El empleado que abrió el portón del Madrid Arena dice que no se percató del exceso de aforo

• Afirma que no tuvo la sensación de que entraran 2.500 jóvenes sin control
• El empleado de Seguriber dice que la instrucción directa partió de su jefe

Escenario de la fiesta de Haloween del Madrid Arena.

El empleado de Seguriber Segundo H.P., que abrió el portón de emergencias del Madrid Arena durante la fiesta de Halloween en la que fallecieron cinco chicas por una avalancha humana, ha declarado ante el juez Palop que no tuvo la sensación de que 2.500 jóvenes entraran sin control a la pista central en poco menos de veinte minutos.

Un extremo que sí confirman las imágenes captadas por las cámaras de seguridad.

Este trabajador de Seguriber es uno de los últimos imputados en la causa y su declaración es clave para conocer quién dio la orden de apertura de esa puerta de emergencia, que provocó que cientos de jóvenes entraran sin control a la pista cuando comenzó la actuación de Steve Aoki.

Señala a su jefe como autor de la orden

Durante su interrogatorio se le ha mostrado imágenes de la cámara para que identificara a las personas que supuestamente ordenaron abrir la puerta. Ha declarado que la instrucción directa partió de su jefe, José Antonio Díaz Romero, jefe de equipo de esta empresa y que también está imputado en la causa.

La declaración ante el juez que instruye el caso, Eduardo Palop, comenzó con el visionado de una serie de imágenes en las que iba identificando a los empleados de Seguriber, lo que no ha hecho con los miembros de la organización alegando que no recordaba quiénes eran.

El trabajador ha apuntado que tampoco recuerda haber visto pasar las urnas con las entradas por delante de él con destino al pabellón satélite y que, desde su puesto, que era "estático", solo podía ver un borde de la pista central, pero no podía saber si había mucha gente.