El británico Idris Elba será el próximo Nelson Mandela en una película de Justin Chadwick
- Elba interpreta al líder sudafricano en Mandela: Long walk to freedom
- Es un 'biopic' poco ortodoxo dispuesto a mostrar 'otra cara' del Nobel de la Paz
- El actor podría ser candidato al Oscar e interpretar al primer James Bond negro
El actor británico Idris Elba se convertirá en el próximo Nelson Mandela del cine en una controvertida producción sobre la vida del líder sudafricano que apunta a los Oscar.
Después de salvar al mundo en Pacific Rim, la última película de Guillermo del Toro, Idris Elba, al que muchos recordarán como el carismático y ambicioso Striger Bell, número dos de la red de narcotraficantes que trae de cabeza a la policía de Baltimore en la aclamada obra televisiva de David Simon, The Wire, se pone en la piel del Nobel de la paz sudafricano en una poco ortodoxa biografía cinematográfica.
Su mezcla de sangre ghanesa y de Sierra Leona lo han convertido en el candidato elegido para protagonizar Mandela: Long walk to freedom, un biopic del exdirigente sudafricano dirigido por Justin Chadwick, que abarca desde la infancia rural del líder hasta su llegada a la presidencia en 1994, pasando por sus 67 años de lucha contra el 'apartheid'.
Una película que será cuanto menos controvertida, ya que en ella veremos no solo al más conocido Mandela que encandila con sus discursos, sino también al que fabrica bombas, revienta edificios y corre por las calles al más puro estilo de un filme de acción.
“A la gente le podrá gustar o podrá odiarlo“
Elba se muestra orgulloso de representar a este mito pero también lo considera una gran responsabilidad: "Me siento muy honrado de ser parte de esta película. Ya está hecho, a la gente le podrá gustar o podrá odiarlo, pero ya está hecho. Hemos hecho una película sobre uno de los seres humanos más grandes del planeta. Tendrá que ser la gente quien decida", dice.
Para preparar el personaje, el actor asegura no haber estudiado otras interpretaciones, como la que hizo Sidney Poitier en la televisiva Mandela and De Klerk o la más reciente de Morgan Freeman en Invictus. "Intento no estar influido", explica.
Candidato al Oscar
Un par de tráileres han sido suficientes para que medios especializados empiecen a hablar de las posibilidades de Elba de ser candidato al Oscar al mejor actor en la próxima edición de los galardones de Hollywood. Su estreno, previsto a finales de noviembre en EE.UU., llega justo a tiempo para las nominaciones, pero además va de la mano de la distribuidora The Weinstein Company, todos unos expertos en lograr candidaturas, con más de una treintena en los últimos diez años, y casi 300 si se añaden las de su antecesora Miramax.
Elba logró su primer éxito en forma de Globo de Oro por su detective en Luther, drama policial de la BBC y desde entonces ha pasado por la nave Prometheus, de Ridley Scott, o ha aparecido en un pequeño papel en Thor.
¿El primer James Bond negro?
En la actualidad Elba se encuentra en pleno rodaje de The Gunman, una de espías en la que compartirá cartel con Sean Penn y Javier Bardem, y quien sabe si en un futuro no muy lejano podríamos llegar a verlo como el primer James Bond negro.
Al menos eso ha transmitido la actriz Naomi Harris, su compañera de reparto en la película, quien disparó los rumores hace meses al apuntar que Elba ha mantenido contactos con la productora. Sin confirmar ni desmentir, y sin olvidar que Daniel Craig no ha anunciado planes de retirarse, el actor ha dicho que estaría encantado de hacerlo pero que de momento no hay nada.
Robots y monstruos submarinos
Para los que no puedan esperar, este fin de semana, Elba llega a las salas de cine como el comandante Stacker Pentecost de Pacific Rim, el hombre que contra viento y marea dirige la misión de los 'jaegers', gigantescos robots tripulados por humanos para combatir a unos temibles monstruos submarinos llamados 'kaiju' que amenazan con acabar con acabar con todo.
"Mi personaje es un hombre de carrera, que ha estado en el ejército durante prácticamente toda su vida" y al que "no le gusta perder, eso seguro, le dices 'no' y el hace que sea 'sí'", explica el actor. "Es un hombre cálido y bueno, pero tiene que soportar demasiada presión", precisa.
Rodar con Del Toro ha sido para él una gran experiencia. "Es muy generoso y sabe lo que hace", asegura. "Una escena le puede llevar un día entero, monta veinte sets diferentes para veinte tomas, donde otros hacen cinco".