La mayoría de los miembros de la Fed apoyó el inicio de la retirada de estímulos monetarios
- Por la mejoría acumulada en las condiciones del mercado laboral en EE.UU.
- La Fed rebajó de 85.000 a 75.000 millones de dólares las compras de bonos
La mayoría de los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC por sus siglas en inglés) de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos respaldaron la decisión de iniciar la retirada del programa de estímulo monetario en su pasada reunión de diciembre ante la mejoría del panorama económico en la primera economía mundial, indican las actas del encuentro publicadas este miércoles.
"La mayoría de los miembros acordaron que la mejoría acumulada en las condiciones del mercado laboral y la probabilidad de que esta mejoría fuese sostenida indicaron que el comité podría iniciar de manera apropiada la reducción del ritmo de compra de activos en esta reunión", señalan los documentos del FOMC.
En la última reunión del año, celebrada el 17 y 18 de diciembre, la Fed decidió rebajar de 85.000 millones de dólares a 75.000 millones mensuales el ritmo de compra de bonos iniciado en 2012 y que busca estimular la recuperación económica en el país.
Sin embargo, algunos miembros apuntaron que había que tener una cuenta una serie de consideraciones al tomar esta decisión, como el grado de confianza en las perspectivas de un crecimiento económico sostenido por encima de su potencial, una mejora continuada de las condiciones del mercado laboral o el regreso con el tiempo a un inflación coherente con el mando de la Fed.
La Fed defiende la eficacia del programa
De hecho, algunos expresaron su preocupación por la posibilidad de que se produzca un endurecimiento no intencionado de las condiciones financieras si la reducción de la compra de activos se malinterpreta pensando que indica que el Comité retira la política acomodaticia más rápido de lo previsto.
"En consecuencia, muchos miembros consideraron que el Comité debería proceder con cautela en la toma de su primera decisión de reducir el ritmo de la compra de activos y debería indicar que futuras reducciones se realizaran en pasos calculados", explica las actas, que remarcan que este proceso no se basa en una senda ya establecida.
Asimismo, la mayoría de los componentes del organismo defendieron la eficacia del programa de compra de activos, que sigue apoyando unas condiciones financieras acomodaticias, aunque una mayoría apunta que, aunque es difícil de calcular, es probable que esta eficacia descienda a medida que se mantengan las compras.
Por otro lado, en la reunión se debatió la posibilidad de reducir el umbral del 6,5%, el objetivo que debe alcanzar la tasa de paro antes de comenzar a subir de nuevo los tipos de interés, aunque finalmente decidió mantenerse e insistir en que el hecho de que pese a que se alcance esta meta no habrá un repunte inmediato de los tipos.
Algunos participantes consideraron que este cambio mandaría una clara señal de las intenciones del Comité y era una ajuste apropiado tras las últimas evoluciones del mercado laboral y la inflación. Sin embargo, otros consideraban que esto podría ser "confuso y restar credibilidad" a sus objetivos marcados.