Fallece el exgeneral Alfonso Armada a los 93 años, condenado por el golpe de Estado del 23-F

• Fue indultado el 23 de diciembre de 1988 por motivos de salud
• Ha fallecido tras un paro cardíaco después de varias semanas ingresado

El exgeneral Alfonso Armada, condenado por el 23-F, muere a los 93 años de edad

El exgeneral Alfonso Armada, condenado por su implicación en el golpe de Estado del 23 de febrero de 1981, ha fallecido en Madrid a los 93 años tras un paro cardíaco después de varias semanas ingresado, según ha confirmado a EFE su familia.

Alfonso Armada fue uno de los principales protagonistas del suceso de mayor impacto político en la transición española en la democracia, por el que fue condenado a 30 años de cárcel.

En la tarde del 23 de febrero de 1981, el teniente  coronel de la Guardia Civil Antonio Tejero Molina irrumpió al frente de  200 guardias civiles en el hemiciclo del Congreso, donde se procedía a  la investidura de Leopoldo Calvo Sotelo, al grito de: ¡Quieto todo el  mundo! ¡Al suelo, todo el mundo!

Por su parte, en el 30 aniversario del 23-F, el exgeneral de División aseguró a los medios de comunicación que "no sabía" en 1981 ni luego tampoco "nada" de la intentona golpista. Además, aseguró que no hacía juicios de lo que le hicieron, sino de su actuación ese día: "informé, obedecí y resolví".

“Informé, obedecí y resolví“

En ese sentido, negaba que fuera el 'elefante blanco' que esperaban los golpistas, capitaneados por el teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Tejero, y que tuvieron secuestrados a los diputados en el Congreso de los Diputados.

"No sabía nada de la organización del golpe"

Asimismo, Armada siempre sostuvo que no conocía los entresijos del golpe, al que calificaba como una "chapuza". "Sabía que había un gran malestar, que podía producirse una acción violenta, pero yo no sabía ni sé todavía nada de la organización del golpe", reconocía en una entrevista en Onda Cero en 2011. 

En esta entrevista, aseguró que el 23-F siempre actuó de acuerdo a las órdenes del teniente general José Gabeíras, al que reconocía como su "jefe".

"Hablé con Tejero, le pedí que dejase libres a los diputados y él no accedió. Había fracasado en mi misión pero, a la mañana siguiente,  le volví a llamar y había reconsiderado la situación, bien porque no recibía las ayudas que él pensaba, bien porque le convencieron", explicó el propio Armada.

“Hablé con Tejero, le pedí que dejase libres a los diputados y él no accedió“

El 11 de marzo de 1981 fue procesado bajo la acusación de rebelión militar y el 3 de junio de 1982 el Consejo Supremo de Justicia Militar le condenó a seis años.

Según los planes de los golpistas, Armada era la persona en la que  recaería la presidencia del Gobierno en caso de que hubiera triunfado el  golpe. Sin embargo, el ex militar siempre negó su participación en los  hechos.

Condena de 30 años y pérdida de empleo

Tras recurrir el Gobierno ante el Tribunal Supremo, el 22 de abril de 1983, el alto tribunal le impuso una condena de 30 años y pérdida de empleo, pena que fue rebajada a 26 años, ocho meses y un día a finales de 1987 por el Consejo Supremo de Justicia Militar, una vez que el ex general formulara una petición de indulto.

Alfonso Armada, que solicitó el perdón en cinco ocasiones, fue indultado por el Consejo de Ministros del 23 de diciembre de 1988, por razones de salud y por haber acatado la Constitución, después de cumplir los seis años de condena. Esta fue la primera medida de gracia concedida a uno de los golpistas condenados por su participación en el 23-F.

En esos años, Armada tuvo que ser intervenido quirúrgicamente de una hernia abdominal, sufrió una embolia cerebral y le fue detectada una cardiopatía.

Desde su salida de la cárcel, repartió su vida entre Madrid y la finca que poseía en Santa Cruz de Rivadulla, a pocos kilómetros de Santiago de Compostela.

El exgeneral será enterrado el martes en el cementerio de San Isidro de Madrid.