Muere una niña en un tiroteo en la barriada sevillana de las Tres Mil Viviendas
- También los padres de la menor han resultado heridos
- Ni ella ni sus progenitores pertenecían a las familias implicadas
- La reyerta se produjo por una deuda relacionada con drogas
Una niña de 7 años ha muerto este miércoles de madrugada en un tiroteo entre dos clanes de la droga en la barriada de las Tres Mil Viviendas de Sevilla, tras recibir un disparo, que le entró por la espalda y le afectó a los pulmones y a las arterias del corazón, según la autopsia realizada este miércoles por la mañana.
El tiroteo, en el que resultaron heridos leves por bala los padres de la niña, se produjo entre dos clanes relacionados con la droga de etnia gitana, Los Perla y Los Marianos, este último implicado en 2009 en otro intercambio de disparos en la vía pública en las Tres Mil Viviendas que costó la vida a un menor, han informado a Efe fuentes de la investigación.
La niña, que fue trasladada al Hospital Virgen del Rocío, donde no se le pudo reanimar, recibió un solo disparo "mortal de necesidad" que le entró por la espalda y le salió por la cara anterior del tórax y le afectó a los pulmones y a las arterias del corazón.
Las primeras hipótesis de la investigación policial señalan que una de las familias debía dinero a la otra, lo que originó el intercambio de disparos, ha añadido la policía, que espera practicar las primeras detenciones en las próximas horas y que ha establecido un dispositivo de seguridad en la zona para evitar represalias.
Ni la menor ni sus padres pertenecen a las familias implicadas
Sin embargo, al parecer, ni la niña muerta ni los padres heridos pertenecen a las familias implicadas en la reyerta, y viven en las inmediaciones de uno de los domicilios, en un bajo de la calle Orfebre Cayetano González, una zona marginal conocida popularmente como Los Amarillos situada junto a locales comerciales.
La casa en la que vivía la menor, que está rodeada de una valla metálica, presenta varios disparos en la fachada así como en una persiana que da a la calle, junto a la cual la Policía ha marcado casquillos encontrados, que suman más de una veintena. Los agentes del Grupo de Homicidios han tomado muestras frente a la casa y han examinado los restos del tiroteo de anoche.
Mientras tanto, otros policías con furgonetas han instalado varios controles de vehículos en distintas calles de la barriada marginal de las Tres Mil Viviendas cercanas a las que se produjo la muerte de la menor.
En los pisos donde vivía la víctima hay numerosas casas con desperfectos estructurales, y en una plaza cercana hay incluso gallinas sueltas.
En la zona de disputa se congregaron numerosas personas de etnia gitana con armas de fuego y palos, y fueron los vecinos los que sobre las 00.02 horas alertaron al servicio de emergencias de los numerosos disparos que estaban escuchando.
Hasta la zona se desplazaron agentes del Cuerpo Nacional de Policía y los servicios sanitarios, que evacuaron a la menor hasta el hospital Virgen del Rocío, donde los agentes policiales han tenido que intervenir para evitar más reyertas, y atendieron a los dos adultos heridos.
Otro tiroteo en el barrio
Tras el tiroteo en la casa de la menor se produjo otro intercambio de disparos en otra zona de las Tres Mil Viviendas distante unos cientos de metros y conocida como Las Vegas, según ha precisado a los periodistas el presidente de la asociación de vecinos Martínez Montañés, Rafael Pertegal.
En el barrio hay "una preocupación grande porque estos incidentes ocurren con mucha frecuencia, y en la mayor parte de los casos, la justicia, que tendrá mucho interés, no consigue dominar la situación", ha lamentado el presidente de la asociación vecinal, que vive en los pisos en los que se produjo el segundo tiroteo.
En las inmediaciones del Hospital Virgen del Rocío, donde aún estaban ingresados este miércoles por la mañana los padres de la menor muerta, había cuatro mujeres de etnia gitana que sólo acertaban a lamentar en voz alta "por qué le ha tocado a ella".