El BCE insiste: los créditos en España e Italia no reflejan los bajos tipos de interés europeos
- Pone de manifiesto las diferencias en la percepción del riesgo de crédito
- Considera fundamental seguir haciendo reformas para impulsar las economías
El Banco Central Europeo (BCE) ha vuelto a señalar este jueves que los créditos que se conceden en Italia y España no reflejan las tasas de interés oficiales en la zona euro, que se encuentran en el mínimo histórico del 0,5%, algo que sí sucede en las otras dos grandes economías de la zona euro, que son Alemania y Francia, cuyas empresas y familias sí se están beneficiando de créditos más bajos.
El organismo pone de manifiesto en el boletín de agosto que los factores de riesgo (el temor a prestar) y los diferenciales de la deuda soberana (la prima de riesgo) son los que explican en parte esta situación, por lo que considera "fundamental" que los países sigan reduciendo déficit y haciendo reformas estructurales, "con el fin de impulsar la activiad económica y la estabilidad financiera".
El BCE asegura que ha respondido "con determinación" a las consecuencias de esa fragmentación sobre la política monetaria, "introduciendo diversas medidas convencionales y no convencionales, que han contribuido considerablemente a aliviar las tensiones financieras". Además, señala que para garantizar que la bajada de tipos se note en todos los niveles "es esencial" reforzar a aquellas entidades financieras que lo necesiten.
Se pagan más por los créditos más pequeños
La entidad monetaria añade que "pese a la orientación acomodaticia de la política monetaria, las condiciones de concesión de los préstamos bancarios han seguido siendo heterogéneas". Y esto está afectando especialmente a los de menor cuantía, los que suelen pedir las pymes. Según los datos recopilados por el BCE, las tasas de interés que los bancos aplican a préstamos pequeños (de hasta 250.000 euros) son muy superiores a las tasas de los créditos de más de un millón de euros.
Destaca el aumento desde el verano de 2011, en particular en el caso de España e Italia. En España, si en el verano de 2011 la diferencia era de 175 puntos básicos entre ambos, en abril de 2013 se situaba en los 250 puntos adicionales. En Alemania y Francia también aumentó ese diferencial, pero en menor medida. De hecho, en Francia, según los datos del BCE, la diferencia ha vuelto a niveles de 2011.
Para el BCE, el hecho de que haya diferencias en los tipos de interés "refleja, en cierta medida, ciclos económicos asincrónicos y diferencias en la percepción del riesgo de crédito en los distintos países en los últimos años".
Al mismo tiempo, el organismo dice que la fragmentación financiera que sufre la eurozona "ha mermado la eficacia de la política monetaria, ya que las medidas de estímulo monetario introducidas desde finales de 2011 apenas han influido en las condiciones crediticias generales en gran parte de la zona euro".
No obstante, el BCE recuerda que medidas como el anuncio de las OMC, la inyección de liquidez al sistema o la reducción de tipos rectora hasta el mínimo histórico del 0,5% "han logrado reducir las tensiones en los mercados de deuda soberana y las restricciones de financiación.