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Cinco muertos en Tailandia, donde la policía protege a la primera ministra del asedio opositor

  • Los "camisas amarillas" han tomado ya varios edificios gubernamentales
  • Han asediado, además, un medio de comunicación y la sede de Gobierno

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En Tailandia se intensifican las protestas contra el gobierno

La Policía de Tailandia ha tenido que escoltar a la primera ministra Yingluck Shinawatra a su salida de la sede del Gobierno en Bangkok, ante el asedio de los manifestantes antigubernamentales, y la han llevado a una ubicación desconocida. Los violentos choques que vive el país dejan ya al menos cinco muertos.

Los antidisturbios han utilizado gases lacrimógenos y cañones de agua contra los opositores, que, además, han tomado varios edificios públicos, entre ellos el Ministerio del Interior y el canal de televisión Thai PBS.

Los manifestantes tratan de ocupar la sede del Ejecutivo, protegida con bloques de hormigón y millares de policías y soldados. El subcomisario general de la Policía, Veerapong Chiewpreecha, ha indicado a la televisión estatal que los incidentes, en los que se produjeron tiroteos, ocurrieron anoche y esta madrugada en torno a la Universidad de Ramjamhaeng y al estadio Rajamangala.

La Policía tardó horas en restaurar el orden en al área en la que están la universidad y el estadio y donde universitarios antigubernamentales atacaron ayer a un taxi y a un autobús con "camisas rojas".

Violentos enfrentamientos

Según las autoridades, los detractores del Gobierno lanzaron explosivos caseros contra el cordón policial, informa el diario Bangkok Post. Los agentes también utilizaron gases en torno a la comisaría de la Policía Metropolitana, situada en las inmediaciones.

Los manifestantes, que cuentan con el apoyo del opositor Partido Demócrata, también ocuparon el Ministerio del Interior, el canal de televisión pública Thai TBS y se concentraron en torno a las oficinas de la Policía Nacional.

Varios centros comerciales, incluidos Siam Center y Siam Discovery, se encuentran cerrados debido a las protestas.

El Ejército rechaza un golpe de Estado

El jefe del Ejército, Prayuth Chan-ocha, ha reiterado que no provocará un golpe de Estado militar, a pesar de los llamamientos de los manifestantes para que intervenga.

Por su parte, los "camisas rojas", leales a la primera ministra, pusieron fin esta mañana a la movilización en el estadio Rajamangala, después de que uno de sus líderes, Jatuporn Promphan, anunciara que cuatro "camisas rojas" habían muerto, además de un estudiante, en los enfrentamientos de anoche en Bangkok.

"Hemos decidido regresar a casa para evitar que se complique más la situación para el Gobierno", dijo otro de los cabecillas de los "camisas rojas", Thida Thavornseth, en Rajamangala, con capacidad para unas 49.000 personas, según el Bangkok Post.

Las autoridades no han confirmado de momento las cuatro víctimas mortales de los "camisas rojas", solo dos muertos y numerosos heridos en los enfrentamientos que tuvieron lugar en los alrededores del estadio Rajamangala en la capital.

Uno de los muertos es un estudiante antigubernamental de 21 años, que perdió la vida a causa de un disparo que le perforó un pulmón, según fuentes sanitarias citadas por la prensa.

La otra víctima mortal,  según la Policía, es un soldado de 23 años, simpatizante de los "camisas rojas", que murió cerca del estadio Rajamangala de un balazo en la cabeza.

Protestas desde octubre

Las manifestaciones para derribar el Gobierno de Yingluck Shinawata arrancaron en octubre y cobraron fuerza a finales de noviembre con la ocupación de ministerios para paralizar la administración, pero hasta el sábado habían transcurrido en general sin violencia, salvo actos aislados.

Las protestas antigubernamentales son las mismas que crearon las condiciones para el golpe militar incruento de 2006 que derrocó al Gobierno de Thaksin Shinawatra, quien vive en el exilio para evitar una condena a dos años de cárcel por corrupción.

Los "camisas rojas" protagonizaron la ocupación del centro comercial de Bangkok entre marzo y mayo de 2010 para derribar el Gobierno del Partido Demócrata, ahora en la oposición, y que se saldó con 92 muertos y más de 1.800 heridos. El líder de la actual movilización antigubernamental, Suthep Thaugsuban, era viceprimer ministro en 2010.