La 58 Seminci proyecta la historia de la primera poetisa de etnia gitana
- "Papusza", del matrimonio Krauze, proyectada hoy a concurso
- También se presenta a concurso 'Una familia de Tokio' deYôji Yamata
La historia de Bronislawa Wajs, la primera poetisa de etnia gitana que publicó su obra en Polonia, ha sido trasladada a la gran pantalla por los realizadores Krzysztof Krauze y Joanna Kos-Krauze en Papusza, proyectada hoy a concurso dentro de la 58 Seminci.
Ambos han construido la biografía de una mujer que, por aprender a leer y a escribir, desafió a su familia y, más tarde, fue acusada de traidora por parte de la comunidad gitana, al desvelar en sus poemas interioridades y claves de la misma.
Los directores, matrimonio profesional y también en la vida real, han vuelto a contar con la actriz Jowita Budnik, que da vida a Papusza y para la que ha supuesto "todo un reto" encarnar a un personaje prácticamente olvidado en su país, ha explicado en una rueda de prensa posterior a la proyección.
La película ha sido rodada en la lengua romaní del pueblo gitano, algo en lo que la protagonista encontró mucha dificultad, ya que es un idioma "escondido" y "no hay profesores ni materiales" que permitan aprenderla, ha lamentado.
"Papusza es un personaje olvidado", ha manifestado la actriz, quien ha asegurado que en los últimos tiempos personas más jóvenes de la etnia gitana en Polonia comienzan a tener en cuenta su trabajo, aunque sigue habiendo personas mayores que la rechazan.
Una familia de Tokio
Ha competido también en esta jornada el veterano japonés Yôji Yamata con Tokio Kazoku (Una familia de Tokio), un particular homenaje al director Yasujiro Ozu, al que dedica la cinta.
Basada en "Cuentos de Tokio", de Ozu, Yamata cuenta la historia de un matrimonio de ancianos que acude a Tokio para visitar a sus tres hijos, cuyas vidas están demasiado ocupadas.
El director de títulos como El ocaso del samurai (2002) y Love and honor (2006) ha elaborado un conmovedor relato familiar en el que no falta el humor.
Guimaraes retratada por cuatro directores
Fuera de concurso se ha proyectado Centro histórico, un largometraje integrado por cuatro episodios que han firmado el finés Akis Kaurismaki, el español Víctor Erice y los portugueses Pedro Costa y Manoel de Oliveira.
Todos ellos fueron convocados por la ciudad portuguesa de Guimaraes, con motivo de su condición de Capital Cultural Europea en 2012, para reflexionar sobre la memoria, actualidad y porvenir de esta histórica urbe, cuna del primer rey de Portugal y de la nación vecina.
Mientras Erice ha recurrido al documental, el resto de los realizadores han optado por la ficción para transmitir sus sensaciones sobre Guimaraes, un dependiente que mira la vida pasar desde su mostrador (El Tabernero), en el caso de Aki Kaurismaki.
En Dulce exorcista, Pedro Costa ha filmado un viaje en ascensor donde coinciden dos viajeros: un emigrante de Cabo Verde y un soldado portugués, para reflejar el pasado colonial del país, mientras que el decano De Oliveira relata la peripecia de un turista atrapado por el peso del pasado (El conquistador conquistado).