La CNE critica la falta de concreción en el nuevo modelo retributivo para las energías renovables

• El regulador critica que su aplicación dependa de parámetros aún no definidos
• Los parámetros, difíciles de concretar y cuantificar para instalaciones existentes
• La Comisión Nacional de la Energía discrepa del trato diferenciado a Canarias
• También critica el procedimiento de urgencia elegido por el Gobierno

Imágenes de paneles solares y molinos de viento.

La Comisión Nacional de la Energía (CNE) aprecia "grandes incertidumbres" en el nuevo esquema de retribución a las energías renovables que prepara el Gobierno en la reforma eléctrica. Energía ha valorado la propuesta de normativa por la que se sustituye el sistema de primas por uno que garantiza una determinada rentabilidad a lo largo de la vida útil de la planta.

Uno de sus principales problemas, a juicio de la CNE, es que presenta grandes incertidumbres para su aplicación ya que ésta depende de unos parámetros que todavía no han sido definidos. Además discrepa del trato diferenciado para estas tecnologías fuera de la península.

El regulador realiza estas consideraciones en su informe (ver .PDF) sobre la propuesta de real decreto remitida por el Ministerio de Industria acerca de la regulación de la actividad de producción eléctrica a partir de fuentes renovables, cogeneración y residuos.

Incertidumbres para las renovables

El nuevo esquema de retribución, asegura la CNE, presenta "grandes incertidumbres para su aplicación a las aproximadamente 60.000 instalaciones existentes, ya que su aplicación depende de una serie de parámetros estándar que serán definidos en la orden de desarrollo del real decreto" y que son "parámetros difíciles de concretar y cuantificar, sobre todo para las instalaciones existentes".

La CNE también "echa en falta" la definición del concepto de número estándar de horas equivalentes de funcionamiento por instalación tipo y propone fijar un "término de inversión" para el cálculo de la retribución, que recoja todos los costes no recuperados por la planta.

Y advierte además de que, tal y como está concebida la propuesta, el término de retribución a la inversión puede ser negativa, lo que "podría considerarse incompatible con el diseño de un régimen retributivo específico que persigue fomentar este tipo de producción". Por eso solicita que quede "expresamente excluida" de esta norma.

Energía recuerda también que la normativa garantiza una rentabilidad razonable, definida como el resultado de las obligaciones del Estado a diez años en el mercado secundario más con un diferencial de 300 puntos básicos (en estos momentos alrededor de los 550 puntos básicos, un 5,5%), y que se establece revisiones periódicas para evitar tanto la "infra-retribución" como la "supra-retribución".

La excepción de Canarias

Entre otras medidas, la Comisión critica que se diferencie la regulación en los sistemas extrapeninsulares ya que, en su opinión, el fomento de las renovables debería seguir siendo homogénea. Sobre Canarias, Energía considera en el informe que "no parece conveniente el establecimiento de una retribución adicional aplicable a las instalaciones situadas en los sistemas no peninsulares".

A su juicio, el fomento de la generación a partir de fuentes de energía renovable, cogeneración de alta eficiencia y residuos "debería seguir siendo tratado de manera homogénea en todo el territorio nacional", ya que estas instalaciones "son tan ventajosas en la península como fuera de ella, dado que con ellas se reduce la dependencia energética y las emisiones de CO2 globales", al tiempo que se cumplen los objetivos comunitarios.

El nuevo sistema de retribuciones, único en la UE

En su informe, el regulador también destaca que el nuevo sistema de retribución a las renovables no tiene parecido con ninguno de los aplicados en la UE ni con los de "otros países de cuyos sistemas de apoyo se tiene conocimiento a través de asociaciones internacionales de organismos reguladores".

Además, como ya ha hecho en otros informes a normas incluidas en la reforma energética, el organismo critica la urgencia con el que se le ha planteado la propuesta, lo que no garantiza la participación efectiva de los distintos "agentes involucrados".

Esta circunstancia es aún más gravosa "cuando se solicita informe sobre una nueva metodología de retribución que afecta tanto a instalaciones nuevas como a existentes sin conocer el valor de los parámetros que dotarán de sentido económico dicha metodología".

También destaca que "la memoria que acompaña a la propuesta es muy escueta y no aporta justificación para gran parte de los cambios introducidos".

Las primas a las renovables: casi 6.000 millones hasta julio

Las primas a las energías renovables y de régimen especial rozan los 6.000 millones de euros (5.969,81 millones de euros) entre enero y julio de este año, según los datos publicados este lunes por la Comisión Nacional de la Energía (CNE). Estas energías vendieron en conjunto hasta julio un total de 67.546 GWh, siendo la eólica con 32.428 GWh la principal suministradora, seguida de la cogeneración (13.447 GWh).

Por su parte, en este periodo, la tecnología que recibió mayor cantidad en primas es la solar fotovoltaica con 1.949,9 millones de euros, seguida de la eólica, con 1.432,6 millones de euros, según los últimos publicados por la CNE. En su informe, la CNE indica que se han liquidado 63.940 instalaciones, lo que supone un incremento de 139 instalaciones sobre las liquidadas el mes anterior.