Obama advierte de que si EE.UU. suspende pagos, "el mundo entero tendrá problemas"
- Vuelve a llamar la atención a las republicanos para aumentar el techo de deuda
- El plazo se cumple el 17 de octubre y están enfrentados por el cierre federal
- Obama achaca la parálisis política a la "obsesión" con la reforma sanitaria
- Un equipo de emergencias vuelve al trabajo por la tormenta 'Karen'
Barack Obama no va a dejar pasar un día sin acusar a los republicanos de sumir al país en la parálisis por forzar el cierre parcial del Gobierno, y sin advertir del peligro que supondría para la economía mundial que EE.UU. suspenda pagos el próximo 17 de septiembre si no hay acuerdo para subir el techo de deuda entre ambos partidos.
"Estados Unidos es el centro de la economía mundial y si lo echamos todo a perder, el mundo entero sufrirá consecuencias", ha alertado el presidente norteamericano en referencia a la próxima batalla entre republicanos y demócratas en la Cámara: aumentar el techo de deuda.
El Departamento del Tesoro ha divulgado este jueves un informe en el que se advierte de que no elevar el límite de deuda podría tener efectos "catastróficos" para Estados Unidos. Según el Tesoro, esa situación podría llevar a EE.UU. a una crisis económica "igual o peor" que la de 2008.
El mandatario estadounidense ha cancelado este jueves la totalidad de su gira por Asia debido a la crisis de la Administración, tan sólo unas días después de que anunciase que cancelaba parte del recorrido.
"Obsesión" con la reforma sanitaria
En el tercer día de cierre de la Administración -el primero en 17 años-, Obama ha acusado a los republicanos de destruir la economía del país por su "obsesión" por acabar con la ley de sanidad, y ha instado a sus líderes en el Congreso a aprobar un presupuesto "sin condiciones partidistas".
La paralización parcial de la Administración federal continúa este jueves después de que el día 1 de octubre comenzara el año fiscal 2014 sin que las cámaras lograsen un acuerdo presupuestario, lo que ha afectado a más de 800.000 empleados federales que se han quedado sin empleo ni sueldo de forma temporal. Además de la suspensión laboral de cientos de miles de trabajadores, la paralización afecta a parques nacionales, museos e incluso a empresas contratistas del Gobierno.
Alerta ante la llegada de una tormenta
Solo volverán al trabajo, según ha anunciado la Casa Blanca, los empleados de la Agencia para la Gestión de Emergencias de EE.UU. (FEMA) ante la cercanía de la tormenta "Karen", que puede convertirse en huracán frente a Nueva Orleans.
FEMA ha activado su equipo encargado de los preparativos para huracanes, que trabaja en coordinación con el Centro Nacional de Huracanes (CNH), con sede en Miami para estar prevenido ante cualquier impacto" en EE.UU. de "Karen", que se ha fortalecido las últimas horas con vientos de 110 kilómetros por hora cerca de las costas del sureste de México.
Los republicanos se enrocan
Mientras tanto, nada más acabar su discurso ante los trabajadores de una pequeña empresa de construcción en la localidad de Rockville (Maryland), al norte de Washington, la oposición republicana ha respondido manteniendo su exigencia de retrasar la ley de sanidad, y ha pedido trabajar conjuntamente para "salir de este lío".
Obama ha insistido en que el fin de esa paralización solo depende de que el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, someta a voto el proyecto de ley para aprobar un presupuesto temporal sin disposiciones adicionales.
"Ustedes eligieron a sus representantes para que les hagan la vida más sencilla, no más dura", ha argumentado el presidente ante los trabajadores de la construcción.
Tras semanas de intentar evitar el cierre administrativo, Obama ha acusado al presidente la cámara baja de no llevar la ley ante los legisladores "por miedo al ala más extremista" de su partido.
Obama dice que no negociará bajo "chantaje"
Liderados por el senador republicano por Texas Ted Cruz, próximo al Tea Party, los republicanos rechazan cualquier texto legislativo del presupuesto del nuevo año fiscal a menos que se incluya una enmienda que revoque o paralice la aplicación de la ley sanitaria.
El senador republicano por Kentucky Mitch McConnell ha acusado, en cambio, a los demócratas de ser ellos quienes no quieren alcanzar un acuerdo con sus colegas conservadores, y ha argumentado que la concesión de retrasar un año algunas de las disposiciones de la reforma sanitaria es "razonable".
El presidente estadounidense, sin embargo, ha advertido de que en ningún momento estará dispuesto a negociar para aprobar una ley "rutinaria" a cambio de concesiones políticas, lo que ha llegado a considerar un "chantaje" por parte de los republicanos.