El Gobierno de Estados Unidos recurre la fusión entre American Airlines y US Airways
- Por "reducir sustancialmente la competencia en el transporte aéreo"
- El Departamento de Justicia ha dicho que se traduciría en billetes más caros
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha presentado una demanda contra el proceso de fusión entre las aerolíneas American Airlines y US Airways al considerar que "reduciría sustancialmente la competencia en el transporte aéreo".
La fusión, valorada en 11.000 millones de dólares, crearía la mayor aerolínea mundial y, según ha indicado el Departamento de Justicia en un comunicado, se traduciría en billetes más caros y menores servicios.
"Los viajes en avión son vitales para millones de estadounidenses que vuelan de manera habitual, ya sea por trabajo o por turismo", ha dicho el Fiscal General Eric Holder. "Los consumidores pagarían el precio de esta operación con billetes más caros, tasas más elevadas y menos posibilidades de elegir", ha añadido el Fiscal General.
La demanda legal ha sido respaldada por los fiscales generales de seis estados, entre ellos Texas, sede de AMR, y Arizona, sede de US Airways, así como el Distrito de Columbia. Los otros estados que han apoyado la iniciativa son Florida, Pensilvania, Tennessee y Virginia. El procedimiento legal busca bloquear el proceso de fusión y "preservar la competencia entre compañías que la operación eliminaría", según el Departamento de Justicia.
American Airlines y US Airways compiten en más de 1.000 rutas
En 2012, los usuarios gastaron más de 70.000 millones de dólares en viajes en avión dentro de Estados Unidos, ha destacado el Departamento de Justicia en su comunicado, mientras que en los últimos años, las grandes aerolíneas han subido, "en tándem", el precio de los billetes, han creado nuevas tasas e incrementado las existentes y han reducido el servicio, ha añadido.
El Departamento de Justicia ha recordado que American Airlines y US Airways compiten directamente en la actualidad en más de 1.000 rutas, en un mercado ya de por sí concentrado. Y si se produjera la fusión de las dos compañías, cuatro aerolíneas controlarían el 80% del mercado de transporte aéreo estadounidense.
Por otra parte, la fusión ya recibió el visto bueno de la Comisión Europea (CE) la semana pasada con condiciones, como la liberación de una franja horaria o slot diario en el aeropuerto de Heathrow (Londres). Así como facilitar la entrada de competidores en la ruta Londres-Filadelfia para impedir un monopolio en ese trayecto.
EE.UU. desreguló el mercado de aviación comercial en 1978
El intento de fusión entre AMR y US Airways es el último capítulo de la última ola de fusiones en el sector de la aviación privada, después de que en 2008 se unieran Delta Air Lines y Northwest Airlines y dos años lo hicieran United Airlines y Continental Airlines.
El sector aéreo en EE.UU. está dominado por compañías que han pasado por procesos de fusión, lo que ha permitido a la industria manejar un menor rango de precios, repartirse rutas y aumentar la rentabilidad con tarifas más altas a costa de reducir los servicios, desde equipajes, cambio de reservas o comida a bordo.
En 1978, Estados Unidos desreguló el mercado de aviación comercial lo que llevó a una intensa competencia entre un gran número de aerolíneas y a que volar fuera algo al alcance de todos.
Desde hace una década, la decena de compañías aéreas que consiguieron sobrevivir se ha visto reducida a apenas cuatro principales -Delta, United Continental, Southwest, y en el caso que se produjera la fusión, American US Airways-.
Esas cuatro compañías controlarían el 80% de las rutas comerciales en Estados Unidos, un oligopolio que el Departamento de Justicia considera perjudicial para los pasajeros del transporte aéreo, un medio vital en el vasto EE.UU.