Una española muere en un accidente de autocar en Francia con más de 30 heridos
- Un ciudadano francés también ha fallecido
- El chófer, de nacionalidad española, se encuentra hospitalizado
- La fiscalía apunta que pudo deberse a una discusión con un pasajero
Una española, originaria de la Comunidad Valenciana, y un francés han muerto esta madrugada en Francia en un accidente de autocar que provocó además una treintena de heridos, según han informado este domingo fuentes oficiales, que han añadido que el chófer, de nacionalidad española, se encuentra hospitalizado.
El suceso ha tenido lugar a la altura de la localidad de Fitou, en el sur del país, hacia las 01.30 hora local (23.30 GMT) y por causas que todavía tienen que esclarecerse, indicaron fuentes de la prefectura de Aude. No obstante, la fiscalía apunta que la causa puede ser una discusión entre el conductor y un pasajero de nacionalidad ucraniana.
El autocar había salido de Marsella con dirección a Murcia y entre sus 44 pasajeros había personas de nacionalidad española, francesa, ucraniana y rusa, pero la prefectura no dispone aún de la lista total de heridos de cada país.
La mujer fallecida tenía 55 años de edad y su familia, que fue prevenida por otros pasajeros desde el teléfono móvil de la víctima, ya se ha desplazado hasta Francia para identificarla.
El chófer, según las primeras declaraciones ofrecidas por este a los gendarmes, explicó que el accidente se produjo después de que un pasajero diera un volantazo para obligarle a que frenara.
No obstante, según indican desde la prefectura, otros testigos contradicen la versión del conductor, que está previsto que esta tarde vuelva a prestar declaración a la policía.
Los análisis que se le han realizado indican que no conducía bajo los efectos de alcohol o estupefacientes.
Los heridos ya han sido dados de alta
Los heridos, cuya vida no corre peligro, han sido evacuados esta mañana a los hospitales más cercanos, mientras que los pasajeros que salieron indemnes fueron trasladados a un polideportivo de Fitou, donde se puso a su disposición un equipo de atención psicológica.
La mayoría de los 30 heridos leves en el accidente son de Ucrania y Rusia, y ya han recibido el alta médica.
La empresa que realizaba el servicio, Eurolines, lo había subcontratado a la empresa Autocares Águilas, de esta población costera murciana.
Así lo ha conocido Efe de fuentes próximas a la investigación y de Juan Francisco Gómez, responsable de la empresa subcontratada, que desde hace dos años facilita a Eurolines autocares y chóferes para realizar ese trayecto en verano, cuando se incrementa la demanda de billetes.
Los tres conductores que viajaban en el autobús son de los municipios murcianos de Fuente Álamo, Lorca y Puerto Lumbreras.
Gómez ha relatado que solo uno de ellos tiene heridas leves y los otros dos resultaron ilesos, pero no ha podido comunicarse con ninguno de ellos porque están retenidos por la policía francesa y la fiscalía de Narbona para prestar declaración sobre el accidente ocurrido sobre la una y media de la madrugada a la altura de la localidad gala de Pitou.
El autocar subcontratado siniestrado llevaba el rótulo de Autocares Lorca, porque algunos de los 27 coches de la flota de Autocares Águilas fueron comprados por Gómez a la empresa lorquina en la que trabajaba con anterioridad y no los había rotulado con el nombre de la sociedad limitada con cuya documentación oficial viajaba ahora ese vehículo.
Desde varios años antes de que realizara el servicio a Francia Autocares Águilas hacía regularmente la subcontrata Autocares Gómez. Aunque tiene sede en Águilas, la empresa de autobuses con ese nombre tiene parte de sus instalaciones en la sede de Autocares Lorca, ubicada en la diputación lorquina de La Torrecilla, por las que Gómez paga un alquiler.
Además del refuerzo en verano de esta línea entre Francia y España, Autocares Águilas realiza trayectos urbanos entre ese municipio murciano cercano a Almería y sus pedanías de Calabardina, El Cocón y Los Arejos.
Supuesta discusión
El fiscal de Narbona, David Charmatz, ha dicho a la emisora de radio "RTL" que el pasajero, de nacionalidad ucraniana, declaró durante los interrogatorios que discutió con el chófer para intentar que frenara el vehículo, y que ante la negativa de este, acabó dando un volantazo.
"Lo único que sabemos es que uno de los pasajeros ha confirmado lo que nos parecía totalmente improbable, a saber, que efectivamente empujó el volante después de haber discutido con el chófer para que el autocar se detuviera", explicó en esa emisora.
El conductor, de nacionalidad española y que se encuentra hospitalizado, había ofrecido esa misma versión de los hechos en sus primeras declaraciones a la policía, pero hasta ahora esa explicación había sido tachada de "poco creíble" por los investigadores.
La declaración de ese pasajero, según Charmatz, parece quitarle la responsabilidad de lo sucedido, "pero todavía se debe esclarecer con claridad cómo tuvo lugar el accidente, qué pasó entre ellos, qué originó el conflicto y qué hizo que el chófer no se apercibiera" de la actitud del pasajero.