manuel Jabois

• El escritor y colaborador de El Mundo ha publicado su cuarto libro, Manu
• Narra su experiencia como padre primerizo desde el humor y la autocrítica

Manuel Jabois

El nacimiento de su primer hijo le ha valido como excusa para escribir el que ya es su cuarto libro, Manu. Unas “memorias rápidas”, como él mismo lo llama, en las que cuenta cómo vivió el embarazo de su pareja y los primeros días de vida del niño.

Jabois (Sanxenxo, 1978) narra desde los cambios hormonales de Ana, la madre, durante la gestación hasta la vergüenza que sintió él al darse cuenta, en un congreso de periodismo, de que tenía el pantalón roto a la altura de lo que no se suele enseñar, pasando por la infancia plácida y feliz que le facilitaron sus padres o sus visitas, como acompañante, al ginecólogo.

El ensayo, eso sí, comienza con una escena insólita: la de Manuel durmiendo a pierna suelta y desnudo en la cama del hospital donde se supone que la madre de la criatura debía descansar horas después del parto.

Colaborador habitual de El Mundo y de Onda Cero y ganador del Premio Nacional de Periodismo Julio Camba y del Premio de Periodismo Digital José Manuel Porquet, Jabois nos atiende por teléfono desde Galicia un tanto somnoliento, a juzgar por sus sonoros bostezos, y a unas horas de desplazarse a Madrid para cubrir la comparecencia en el Congreso de Mariano Rajoy por el caso Bárcenas.

"Siempre salgo expulsado de los sitios"

– Menuda la que liaste en el hospital…

Sí, bueno, nada fuera de lo común en mi vida. Siempre salgo expulsado de todos los sitios.

– ¿Cómo está Manu?

Muy bien, crece adecuadamente y está a punto de andar. Este domingo cumple un año.

– ¿Por qué sentiste la necesidad de escribir estas “memorias rápidas”, como las llamas tú?

Pues porque quería dar salida a los apuntes que había tomado durante el embarazo y porque, al fin y al cabo, yo soy cronista y presto cobertura a cualquier noticia de actualidad. Así que me pareció que el embarazo de mi mujer (suelta un largo bostezo) merecía su propia crónica.

– ¿Eres igual de cómico en la vida real que escribiendo?

Procuro no serlo, pero sin resultados visibles.

– He visto que alguien te ha acusado de utilizar la primera persona en tus escritos periodísticos… ¿Algo que decir al respecto?

Es que eso no es así. Yo hago opinión y por eso uso la primera persona. Es casi un deber. En una noticia normal no se me ocurriría.

– ¿Cómo calificas el periodismo que se hace en este país?

Pues no sé. ¡Qué pregunta tan difícil! Bueno, yo creo que, en general, las empresas están en stand by. Es decir, a la expectativa de ver qué pasa con la profesión. Sabemos lo que va a pasar, lo que ignoramos es cuándo.

– ¿Y qué va a pasar?

Pues que va a haber una transición de un formato a otro y ello va a traer bastantes desgracias para el gremio. No parece que vaya a haber cabida para todos los periodistas.

Con Rajoy va a pasar lo que siempre pasa: ¡Nada!

– Mañana vienes a Madrid a cubrir la comparecencia en el Congreso de Rajoy sobre el caso Bárcenas. ¿Qué crees que va a pasar?

Pues lo que pasa habitualmente con Rajoy: ¡nada! Me imagino que hablará sin ninguna luz, como siempre. Es verdad que comparece, pero aclarar creo que va a aclarar poco. A lo mejor me equivoco y resulta que durante su intervención pronuncia las palabras “Luis Bárcenas”, pero vamos, no creo.

– Vienes con poca ilusión entonces…

No, lo haré con toda la ilusión del mundo, porque a mí me gusta escribir desde el Congreso. Diga lo que diga Rajoy, a mí me da exactamente igual.

– He leído por ahí que escribes muy bien con resaca…

Bueno, eso es una teoría que aún debo probar científicamente. No sé si es porque estoy más desinhibido o es porque tengo una percepción más amplia de la realidad. Eso cuando llego al ordenador, porque normalmente me quedo tirado en la alfombra.

– ¿Por qué cambiaste la filología por el periodismo?

Yo cambié de carrera unas cinco veces en cinco años. Empecé con Derecho, luego pasé a Filología y más tarde anduve por varias ramas de Letras.

– ¿Y acabaste estudiando Periodismo?

Acabé practicándolo, que no estudiándolo.

"No estoy preocupado por qué planeta dejaré a mis nietos"

– Después de tener a tu primer hijo te habrán cambiado las prioridades…

Sí, no cambian tanto como algunos me decían –eso de que no vas a volver a tener vida– pero sí cambian. Te esfuerzas más en el trabajo porque sabes que lo que vas a ganar no es solo para ti sino también para él y… Eso sí que es bonito.

– Se ha convertido en lo más importante, me imagino.

Sí, bueno…Tampoco es que tenga un ranking de personas importantes, pero, desde luego, está en una posición muy alta, sí. Quizás ocupe el primer lugar. Me cuesta mucho medir los afectos.

– ¿Te preocupa su futuro en este país?

No me preocupa mucho, la verdad. Intento vivir a corto plazo. No soy de esos que se preocupan por qué planeta dejaré a mis nietos. Me preocuparé del futuro de Manu cuando vaya a la universidad, pero ahora que tiene un año me da exactamente igual con lo que se encuentre en 25 años.