El papa Francisco crea una comisión para la lucha contra la pederastia en la Iglesia
- El objetivo es proteger a los niños y mejorar la atención a las víctimas de abusos
- En julio el papa ya aprobó una reforma histórica que reformó el código penal
El papa Francisco ha instituido un comisión para prevenir los casos de pederastia en la Iglesia, según ha informado el cardenal de Boston Sean Patrick O'Malley, miembro del consejo de ocho cardenales asesores, conocido como 'G-8 vaticano', en rueda de prensa.
El objetivo es reforzar el empeño de la Santa Sede en la protección de los niños y la atención pastoral a las víctimas de los abusos. Esta Comisión se encargará de informar sobre el estado actual de los programas para la protección de la infancia; formular sugerencias para nuevas iniciativas por parte de la Curia en colaboración con los obispos, las conferencias episcopales y las conferencias de superiores religiosos; y proponer nombres para la implementación de las propuestas, incluyendo a laicos, religiosos, religiosas y sacerdotes con experiencia en la seguridad de la infancia, en el trato con las víctimas y en aplicación de las leyes.
Además, colaborará en la elaboración de una prueba de aptitud para el ministerio sacerdotal, y podría establecer medidas como la detección de antecedentes penales, evaluaciones psiquiátricas y aumentar la colaboración con las autoridades civiles para denunciar delitos.
En cualquier caso, la composición y competencias de la Comisión serán especificadas próximamente "con mayor detalle" a través de un documento que publicará el papa Francisco, según ha explicado el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el padre Federico Lombardi.
Esta propuesta, ha añadido, está "en línea con las decisiones" que tomó el papa emérito Benedicto XVI para proteger a los menores dentro de la Iglesia.
Reforma histórica
El papa Francisco aprobó el pasado julio una reforma del código penal de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano que ampliaba y definía los delitos contra menores, entre ellos la pornografía infantil y el abuso sexual.
Así, introdujo los delitos relacionados con la venta, prostitución, reclutamiento y violencia sexual, pornografía infantil, tenencia de material de pornografía infantil y abusos sexuales contra menores. Y la legislación, aprobada a través de un motu proprio (decreto papal), se aplica a los nuncios (embajadores) y personal diplomática del Vaticano en todo el mundo.
La reforma era histórica, ya que el ordenamiento jurídico vaticano provenía aún, en buena medida, del Código Zanardelli, incluido en 1929 dentro del Pacto de Letrán entre Italia y el papado, que estableció la Ciudad del Vaticano.
Los casos de abusos a menores han minado gravemente la imagen de la Iglesia católica en los útlimos años. Han sido especialemtne importantes en Estados Unidos, Irlanda, Alemania y otros países. También han salpicado al fundador de la orden de los Legionarios de Cristo.