Lagarde: "La banca española es sólida y sana", aunque aún debe pasar los exámenes del BCE
- En su tercera evaluación al rescate bancario, el FMI avisó de la sequía de crédito
- La directora del Fondo señala que empiezan a dar resultados los sacrificios
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, ha señalado este jueves en Seúl que "el sistema bancario español es sólido y sano" y que comienzan a verse los resultados de los esfuerzos y sacrificios económicos. La máxima representante del FMI -un organismo que publicó recientemente su tercera evaluación del proceso de reestructuración del sistema bancario de España- ha advertido, sin embargo, que las entidades financieras españolas todavía deben "someterse a la revisión de la calidad de activos y a la prueba de estrés decidida por Europa".
En su informe sobre la revisión realizada entre septiembre y octubre al cumplimiento del programa de rescate de la banca española, el Fondo destaca que la estabilización de la economía española aún afronta notables riesgos por la dificultad de acceso al crédito de hogares y pymes. La cuarta y última evaluación de la asistencia financiera a España se realiza en estas semanas y el FMI publicará sus conclusiones definitivas como asesor técnico del proceso en febrero.
En una rueda de prensa realizada durante su visita a Corea del Sur, Lagarde ha indicado que las autoridades españolas "han hecho un buen trabajo a la hora de recapitalizar, reestructurar y erradicar todo lo necesario" para sanear el sistema financiero del país.
El Banco Central Europeo (BCE) empezó el mes pasado un examen a 128 grandes bancos europeos, de los que 16 son españoles. Esas pruebas de solvencia y resistencia concluirán en octubre de 2014, como paso previo a que el BCE asuma sus funciones de supervisión de esas entidades.
"Creemos que reforzar el sector financiero y el sector bancario de todos los países europeos es crucial para fortalecer la confianza en las economías de Europa", ha afirmado Lagarde.
La exministra francesa ha mencionado a España, Portugal e Irlanda como países que han atravesado duros problemas y que "ahora están empezando a ver el resultado de sus esfuerzos y sacrificios económicos".
En los países más afectados por la crisis europea "las exportaciones están creciendo y, en cuanto al empleo, todavía no se ha estabilizado, pero sí se han comenzado a crear puestos de trabajo", ha aseverado. En España, aún no se ha producido creación neta de empleo, aunque los datos sugieren que se ha ralentizado la destrucción de empleo.