Un centenar de subsaharianos entran en Melilla tras saltar la valla fronteriza
- El asalto se ha producido de madrugada en la zona de Tres Forcas
- Un inmigrante ha muerto, según las autoridades marroquíes
- La zona de la valla por donde han saltado no está coronada con cuchillas
Un centenar de inmigrantes de origen subsahariano han conseguido este martes acceder a Melilla en un salto masivo al vallado fronterizo. Según han informado a Efe fuentes policiales, el asalto se ha producido sobre las 05.00 horas en la zona conocida como Tres Forcas, en la parte norte del perímetro.
La avalancha ha estado protagonizada por entre 150 y 200 inmigrantes, según las fuentes, y se ha registrado en un lugar que se localiza en los Pinares de Rostrogordo, cerca de la pista de seguridad colindante con la rotonda que conecta el acceso a los Pinos con la carretera de Circunvalación. Una vez han conseguido acceder a territorio español, los subsaharianos se han dispersado en varios grupos hacia distintas zonas del interior de la ciudad.
La parte del vallado por la que han entrado los inmigrantes no cuenta con las nuevas medidas de seguridad que se están instalando en el perímetro, como son la malla "antitrepa", para evitar que los subsaharianos puedan meter los dedos en la almbrada y por tanto escalar y tampoco tienen las concertinas o alambres que acaban con cuchillas en lo más alto de la valla.
La portavoz gubernamental ha asegurado que en el salto de este martes "no ha habido heridos ni entre los guardias civiles ni entre los inmigrantes que han logrado acceder a Melilla".
Un inmigrante muerto en territorio marroquí
Según han informado este martes las autoridades de Nador, al norte de Marruecos y muy próxima a Melilla, un inmigrante murió y otros cuatro resultaron levemente heridos en el lado marroquí esta madrugada, en el último intento masivo de la valla fronteriza entre Melilla y Marruecos.
La víctima falleció al caer "accidentalmente" desde lo alto de la valla durante el salto, según las mismas fuentes, citadas por la agencia oficial MAP.
Además, 40 personas fueron detenidas, que se suman al centenar de emigrantes arrestados en los últimos días en redadas policiales diarias, concretamente en la zona del Estrecho, en lo que parece un recrudecimiento de las operaciones contra la emigración clandestina.
Grupos de emigrantes, esencialmente subsaharianos, esperan en las inmediaciones de Tánger el momento propicio para alcanzar en pateras las costas de España, situadas a unos 15 kilómetros, además de los que tratan de acceder al territorio español por tierra, saltando los muros fronterizos de Ceuta y Melilla.
Una valla objeto de polémica
Precisamente las nuevas medidas de seguridad que dificultan la escalada ya que la valla está coronada con cuchillas han sido objeto de polémica en los últimos días. La concertina vuelve después de que fuera retirada a finales de 2007, una recolocación que está siendo ahora tan aplaudida y criticada como lo fue entonces.
La eliminación de este elemento, que provocó decenas de inmigrantes heridos durante las avalanchas de 2005, fue posible gracias a la ausencia precisamente de asaltos masivos durante dos años.
Sin embargo, el aumento de la presión migratoria y la ineficacia de la sirga tridimensional, la tercera valla instalada tras las avalanchas, ha obligado a tomar nuevas medidas para evitar las entradas constantes que se vienen registrando desde hace casi dos años.
De momento, la malla "antitrepa" y la concertina solamente se van a instalar en unas zonas concretas, en unos tres kilómetros de los casi doce que componen todo el perímetro de Melilla, unos puntos considerados "calientes" por ser los más frecuentes para los asaltos de inmigrantes y que, por motivos de seguridad, no se han revelado.
Unas horas más tarde, el secretario de Estado de Seguridad, Javier Martínez, ha defendido el uso la concertina en la valla de Melilla que se ha vuelto a incorporar la concertina dentro "una serie de reformas" en la valla. "En otros países, los perímetros fronterizos siempre están dotados de medidas de seguridad de esta naturaleza", ha añadido Martínez.
Fuentes policiales han explicado a Efe que la concertina es un elemento de seguridad más, que está presente en toda la valla de Ceuta, en los perímetros de seguridad de las cárceles, en los muros de centrales eléctricas e incluso en fincas y domicilios particulares.
La concertina no se sitúa a ras del suelo, sino a una altura de entre seis y siete metros, por lo que, a priori, pretende ser un elemento disuasorio, pero que, en definitiva, es también un sistema de contención que puede provocar heridas a quien intente superarlo.
Las ONG y algunos partidos han dado la voz de alarma, ya que consideran que este sistema, que se usa en numerosas fronteras del mundo, supone una vulneración de los derechos humanos y que implica un paso atrás su reinstalación tras ser retirada.
El último asalto masivo a la valla de Melilla se produjo en septiembre, cuando un grupo de 200 inmigrantes lograron entrar en la ciudad autónoma.