El Constitucional italiano tumba dos puntos claves de la ley electoral
- El tribunal anula las listas cerradas y el premio de mayoría a la lista más votada
- El actual Gobierno se comprometió a reformar la controvertida ley electoral
El Tribunal Constitucional italiano ha decretado la inconstitucionalidad de dos de los principales puntos que contiene la actual ley electoral de Italia, en concreto los del premio de mayoría de escaños en el Parlamento para la coalición más votada, así como la presencia de listas cerradas.
El alto tribunal ha fallado este miércoles a favor del recurso presentado en 2009 a título particular por el abogado Aldo Bozzi y otros 27 firmantes contra estas dos cuestiones de la ley electoral de 2005, aprobada por el Gobierno de Silvio Berlusconi y conocida en Italia como porcellum, por la "porcata" ("guarrada") que su propio promotor consideró que era.
La ley que promovió el ministro Roberto Calderoli, de la Liga Norte, atribuye un premio de mayoría de 340 escaños (de 630 totales) en la Cámara de los Diputados (baja) directamente a la coalición que más votos haya obtenido. También otorga un premio de mayoría del 55% de los escaños pertenecientes a cada región para el Senado. Ambos puntos han sido declarados ahora inconstitucionales.
El alto tribunal declara atiende además la demanda según la cual las listas cerradas van contra el derecho de voto del ciudadano para decidir sobre los candidatos de su lista preferida.
Ahora, el Constitucional emplaza a la publicación de las motivaciones de su decisión en las próximas semanas para que ésta tenga "efectos jurídicos" y recuerda que corresponde al Parlamento aprobar nuevas leyes, informa Efe.
Críticas de Berlusconi
Con todo, el fallo no afecta al resultado de las elecciones del pasado febrero, de las que salió la actual composición parlamentaria, que ha llevado a la necesidad de una coalición de distintos signos políticos para lograr el Gobierno de Enrico Letta.
Esta decisión llega cuando algunos altos cargos del Estado están pidiendo una mayor celeridad a los parlamentarios para que aprueben la nueva ley electoral, uno de los puntos de acuerdo mayoritario entre el centroizquierda y el centroderecha.
Las cuestiones invalidadas ahora son dos de las principales diferencias que esta ley contenía con respecto a la anterior, de 1993. La decisión del Constitucional sorprendió a Berlusconi en un acto público en Roma, donde dijo que el alto tribunal "es un organismo político de la izquierda".
El premio de mayoría en el Senado por regiones ha favorecido en las últimas convocatorias a las formaciones que vencían en las muy pobladas zonas del norte de Italia, tradicionalmente feudo de los conservadores. Así, en los últimos comicios, el centroizquierda ha tenido mayoría absoluta en la Cámara baja, pero no en la alta.
Italia es un país que acusa una especial inestabilidad de los Gobiernos a pesar de los diversos sistemas electorales puestos en marcha en su historia reciente.