Rajoy pide ante la ONU que se ponga fin a la "colonización de Gibraltar"
- El presidente español ha mostrado su apoyo al acuerdo de Ginebra sobre Siria
- Ha pedido, además, que voten la entrada de España en el Consejo de Seguridad
- Asegura que España ha demostrado su compromiso con la paz y la mediación
El Presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, ha señalado que Gibraltar es el único conflicto colonial pendiente en Europa, y ha recordado que "este anacronismo sigue causando inconvenientes", durante su intervención en la 68 Asamblea General de la ONU, tal como avanzó este martes.
Rajoy ha denunciado la actitud del Reino Unido al negarse a dialogar en torno a la soberanía del Peñón y ha insistido en que España apoya la vía diplomática para resolver este conflicto, así como el contencioso del "Sáhara Occidental, una de las asignaturas pendientes de la comunidad internacional".
En su discurso, el dirigente ha pedido también a la Asamblea General de la ONU que, en la votación de 2014, elijan a España como candidata a entrar en el Consejo de Seguridad de la ONU en el bienio 2015-26.
Respecto a Siria, ha insistido en la necesidad de castigar el uso de armas químicas en Siria ya que, una vez confirmado por el informe de la ONU, considera que "de quedar impune, sería un fracaso para la comunidad internacional".
El presidente ha anunciado también el próximo lanzamiento, junto con Argelia, de la Estrategia del Agua en el Mediterráneo Occidental. A ello se une que España ha impulsado desde 2007 junto con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) un fondo para lograr la consecución de los Objetivos del Milenio de la ONU.
Precisamente, antes de su intervención en la Asamblea, Rajoy ha presidido un acto en Naciones Unidas en el que se han presentado los resultados del Fondo de Cooperación para el Agua y el Saneamiento, creado por España en 2008. Según ha explicado, el fondo ha contado con mil millones de dólares que han beneficiado a 20 millones de personas mediante 130 programas en 50 países.
Resolver el "anacronismo de Gibraltar"
Por segundo año consecutivo, tras su intervención de 2012, Rajoy se ha referido al conflicto del peñón ante la Asamblea General de la ONU. El motivo de su insistencia, según ha explicado, es que en 1963, la ONU incluyó a Gibraltar en la lista de territorios no autónomos pendientes de descolonización y desde entonces España ha hecho suya la doctrina legal de la Asamblea sobre la descolonización.
"Es el único pendiente en Europa, afectando aún a nuestra integridad territorial", ha recordado.
Ha aprovechado su discurso para pedir al Gobierno de Cameron que colabore en el diálogo, pero también para lanzar una crítica al Reino Unido, por desoir el mandato de la ONU y el compromiso contraído con España en la Declaración de Bruselas de 1984, en la que ambos países se comprometieron a dialogar de forma bilateral sobre la soberanía de Gibraltar.
Rajoy no ha hecho referencia a la actitud de las autoridades gibraltareñas, a pesar de haber asegurado este martes que "no se puede permitir un paraíso fiscal en plena Unión Europea", ni un territorio que "incumple, como todo el mundo sabe, las normas medioambientales más elementales", en referencia al lanzamiento de bloques de hormigón al mar .
Avales de España para el Consejo de Seguridad
Rajoy ha asegurado que España ha demostrado "no con palabras, sino con hechos", su compromiso con la paz y con el objetivo de lograr preservar la dignidad de la persona, por lo que, en su opinión, el país merece ocupar un asiento en su Consejo de Seguridad en el bienio 2015-2016.
Entre las razones que avalan a España, Rajoy ha destacado su total apuesta por el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, la resolución pacífica de los conflictos, la cooperación internacional para el desarrollo, y la promoción y el respeto de los derechos humanos.
Será en octubre de 2014 cuando se decidirá qué países se incorporan al Consejo de Seguridad para los años 2015 y 2016 como miembros no permanentes, y España, Turquía y Nueva Zelanda optan a dos de esos puestos.
A este respecto, Rajoy ha recordado que España es el sexto contribuyente a su presupuesto, y que 130.000 soldados españoles han participado en operaciones de la paz y misiones de ayuda humanitaria en todas las regiones del mundo desde 1989.
Ha subrayado que España "milita" en pro del "desarme, la no proliferación y control de armamentos y la prevención del terrorismo", y que la apuesta de España por la paz ha quedado patente este año durante la crisis de Mali debido a que tropas españolas han participado en las misiones internacionales allí desplegadas.
El presidente del Gobierno ha destacado la participación de España en la Comisión para la Consolidación de la Paz, así como el haber promovido la Alianza de Civilizaciones, como otras muestras de su apuesta por la convivencia.
"España ha participado activamente en la negociación del tratado de armas y en multitud de misiones de paz", ha asegurado Rajoy.
Rajoy ha agradecido el papel de organizaciones africanas en la crisis, y ha destacado también la voluntad de los países árabes por avanzar hacia la democracia y el progreso, tratando de dejar a un lado la violencia.
"El camino hacia la democracia no es fácil, pero no puede ni debe tener retorno", ha recalcado.
Ha resaltado igualmente que España es el octavo país donante del mundo en ayuda humanitaria, que ha sido de los primeros en ratificar el Protocolo Facultativo de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, y que seguirá apoyando la labor de ONU Mujeres.
"España sabe que nuestra defensa de la dignidad de la persona será más eficaz a través de las Naciones Unidas, al igual que esta Asamblea General de las Naciones Unidas sabe que, en ese empeño, puede contar con España", ha asegurado Rajoy.
Medidas sobre Siria y Oriente Medio
Sobre Siria, Rajoy ha pedido que el uso de gas sarín no quede impune, y ha apoyado el acuerdo alcanzado entre Rusia y EE.UU. en Ginebra.
"Todo el mundo está de acuerdo en ello, y es mucho lo que nos jugamos aquí", ha asegurado.
El presidente ha reiterado su confianza en la segunda cumbre de Ginebra, y ha garantizado el apoyo de España a una solución diplomática.
Con respecto al conflicto arabe-israelí, el dirigente español ha pedido a Israel y Palestina, así como a todos los países implicados, que redoblen sus esfuerzos para resolver el conflicto por el bien de la región y de la comunidad internacional.
Rajoy ha recordado que España cree en la mediación diplomática como vía de solución de los conflictos, como, por ejemplo, las tensiones en el Mediterráneo, "donde ya está dando sus frutos", ha asegurado.