El rey de Tailandia llama a la unidad de sus súbditos tras las protestas por "el bien del país"
- Lo ha hecho durante el discurso de celebración de su cumpleaños
- La inestabilidad política ha reavivado el debate sobre el rol de la monarquía
- A pesar de ello, la ley de "lesa majestad" contempla penas de hasta 15 años
El Rey de Tailandia, Bhumibol Adulyadej, ha hecho un llamamiento a la unidad y ha pedido a sus súbditos que se apoyen mutuamente por el bien del país, en el discurso de celebración de su cumpleaños realizado tras las últimas protestas antigubernamentales.
"Tailandia se ha mantenido pacífica gracias a la unidad de los tailandeses y su amor por el país", ha afirmado el monarca que hoy cumple 86 años en una alocución retransmitida por todas las televisiones del país.
"El pueblo tailandés llevando a cabo sus obligaciones de forma adecuada contribuirá a la seguridad, felicidad y prosperidad del país en su totalidad", ha añadido el rey en una intervención leída con algunas dificultades y voz débil.
Tregua a los disturbios por el cumpleaños del monarca
El discurso institucional ha tenido lugar tras varios días de disturbios en Bangkok entre manifestantes antigubernamentales y la Policía que cesaron el martes por la mañana con una tregua acordada ante la celebración del cumpleaños del monarca.
La primera ministra, Yingluck Shinawatra, y su gabinete, estuvieron presentes en la recepción ofrecida en la localidad de Hua Hin por el rey su cumpleaños y que por primera vez tuvo lugar fuera de la capital.
El rey reside en el palacio de verano que la Familia Real tiene en esta localidad costera situada a unos 200 kilómetros al sur de Bangkok desde que abandonó en agosto el hospital Siriraj de Bangkok en el que había estado ingresado desde 2009.
Camisetas y banderolas amarillas
Miles de personas, equipados con camisetas y banderolas amarillas, color vinculado al monarca, esperaban desde la pasada noche en las calles de Hua Hin para ver pasar la comitiva real de camino al Palacio de Klai Kangwon, donde tuvo lugar la recepción.
La multitud ha ondeado las banderas y ha saludado con gritos de "larga vida al rey" el paso de la larga caravana de vehículos que vieron pasar arrodillados y, en muchos casos, con lágrimas en los ojos.
Coronado en 1946, el noveno soberano de la dinastía Chakri es reverenciado por gran parte de los tailandeses como si se tratara de un ser casi divino y adulado por la prensa del país.
Debate sobre le rol de la monarquía
No obstante, a raíz de la inestabilidad política por la que atraviesa el país, en la sociedad se ha abierto el debate a hurtadillas sobre el rol de la monarquía y, sobretodo, la estricta aplicación de la ley de "lesa majestad".
En los últimos años, varios cientos de tailandeses y algunos extranjeros han sido formalmente acusados de cometer este delito, cuando en la década de 1990 apenas se denunció uno decena de casos, según ha señalado el Grupo de Concienciación del Artículo 112, organización que hace campaña contra el uso de esta ley.
Ley de "lesa majestad"
La ley de "lesa majestad" contempla penas de hasta 15 años de cárcel para las personas declaradas culpables de infringirla.
La precaria salud de Bhumibol, quien aparece en público o concede audiencias en contadas ocasiones, causa preocupación y ansiedad entre la población por el futuro del país.
El heredero al trono es su único hijo varón, el príncipe Maha Vajiralongkorn, de 60 años, quien no ha heredado la popularidad de la que goza su padre.