La Generalitat firmará el decreto de convocatoria de la consulta soberanista en septiembre
- Homs no revela si ERC entrará en el Govern tras el pacto por la consulta
- El portavoz de la Generalitat cree que Rajoy es un demócrata y dialogará
La Generalitat catalana prevé firmar el decreto de convocatoria de la consulta soberanista "entre el 15 y el 30 de septiembre" tras el pacto que alcanzó la semana pasada el presidente Artur Mas con ERC, ICV-EUiA y la CUP para fijar la pregunta y celebrar el referéndum el 9 de noviembre de 2014.
Así lo ha anunciado este martes el consejero de Presidencia y portavoz del Govern, Francesc Homs, quien no ha concretado si ERC entrará en el Ejecutivo: "Se verá en las próximas semanas o meses. Me sabe mal no poderles anticipar nada, porque no lo sé", ha asegurado en respuesta a los periodistas.
Ha confiado en que el diálogo con el Estado posibilite la consulta, aunque ha abogado por que los contactos entre los presidentes Artur Mas y Mariano Rajoy sean "de forma reservada" para facilitar un acuerdo.
Homs ha hecho en varias ocasiones un emplazamiento a Rajoy a dialogar, y ha asegurado que el 'derecho a decidir' no es algo que pida un grupo de políticos catalanes, sino que responde a una "mayoría muy importante en Cataluña" que hace un año se manifestó en las elecciones autonómicas, posibilitando que en el Parlamento haya una mayoría de diputados a favor de la autodeterminación.
"Decir no a poder votar es insostenible en el tiempo por parte de un demócrata" y no tiene recorrido, ha aseverado Homs, que ha expresado su convencimiento de que diga lo que diga ahora el Estado, al final va a haber un diálogo con el Gobierno central y con Rajoy porque esta es la actitud propia que tienen los demócratas.
"Estoy convencido de que Rajoy es demócrata. Le pedimos que actúe en consecuencia y coherencia", ha destacado el portavoz, que ha pedido al Estado no confundir el 'derecho a decidir' con la independencia.
Una consulta también para los que no quieren la independencia
Así, ha dicho que lo que piden los catalanes no es la secesión, sino celebrar una consulta para saber qué mayorías hay en la sociedad catalana sobre cómo tiene que ser su relación con el resto del Estado: "El poder votar en la consulta vale tanto para los que están a favor como los que están en contra de la independencia".
Homs ha destacado que el redactado de la pregunta, con dos partes diferenciadas, es claro, y que si hay un resultado que sea mayoritario, con un respaldo "importante y masivo" de la ciudadanía con dos 'síes' que ganen por goleada, el Gobierno tiene muy claro lo que va a negociar con el Estado.
En cambio, el escenario será distinto si en Cataluña hay una baja participación o si las opciones en la consulta queden prácticamente empatadas: "Si la respuesta es menos clara, el mandato es menos nítido", ha agregado.