La reforma fiscal del PSOE propone que parados y rentas más bajas no paguen IRPF
- Los trabajadores con hijos y rentas inferiores a 16.000 euros no pagarían
- Propone subir el suelo mínimo impositivo a grandes empresas del 8 al 15%
- Según el PSOE, permitiría aumentar los ingresos en 10.000 millones cada año
La propuesta de reforma fiscal que el PSOE va a incorporar a su proyecto político propone que parados y a trabajadores que tengan hijos a su cargo, con rentas inferiores a 16.000 euros, no paguen el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
En concreto, la propuesta dada a conocer en el marco de su conferencia política, habla de un "rescate fiscal" que beneficiaría a cinco millones de contribuyentes, inluidos los desempleados y que protegería también a pensionistas con inmenores ingresos y a trabajadores con rentas más bajas para que "aumenten su renta disponible", según señala el documento.
El PSOE defiende que con sus propuestas de reforma el Estado podría ver incrementados sus ingresos en 10.000 millones de euros cada año, por vía recaudatoria, haciendo que "paguen más los que más ingresos, rentas y patrimonio tengan".
Revisión de deducciones a grandes empresas
En la actualidad los contribuyentes no tienen que pagar IRPF cuando su renta es inferior a 5.000 euros. El PSOE propone ampliar ese margen de exención hasta los 16.000 euros anuales.
Para las rentas más altas, la propuesta incluye una revisión de las deducciones, en especial las del Impuesto de Sociedades, del que se benefician las grandes empresas para las que el suelo mínimo impositivo, según esta propuesta, se vería ampliado del 8% actual hasta el 15%.
En este sentido, la reforma fiscal que plantean los socialistas contempla que las rentas de capital tengan el mismo tratamiento que las rentas del trabajo y que se paguen impuestos por todos los ingresos. Propone acabar con el sistema de módulos de los profesionales por cuenta propia.
Un impuesto que grave la renta y la riqueza
Los contribuyentes pagarían impuestos teniendo en cuenta no solo sus ingresos sino también su renta y su patrimonio mediante la creación de un único impuesto que grave la renta y la riqueza.
Sobre el patrimonio, explica el documento, se aplicaría un porcentaje de rentabilidad anual. Actualmente el mínimo exento son 700.000 euros.
Una medida de "justicia social" para ayudar a "los más castigados por la crisis", así considera el PSOE la exención fiscal a las rentas más bajas en su documento, que plantea estas medidas para la "eficiencia económica para estimular el consumo y la actividad económica, que son la base para poder crear empleo".