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Fracasa la moción de censura de la oposición contra el Gobierno griego

  • El Gobierno de Samarás ha derrotado la iniciativa de la izquierda griega
  • Tenía el apoyo de Comunistas, 'Griegos Independientes´ y 'Amanecer Dorado´
  • El país se encuentra inmerso en nuevas negociaciones con la troika

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Fracasa la moción de censura de la oposición contra el Gobierno griego

La moción de censura contra el Gobierno de Grecia, dirigido por el conservador Andonis Samarás, no ha logrado recabar los apoyos suficientes en la votación que esta noche ha tenido lugar en el Parlamento.

La iniciativa había sido impulsada por el principal partido de la oposición, el izquierdista Syriza, y contaba con el apoyo de los grupos parlamentarios del Partido Comunista, Griegos Independientes (derecha nacionalista) y Amanecer Dorado (neonazi).

Sin embargo, la moción sólo ha recibido el voto afirmativo de 124 diputados de los 300 del Parlamento, frente a 153 que votaron en contra y 17 que se han abstenido.

Negociaciones con la troika

Este resultado supone una victoria para la coalición bipartita entre los conservadores de Nueva Democracia y los socialdemócratas de Pasok que gobierna Grecia, en un momento en que el Ejecutivo negocia con los representantes de la troika los nuevos ajustes a cambio de un nuevo tramo del rescate financiero.

La diputada Theodora Tzakri ha sido excluida del grupo parlamentario del Pasok por haber votado a favor de la moción de censura.

Un diputado de Syriza no ha podido votar por encontrarse hospitalizado mientras que tres parlamentarios neonazis no pudieron hacerlo por hallarse en prisión preventiva.

Pocas posibilidades de prosperar

La moción de censura fue presentada el jueves a raíz del desalojo de la sede principal de la ERT, la televisión pública griega, ocupada por sus extrabajadores desde hace cinco meses, aunque también se dirigía contra la política económica seguida por el Gobierno.

El portavoz del grupo parlamentario de Syriza, Nikos Vutsis, ha justificado la presentación de la moción de censura -a pesar de las pocas posibilidades que tenía de prosperar- en la necesidad de que todos los partidos "asuman sus responsabilidades".

"Si están dispuestos a votar otra vez a favor de la política de los dos millones de desempleados, del cierre de ERT y de la crisis humanitaria, que lo hagan", ha afirmado.

"El Gobierno ha fracasado en todo"

A lo largo de los tres días previos a la votación, representantes de los diferentes partidos políticos presentes en el Parlamento y de todos los ministerios se dirigieron a la cámara en un debate bronco con cruces de acusaciones continuas.

"Introdujimos la moción de censura porque el Gobierno ha fracasado en todo", denunció el líder de Syriza, Alexis Tsipras, en su discurso parlamentario.

El jefe de la oposición acusó al Gobierno de no haber sido capaz de cumplir sus promesas electorales ni de frenar la destrucción económica ni de presentar propuestas alternativas a los recortes exigidos por los acreedores internacionales.

"Habéis perdido todo sentido de la medida y de la seriedad. (...) Habéis fracasado en vuestro intento de derribar el Gobierno mediante huelgas e intentáis derribarlo en el Parlamento, y todo eso en un periodo en que por primera vez Grecia es considerada un factor de estabilidad en la región", respondió el primer ministro Samarás.

Samarás: "El Gobierno no caerá"

El jefe del Ejecutivo garantizó que "el Gobierno no caerá" y aseguró que la coalición bipartita aguantará unida toda la legislatura: "Las elecciones serán en 2016".

"La moción de censura es una muestra del callejón sin salida en que se encuentra la política de Syriza. Es un acto extremista desde el punto de vista institucional, y nacionalmente irresponsable", ha arremetido el ministro de Exteriores y viceprimer ministro, el socialdemócrata Evangelos Venizelos.

El líder socialdemócrata ha criticado a Syriza que "en un periodo que es necesaria la colaboración de las fuerzas democráticas", Syriza se coaligue con formaciones como Griegos Independientes, el Partido Comunista y Amanecer Dorado.

Un momento crítico

La principal queja de los diputados oficialistas es que esta moción se haya presentado en un momento en que Grecia se encuentra inmersa en negociaciones con la troika, lo que podía debilitar su posición de cara a los acreedores internacionales.

De hecho, este domingo los representantes de la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) se han reunido con el ministro de Finanzas, Yannis Sturnaras para tratar el espinoso asunto de la brecha fiscal de cara al año que viene.

El Gobierno griego ha reconocido que durante 2014 habrá un déficit de financiación de entre 500 y 700 millones de euros, mientras que los acreedores internacionales lo elevan a entre 2.000 y 2.500 millones.

Además, el Ejecutivo de Samarás se niega a aprobar nuevas medidas que supongan recortes de salarios o pensiones, por lo que hoy no se pudo llegar a ningún acuerdo y se pospusieron las negociaciones para el próximo martes.

De una evaluación satisfactoria por parte de la troika depende el desembolso del siguiente tramo del rescate financiero, por un valor de 1.000 millones de euros.

Parece difícil que la sociedad griega, tras seis años de recesión, acepte nuevas medidas de austeridad y de hecho el domingo varios miles de personas respondieron a la llamada de Syriza y se manifestaron frente al Parlamento en contra de las políticas del Gobierno y en apoyo de la moción de censura.

Los manifestantes portaban pancartas en las que se leía "Marchaos ahora" y "Abajo la Junta", y los más jóvenes coreaban "Lucha, ruptura y derribo" del Gobierno.