El juez Ruz ve motivos para juzgar al presidente de Damm por defraudar 72 millones a Hacienda
- Así como a su padre, Demetrio Carceller Coll; el abogado Ignacio Pretus
- Y a su "hombre de confianza", José Luis Serrano Flórez
- Utilizó un sistema de sociedades radicadas en paraísos fiscales
El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ha abierto la vía para juzgar al presidente de la cervecera Damm, Demetrio Carceller Arce, y tres colaboradores, entre ellos a su padre, por defraudar supuestamente 72,04 millones de euros a Hacienda y cometer un delito de blanqueo de capitales.
En un auto, en el que el magistrado transforma las actuaciones en procedimiento abreviado, da un plazo de veinte días a la Fiscalía y al resto de partes personadas para que formulen su escrito de acusación o soliciten el sobreseimiento.
Además de Demetrio Carceller, al que se atribuye desde los años noventa "una actividad dirigida a ocultar que su residencia efectiva y real radicaba en España", el juez dirige la acción penal contra su padre, Demetrio Carceller Coll; el abogado del despacho Petrus de Barcelona Gabriel Ignacio Pretus Labayen; y su "hombre de confianza", José Luis Serrano Flórez.
Por su parte, Damm ha precisado en un comunicado que la defensa de Carceller Arce considera el auto del juez como "extemporáneo por prematuro, ya que está aún pendiente la práctica pericial de la defensa, admitida por el propio magistrado". Por ello, el empresario impugnará este auto en el plazo previsto por la ley.
Estructuras fiduciarias radicadas en paraísos fiscales
Ruz señala que, a pesar de que su domicilio estaba en Madrid y Galapagar, el empresario llevó a cabo maniobras para "ocultar sus rentas y patrimonios a la Hacienda Pública española" mediante la utilización de estructuras fiduciarias radicadas en paraísos fiscales y la reinversión de las cuotas defraudadas en sociedades que también controlaba.
El juez cree que, mediante este sistema, Carceller podría haber defraudado entre los años 2001 y 2009 más de 72 millones de euros, 42.348.099 euros por el IRPF y 29.698.772 del Impuesto sobre el Patrimonio.
Excluyendo los ejercicios en los que el delito fiscal habría prescrito, el auto señala que se habrían defraudado las cuotas de IRPF entre los años 2003 y 2009, el Impuesto de Patrimonio de 2003 a 2007 y el Impuesto de Sucesiones del ejercicio 2006. En todo caso, estas cuantías superarían el límite de 120.000 euros a partir del cual el fraude se tipifica como delito y no como falta.
Simuló su residencia en Portugal y Reino Unido
El magistrado también detalla que el abogado Pretus Labayen se encargó de "articular todas las sociedades" utilizadas por el entramado societario y planificar la simulación de su residencia en Portugal y Reino Unido; Serrano Flórez le aportó la "información y documentación necesaria" para este fin; y Carceller Arce participó "activamente" en la gestión del patrimonio de su padre, especialmente en las inversiones que tiene en Arizona (Estados Unidos).
Entre las actividades de ocultación que habría realizado Carceller se encuentran la de la titularidad de "importantes paquetes accionariales" de la empresa Atlántica Petrogas y de las sociedades canarias Inarsa, Cursa, Syocsa y Amisa.
Además, la Agencia Tributaria denunció que su inversión en la sociedad Hidroeléctrica del Cantábrico se colocó detrás de una estructura societaria con entidades en Holanda (Halfrond BV), Las Antillas Holandesas (Arana NV) y Panamá (Financiera Intercontinental SA).
Finalmente, los inspectores de Hacienda trasladaron al juez que Carceller creó "un entramado societario extranjero" a través del cual se ocultó la titularidad real de Carceller de paquetes accionariales en siete sociedades agrarias del sur de España.