El Comité de Exteriores del Senado de EE.UU., partidario de autorizar una intervención en Siria
- Un borrador de resolución da un plazo de 60 días, renovable a otros 30
- Prohibe explícitamente desplazar tropas
- Kerry pide que no se limite la autoridad de EE.UU. a este momento concreto
El Comité de Relaciones Exteriores del Senado de EE.UU. ha acordado este martes un texto provisional de resolución para respaldar una acción militar en Siria durante 60 días y sin que esto implique tropas sobre el terreno.
El Comité escuchó al secretario de Estado, John Kerry, al de Defensa, Chuck Hagel, y al jefe del Estado Mayor Conjunto, el general Martin Dempsey, quienes explicaron las razones de la Casa Blanca para planear un ataque contra objetivos del gobierno de Bachar al Asad tras los supuestos bombardeos con armas químicas del 21 de agosto en Damasco.
El borrador de propuesto deja la puerta abierta a que el Congreso extienda durante 30 días adicionales las operaciones militares, pero exige a Obama una "solución diplomática para poner fin a la violencia en Siria" en el plazo máximo de 30 días tras la aprobación definitiva de la resolución, que podría producirse este miércoles.
Esta exigencia se atiene al compromiso de la Casa Blanca de no implicarse en la guerra civil siria por largo tiempo y seguir buscando una salida política al conflicto.
El texto prohíbe también explícitamente el despliegue de tropas de tierra a excepción de pequeñas misiones de rescate ante una emergencia.
La resolución del Comité llegó después de que Obama se garantizara el apoyo de los líderes de los partidos republicano y demócrata en el Congreso, John Boehmer y Nancy Pelosi. La Casa Blanca necesita aún la luz verde en la Cámara de Representantes, que junto al Senado compone el Congreso de los EE.UU.
Kerry pide no limitar la autoridad a un "momento concreto"
En su comparecencia ante el Comité de Exteriores del Senado, Kerry ha asegurado que la administración Obama no contempla la posibilidad de que el Congreso rechace la intervención dado que el voto negativo sería "demasiado catastrófico".
"No contemplamos que no se consiga la aprobación del Congreso porque es una idea demasiado horrible", ha explicado Kerry.
Kerry ha urgido, además, a no limitar la autoridad de Estados Unidos para atacar Siria "a un momento concreto".
"Sería importante que el propio Asad sepa que el Congreso no limita la autorización a un momento específico (...) Si (Al Asad) es lo suficientemente necio como para volver a hacerlo, existe la posibilidad de que el General (Martin Dempsey) dé continuidad a las acciones", ha explicado Kerry.
Kerry ha expresado ante la Comisión su confianza en que la visita del presidente Obama a Rusia, con motivo de la cumbre del G20, produzca algún "cambio de actitud" en Vladímir Putin sobre las "pruebas" del supuesto uso de armas químicas por parte del régimen sirio.
"Los rusos han condenado el uso de armas químicas, los iraníes también. Y a medida que la prueba de ese uso se hace más clara en el curso del debate, creo que va a ser muy difícil para Irán o Rusia decidir, en contra de esa evidencia, que hay algo digno de ser defendido", comentó Kerry
Por su parte, Dempsey, ha asegurado que, por el momento, no ha recibido orden de "cambiar la dinámica" del conflicto, sino que la posible intervención militar estaría dirigida a debilitar al régimen de Asad.
Además, Dempsey ha asegurado que el ejército de EE.UU. se ha preparado para atacar posibles objetivos posteriores, "si esto fuera necesario".
Por último, Chuck Hagel, secretario de Defensa, ha advertido del peligro de que grupos como Hizbulá podrían adquirir y utilizar armas químicas, facilitando la proliferación de tal armamento de destrucción masiva en la zona.
Seis de cada diez estadounidenses rechazan el ataque
Aunque el apoyo del Comité del Senado y de los líderes políticos es muy importante para Obama, la opinión pública sigue reticente respecto a una nueva intervención militar en el extranjero. Según una encuesta divulgada este martes, solo cuatro de cada díez estadounidenses apoyaría un ataque a Siria con misiles.
En el caso de un ataque con participación de países como el Reino Unido y Francia, el porcentaje de oposición baja al 51% y el de respaldo sube al 46%.
En cambio, un 70% de los entrevistados apoya el suministro de armas a los rebeldes sirios, aprobado por el Gobierno de Obama, mientras que un 27% se opone.
Con un margen de error de +/- 3,5 puntos porcentuales, la encuesta se realizó por teléfono a 1.012 adultos del 28 de agosto al 1 de septiembre y se ha divulgado en coincidencia con el inicio de las audiencias de Kerry, Hagel y Dempsey en el Congreso.
Días antes, otro sondeo de la cadena NBC reveló que casi el 80% de los estadounidenses prefieren que Obama obtenga la aprobación del Congreso.