El Gobierno de Irak pierde el control de la ciudad de Faluya, ahora en manos de grupos yihadistas
- Al menos 55 yihadistas han muerto en un ataque aéreo y varios combates
- Parte de la población de Faluya se ha desplazado hacia Bagdad
El Gobierno de Irak ha perdido el control de la ciudad de Faluya pese al ataque aéreo lanzado por las fuerzas gubernamentales sobre la ciudad que ha causado la muerte de al menos 30 yihadistas. La ciudad, una de las más importantes de la región de Anbar, ahora está en manos de milicianos de la organización yihadista Estado Islámico de Irak y Levante, vinculada con Al Qaeda, según han informado medios locales. En las últimas horas, al menos 55 combatientes de la organización yihadista han muerto este sábado en un ataque aéreo de las fuerzas armadas iraquíes y en enfrentamientos con milicianos tribales y fuerzas de seguridad en la provincia, en el oeste de Irak, según fuentes de seguridad.
Los milicianos de la organización controlan ahora el sur de la ciudad de Faluya, mientras que insurgentes yihadistas de la misma organización también están desplegados en el centro de la ciudad, han informado fuentes de seguridad. Este sábado, un ataque aéreo sobre la ciudad ha causado la muerte de al menos 30 yihadistas, mientras que en Ramadi las milicias suníes, en colaboración con las fuerzas de seguridad, acabaron con la vida de otros 25 miembros del Estado Islámico en Ramadi, informa Efe.
Ahmed Abu Risha, jefe del Consejo de Salvación iraquí (milicias suníes que luchan contra Al Qaeda), ha indicado que se está preparando una operación militar para recuperar el control de la ciudad, aunque no dio más detalles. Gran parte de la población de Faluya se ha desplazado hacia Bagdad, a la espera de que se "ponga fin a los enfrentamientos" entre grupos armados y fuerzas de seguridad iraquíes, explicó a Efe una fuente de los servicios de seguridad.
Ofensiva en la provincia de Anbar
Este sábado, el primer ministro iraquí, Nour al Maliki, ha prometido derrotar a “todos los grupos terroristas” que actúan en la provincia de Anbar, donde las milicias yihadistas vinculadas a Al Qaeda se han apoderado de parte de las principales ciudades, Ramadi y Faluya.
"No vamos a cesar hasta que no hayamos derrotado a todos los grupos terroristas y salvado a nuestro pueblo en Anbar ", ha añadido Maliki , según declaraciones recogidas por la televisión Iraqiya estado citadas por Afp.
La violencia estalló este lunes en Ramadi , capital de la provincia tras el desmantelamiento de un campamento de manifestantes contra el gobierno instalado el año pasado, y que el Gobierno consideraba una "cueva de Al- Qaeda". La violencia se extendió rápidamente a la vecina ciudad de Faluya.
Los insurgentes han tomado barrios de las dos ciudades, una situación que recuerda los años que siguieron a la invasión estadounidense de 2003, cuando eran bastiones de la insurgencia.