Enlaces accesibilidad

Trabajadores del sector de comida rápida en EE.UU., en huelga para lograr una subida salarial

  • El paro afecta a McDonald's, Wendy's y Burger King entre otros restaurantes
  • El salario medio de las cadenas más conocidas es de 8,94 dólares la hora
  • El sector da trabajo a 13 millones de estadounidenses

Por
Un restaurante de Wendy's en Nueva York
Un restaurante de Wendy's en Nueva York.

Los trabajadores del sector de restaurantes de comida rápida en Estados Unidos han ido a la huelga este jueves para reclamar un aumento del salario mínimo federal, desde los 7,25 dólares actuales hasta 15 dólares.

De esta manera, empleados de McDonald's, Wendy's y Burger King entre otros restaurantes han informado que van a interrumpir sus tareas en 50 ciudades de EE.UU.

Las protestas se han extendido por todo el país, en ciudades como Boston (Massachusetts), Memphis (Tennessee), Alameda y Los Ángeles (California) o Carolina del Norte, donde los trabajadores de diferentes cadenas de comida rápida se han unido por primera vez a estas protestas a nivel nacional.

No se puede vivir con 10.000 dólares al año

Los empleados han anunciado tambén que quieren formar sindicatos y negociar salarios más altos con sus empleadores sin enfrentar represalias de franquicias o casas centrales. El salario medio actualmente en las cadenas más conocidas es de 8,94 dólares la hora.

Un organizador comunitario de Saint Louis, Martin Rafanan, ha dicho que los empleados de McDonald's y Wendy's de esa zona cobran el salario mínimo, 7,35 dólares la hora de trabajo.

"Si se paga 7,35 la hora y se emplea a alguien por 20 ó 25 horas a la semana, ese trabajador está llevando a casa unos 10.000 dólares por año. No se puede vivir con eso", ha dicho Rafanan.

El secretario-tesorero del Sindicato Internacional de Empleados de Servicio (SEIU), Eliseo Medina, ha asegurado que las huelgas de este jueves "son una clara y firme señal de que los trabajadores de la comida rápida están hartos de tratar de sobrevivir con salarios de pobreza y quieren un salario que alcance para vivir".

Como dijo el miércoles el presidente, Barack Obama, "las desigualdades salariales y de oportunidades son una tarea inconclusa en EEUU. Hoy, los trabajadores de comida rápida se han pronunciado, y el SEIU se enorgullece de apoyarlos", ha afirmado Medina.

El sector mueve 200.000 millones de dólares al año

Por su parte, la Asociación Nacional de Restaurantes de Estados Unidos (National Restaurant Association) ha informado en un comunicado que, "el sector da trabajo a 13 millones de estadounidenses y que las negociaciones sobre salarios deberían basarse en hechos".

"Solo el 5% de los empleados de restaurantes ganan el salario mínimo y son predominantemente trabajadores de media jornada donde la mitad de ellos son adolescentes", ha declarado el vicepresidente ejecutivo de asuntos de política y gubernamentales de la asociación, Scott DeFife.

Por su parte, las empresas de comida rápida, que no han alterado sus políticas salariales en respuesta a otros paros recientes, han dicho que ofrecen buenos puestos de trabajo así como oportunidades de promoción dentro de las compañías.

"El objetivo de McDonald's es ofrecer un sueldo competitivo y beneficios a nuestros empleados. Nuestra historia está llena de ejemplos de personas cuyo primer trabajo fue con nosotros y luego tuvo carreras exitosas tanto dentro como fuera de McDonald's", ha dicho la empresa a través de un comunicado.

La firma Burger King ha señalado que el 99% de sus restaurantes en Estados Unidos es propiedad de concesionarios que toman sus propias decisiones sobre la contratación, el despido y el pago de los trabajadores.

El sector de la comida rápida, que mueve 200.000 millones de dólares al año, está en el punto de mira porque los empleos de baja cualificación y a tiempo parcial, han sido precisamente la mayor parte de los trabajos que se han creado en el país desde el inicio de la recesión.